Doriano Romboni, piloto talentoso y desafortunado

Tuvo mala suerte, recuerdan en Italia los expertos en motociclismo. Y hablan de su carrera, de esa sangre caliente que le hac¨ªa equivocarse en los momentos clave, de sus m¨²ltiples ca¨ªdas, de la lesi¨®n que frustrar¨ªa sus sue?os de grandeza. Doriano Romboni (Lerici, noroeste de Italia, 1968), Rombo para los amigos, tuvo la misma mala fortuna para morir. Iron¨ªas del destino, el expiloto falleci¨® ayer, en Latina, como consecuencia de las heridas tras un accidente en un circuito en el que un buen pu?ado de corredores, en activo, algunos, y retirados, otros, honraban la memoria de Marco Simoncelli, que perdi¨® la vida en el circuito de Sepang hace dos a?os.

Romboni, un tipo t¨ªmido, de gran coraz¨®n, form¨® parte de una generaci¨®n brillante para el motociclismo italiano. Fue uno de esos pilotos que en los noventa asomaba habitualmente por el podio, cuando los podios los copaban los italianos igual que ahora los espa?oles. Romboni fue, adem¨¢s de un piloto muy talentoso, un patriota. Lo demostr¨® en 1990, ayudando a Loris Capirossi a convertirse en el campe¨®n m¨¢s joven de la historia con 17 a?os.

Montado en una Honda alquilada, Rombo, junto a Casanova y Gresini, culmin¨® con un segundo puesto en Australia un acto de nacionalismo gracias al cual Capirossi se proclamar¨ªa vencedor de la carrera y del t¨ªtulo de 125cc frente a un desesperado Spaan. La alianza italiana le hizo la vida imposible al holand¨¦s al ralentizar el ritmo de la carrera e impedirle dar caza a su compatriota.

Romboni se reencontrar¨ªa con Capirossi en 250cc. Y conocer¨ªa tambi¨¦n a Biaggi, tantas veces rival, uno de los primeros que fue a socorrerle ayer, cuando ambos hab¨ªan pasado la barrera de los 40 y solo corr¨ªan ya por placer. Qu¨¦ mala suerte.

La misma que tuvo en 1993, cuando lideraba el campeonato de 250cc. Una ca¨ªda en la carrera de Holanda se sald¨® con una rotura de tibia y peron¨¦, la lesi¨®n que marcar¨ªa su carrera. Aquel a?o, a pesar de perderse cuatro carreras, fue quinto clasificado. Pero ya nunca conseguir¨ªa un t¨ªtulo mundial. S¨ª m¨¢s victorias. Y un podio en 500cc, de nuevo en Assen, con la Aprilia bicil¨ªndrica, que le supo a gloria.

Padre de dos hijos, separado, Romboni trabajaba para la Federaci¨®n Italiana de Motociclismo como formador de j¨®venes talentos y en 2014 iba a volver al Mundial como responsable en la pista del Team Italia.