El milagro de Eibar
El conjunto armero, fiel a su filosof¨ªa de que todos son ¡°iguales y no hay figuras¡±, es l¨ªder en Segunda mientras encara un futuro econ¨®mico incierto por una ampliaci¨®n de capital
¡°Unas veces le recog¨ªa Toni a ¨¦l en Durango y luego me recog¨ªan a m¨ª en Zaldibar y otras veces era al rev¨¦s¡±. La conversaci¨®n es tan banal, tan habitual, si no fuera porque Toni Ruiz era el secretario general del Eibar, ¨¦l era David Silva, campe¨®n del mundo con Espa?a y futbolista del Manchester City actualmente, y ¡°a m¨ª¡± significa Jos¨¦ Luis Mendilibar, el t¨¦cnico que llev¨® al Eibar a Primera durante 10 minutos en la temporada 2004-05 en el memorable partido frente al Racing de Ferrol que cerraba la temporada. Conviene ponerse en situaci¨®n: entonces, que estuvo a punto de ascender a Primera, y ahora, que va l¨ªder en Segunda, Eibar era igual: una ciudad de unos 27.000 habitantes y que pas¨® a la historia por ser la primera en proclamar la Rep¨²blica en 1934, por ser una frontera objetiva entre Bizkaia y Gipuzkoa, o sea entre el Athletic y la Real Sociedad, por haber tenido un pasado armero y por tener entre sus habitantes, entre otros a Mario Onaind¨ªa. Futbol¨ªsticamente, se sabe que todo Eibar cabe en el estadio de Anoeta y que sus habitantes solo llenar¨ªan la mitad del nuevo San Mam¨¦s, es decir, que en las dos categor¨ªas principales del f¨²bol espa?ol es el club de menor presupuesto (3,5 millones de euros), de menor poblaci¨®n y el estadio con menor aforo (5.600 localidades). ?Puede en esas condiciones el Eibar aspirar a subir a Primera?
Es el club de 1? y 2? con menos poblaci¨®n, menos presupuesto
y menos aforo
¡°Sin ninguna duda, como ya lo hicieron el Numancia y el Extremadura¡±, afirma ?lex Aranzabal, presidente, quien insiste en que las instalaciones del equipo armero ¡°est¨¢n por encima de la media¡±, aunque todo se concentre en la capacidad reducida de un estadio al que se accede tras subir una cuesta que es un peregrinaje emocional, casi una se?a de identidad de lo que significa jugar en el Eibar. ¡°Aqu¨ª, antes y ahora, hay un estilo innegociable: todos somos iguales, sin figuras, y quien no piense as¨ª no tiene cabida. El propio grupo le demostrar¨¢ su error¡±. Quien as¨ª habla es Gaizka Garitano, actual entrenador y militante del equipo que estuvo ¡°10 minutos en Primera en 2005¡±, alineado junto a futbolistas como Silva, ¡°que era un jugador muy bueno que enseguida comprendi¨® lo que significaba el valor del grupo, la se?a de identidad de este colectivo¡±. Hoy Gaizka Garitano es el entrenador de una plantilla que prefiere mirar antes lo que le distancia del abismo de la clasificaci¨®n, el descenso, que del para¨ªso del ascenso. ¡°Hay muchos equipos que son mucho mejores que nosotros, Deportivo, Sporting, Zaragoza... pero viendo jugar a mi equipo tampoco me sorprende lo que estamos consiguiendo¡±.
Otra vez el yin y el yang de una situaci¨®n a la que le faltan muchas estaciones para llegar a su destino. Cuando el tren se pare, un poco despu¨¦s de la ¨²ltima garita, el 6 de agosto, el Eibar, est¨¦ donde est¨¦ (y lleg¨® a estar 18 a?os seguidos en Segunda), habr¨¢ tenido que resolver una situaci¨®n tan legal como injusta. Ese d¨ªa habr¨¢ tenido que ampliar su capital social de 422.253 euros a 1.724.272,95 euros, casi cinco veces m¨¢s a pesar de tener sus cuentas saneadas. ¡°Y eso a pesar de que ya se hable del modelo Eibar de gesti¨®n¡±, recuerda Aranzabal, ¡°cuando nos propusimos y cumplimos el mantra del d¨¦ficit cero. Ahora resulta que tenemos que cumplir con una ley y una cantidad que se deriva no de nuestra buena gesti¨®n sino de la proporci¨®n de gasto de clubes que quiz¨¢ se han movido en otros par¨¢metros de gasto¡±. La sensaci¨®n en Eibar es que el club debe pagar cuentas ajenas, que su ajuste presupuestario (3,5 millones, la desaparici¨®n del segundo equipo, el ascenso de Segunda B el a?o pasado) y las contrataciones mod¨¦licas est¨¢n penalizadas.
En tanto llega el 6 de agosto, el Eibar vive de su presente y de su pasado. Hoy es el jefe, ¡°un patrimonio activo¡±, seg¨²n su presidente, ¡°fruto de una econom¨ªa de guerra¡± que en vez de ser mod¨¦lica est¨¢ en riesgo de ser devorada por las met¨¢licas estructuras del f¨²tbol. Pero el Eibar sigue apelando a lo que su presidente denomina ¡°como el coaching del f¨²tbol¡±. Ciertamente, el equipo armero ha sido un destino habitual de futbolistas que necesitaban dotarse de car¨¢cter para triunfar, o de recuperar las fuerzas para el ¨¦xito. Silva lleg¨® con 18 a?os, y pas¨® a la historia del Eibar por su gesto de repudiar el gol y echar el bal¨®n fuera en el minuto 92 contra el Lleida cuando el marcador se?alaba un 1-1 y un rival estaba en el suelo. Un tanto que no fue y que hubiera podido llevar al Eibar a Primera.
Pero en aquel equipo no solo estaba Silva, sino tipos como Iraizoz (hoy portero del Athletic), Karmona (finalista con el Alav¨¦s de la UEFA), y por ese equipo ha pasado ilustres notables como Ciriaco Errasti, Garate, Gisasola, Diego (campe¨®n de Liga con la Real), Xabi Alonso, Joseba Llorente y Barkero. O Garmendia, el portero que trabajaba de carnicero y que consigui¨® marcar un gol de porter¨ªa a porter¨ªa.
Es un modelo de esp¨ªritu popular que se basa en las personas¡±, dice el presidente
A punto de cumplir 75 a?os de historia, el Eibar se vanagloria de ser un referente educativo del f¨²tbol. ¡°Una buena gesti¨®n, un modelo basado en el compromiso de las personas sin prevalencia de las figuras y un esp¨ªritu popular como sustrato del club¡±, seg¨²n ?lex Aranzabal. Todo eso est¨¢ en juego fuera y dentro del terreno de juego. En la Bombonera, como se conoce a Ipurua, las cosas van miel sobre hojuelas; en los despachos, el club libra una batalla desigual frente a la pregunta del mill¨®n: ?C¨®mo se busca mill¨®n y medio de euros en seis meses? ¡°Nuestra base social tiene muchos menores de 18 a?os, muchos jubilados, muchos desempleados y gente con empleos precarios¡±, afirma Aranzabal.
El Eibar es l¨ªder en Segunda y va ganando batalla a batalla. Lo que no se entiende es lo que sucede fuera del campo de juego en un partido que concluye en agosto, quiz¨¢s con el Eibar deportivamente en Primera Divisi¨®n, en cualquier caso ¡°con la satisfacci¨®n de lo hecho¡±, como dice Garitano. ¡°Hasta entonces conviene no sacar pecho porque enseguida te lo meten para adentro¡±, puntualiza. Qui¨¦n sabe si el modesto Eibar derrocar¨¢ la monarqu¨ªa del f¨²tbol.
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