¡°Tengo que adaptarme al estilo¡±

Diego Costa se visti¨® ayer, de negro y fl¨²or, con los colores de La Roja. El traje le qued¨® algo inc¨®modo y, camino de Brasil, ese que enfil¨® desde su casa, desde la orilla del Manzanares, pareci¨® quedarle lejos su mejor actuaci¨®n. Ni fr¨ªo hizo en el Calder¨®n para dar la bienvenida al delantero brasile?o, nacionalizado como futbolista de la selecci¨®n espa?ola la noche que se rindi¨® tributo al mito Aragon¨¦s. Jug¨® convertido en s¨ªmbolo de la integraci¨®n para la campeona del mundo, el d¨¦cimo futbolista extranjero en defender los colores del combinado hispano desde que el h¨²ngaro Ladislao Kubala, el 5 de julio de 1953 en el Monumental de Buenos Aires contra Argentina, se convirtiera en el primer jugador nacido lejos de las fronteras espa?olas en vestirse con la zamarra de la selecci¨®n. El brasile?o de Lagarto se uni¨® a la lista, el pecho por delante, listo para pelear por Espa?a en Brasil, donde naci¨®. Le falta un punto, pero Del Bosque parece dispuesto a confiar en ¨¦l y tal vez lo merezca. ¡°Se ha incorporado Diego, y poco a poco ir¨¢ entrando en la din¨¢mica¡±, dijo Del Bosque sobre el debutante. ¡°Tengo que adaptarme al estilo de Espa?a¡±, reconoci¨® el punta colchonero. ¡°No es f¨¢cil en el primer partido, puedo dar mucho m¨¢s¡±.

Diego ir¨¢ entrando poco a poco en la din¨¢mica del equipo¡± Vicente del Bosque

Tan valiente como lo fue Diego Costa al elegir, lo fue anoche Vicente Del Bosque, el seleccionador de Espa?a, al probar cosas. Opt¨® por mover alineaci¨®n contra los italianos, consciente como es de que era la ¨²ltima prueba antes de la lista mundialista. Las horas que le quedan al seleccionador camino de la rev¨¢lida en Brasil son una cuenta atr¨¢s y lo sabe, as¨ª que no le tembl¨® el pulso al hacer pruebas. Las hizo en todo el campo, con Azpilicueta en el lateral derecho (a pesar de estar jugando en el izquierdo en el Chelsea de Jos¨¦ Mourinho) y Javi Mart¨ªnez de central; con Thiago Alc¨¢ntara y Cesc, pese a las molestias que arrastra en el pubis, en la medular para acompa?ar a Busquets, prescindiendo de Xavi y de Xabi Alonso en el centro del campo, con Pedro e Iniesta por delante.

¡°Tengo que adaptarme al estilo¡±

Lo primero que hizo Costa anoche, tras un pase al espacio del de Fuentealbilla, fue darle un empuj¨®n al defensa que el ¨¢rbitro cobr¨® como falta. A partir de ah¨ª, tuvo constancia de d¨®nde estaba y se cort¨®. Costa ya demostr¨® la v¨ªspera, en los ejercicios del entrenamiento, cuando motiv¨® incluso la sonrisa de Del Bosque, que le cuesta jugar a uno o dos toques, as¨ª que el equipo le busc¨® antes al espacio, porque en eso se ofreci¨® bien, que en la combinaci¨®n, terreno en el que result¨® algo menos fruct¨ªfero.

En profundidad, como referencia a la espalda de defensas tan cerradas como la de Italia ayer, paciente y serena, sabe tirar movimientos y sin bal¨®n se movi¨® listo, justo como pretend¨ªa el seleccionador. As¨ª que la prueba sali¨® bien en ese sentido, por poco brillante que fuera su juego porque permiti¨® a su espalda el rondo y a partir de ah¨ª, se impuso Espa?a. Y adem¨¢s presion¨® el equipo desde la primera l¨ªnea, con su figura de avanzadilla, por lo que La Roja, de negro fl¨²or, jug¨® siempre, incluso sin bal¨®n, muy cerca de Buffon.

T¨ªmido, al colchonero se le not¨® que fue su primer baile con los campeones

T¨ªmido, al colchonero se le not¨® que era su primer baile con los campeones, pero ten¨ªa alrededor suficiente desparpajo como para que no se le notara al equipo. Por ah¨ª apareci¨® Pedro al quite, siempre vertical, para desbordar o para volver a marcar, enrachado como est¨¢. Le sobran muescas en el rev¨®lver al colchonero pero le faltan horas de vuelo en los andares para salir a bailar con los campeones del mundo. Y todo lo que tiene de valiente lo a?ora de tunante a la hora de interpretar la partitura. Realiz¨® cuatro remates, pero ninguno a puerta, por mucho empe?o que puso.

No fue el mejor Costa, y comparado con Thiago, que volv¨ªa, pura osad¨ªa, o con Javi Mart¨ªnez, que jug¨® de central en ausencia de Piqu¨¦ y sac¨® nota, todo oficio, al hispanobrasile?o se le vieron algunos problemas para ensamblarse en el estilo de la selecci¨®n. Estuvo inc¨®modo en su traje nuevo, pero tan pele¨®n y batallador como siempre.