El Madrid cede su primera derrota en la Liga en un encuentro memorable

Perdi¨® el Madrid en la Liga; su primera derrota tras 27 jornadas de excelsa trayectoria. Cayeron los de Laso en el Palacio; no lo hac¨ªan en temporada regular desde el 14 de abril del a?o pasado. Sucumbieron los blancos ante el vigoroso Valencia de Perasovic (el primer equipo en anotar m¨¢s de 87 puntos ante el conjunto madridista este curso), pero lo hicieron exprimiendo a lo grande su orgullo, vendiendo cara la conquista de su feudo. Fue una oda al baloncesto. Un conmovedor homenaje al esp¨ªritu competitivo. Un partido memorable con 215 puntos (105-110), el duelo m¨¢s anotador sin pr¨®rroga en el ¨²ltimo lustro.

Desenfocado primero ante la zona planteada por su rival en el segundo cuarto, que rompi¨® el partido con un parcial de 3-18; ofuscado despu¨¦s por la incapacidad de contener la rotaci¨®n naranja (con siete jugadores por encima de los 10 puntos) y desquiciado m¨¢s tarde entre un rosario de t¨¦cnicas por protestar varias decisiones arbitrales discutibles, el l¨ªder dobl¨® la rodilla en su semana m¨¢s exigente. Pero lo hizo tras protagonizar un ¨¦pico intento de remontada que a punto estuvo de llevarle a levantar 23 puntos de desventaja en el ¨²ltimo cuarto (66-89, m. 31). No le alcanzaron las fuerzas, a pesar de los 39 puntos que anot¨® en los ¨²ltimos nueve minutos, pero salv¨® el basketaverage particular con el Valencia (75-82, en la ida), que ahora queda a dos victorias del Madrid.

Apenas 38 horas despu¨¦s de sellar su clasificaci¨®n para la Final Four de Mil¨¢n en el quinto partido de la serie de cuartos ante Olympiacos, el Madrid volv¨ªa a saltar a la pista para continuar su maratoniano calendario. Era el partido n¨²mero 62 de la temporada para los blancos y enfrente ten¨ªa al Valencia de Perasovic, el segundo mejor equipo de la Liga. Era, por cartel y estad¨ªstica, el mejor partido de la historia de la liga regular, como lo anunci¨® la ACB. Nunca antes el l¨ªder y el segundo de la clasificaci¨®n se hab¨ªan enfrentado m¨¢s all¨¢ de la jornada 10 con un porcentaje de victorias tan alto: 94%. Antes de medirse en el Palacio sumaban 52 triunfos de 55 posibles entre ambos (27-0 y 25-3). Dos equipos lozanos y desinhibidos que se med¨ªan entre la descompresi¨®n por las metas volantes ya alcanzadas, la fatiga acumulada (octavo partido en 17 d¨ªas para los blancos, el cuarto en esta semana) y la dosificaci¨®n con vistas a la apasionante recta final de curso que les espera a ambos en el escenario nacional y el continental (los de Laso, a 18 d¨ªas de la Final a Cuatro de la Euroliga; los naranja a s¨®lo cuatro d¨ªas de medirse al Unics Kaz¨¢n en la Fonteta en la ida de la final de Eurocopa). Respondiendo a las expectativas, result¨® un pulso antol¨®gico.

Los dos equipos lucieron de inicio lo mejor de su repertorio. Sali¨® desatado el Valencia que, liderado por Doellman y Dubljevic, firm¨® un parcial de 5-14 en los primeros tres minutos. Respondi¨® con firmeza el Madrid con los triples de Llull y Rudy (10 puntos cada uno en el primer cuarto) y la faena de Felipe y Slaughter (15-14, m. 7, tras un parcial de 10-0 de los blancos). Y, a partir de ah¨ª, comenz¨® un febril intercambio de canastas que acredit¨® el sobresaliente nivel de los contrincantes. Dur¨® exactamente hasta el minuto 15 (39-36), cuando Perasovic tir¨® de cat¨¢logo y rompi¨® la inercia anotadora de los locales.

El Madrid se estrell¨® ante la defensa en zona del Valencia: un 1-3-1 con Doellman en cabeza, Van Rossom atr¨¢s, Aguilar en el centro y Sato y Lucic en los costados que sec¨® la producci¨®n del per¨ªmetro blanco. Los de Laso pasaron de un 5 de 8 en triples en el primer cuarto a un 0 de 8 en el segundo. El vigor de la rotaci¨®n de Perasovic hizo el resto. La pareja Van Rossom-Lucic martille¨® el aro madridista con un parcial de 3-18 (14 puntos entre ambos en ese tramo) que sacudi¨® el marcador: 42-54, al descanso. Los naranja prolongaron su afinaci¨®n en esos primeros 20 minutos con un notable 13 de 16 en tiros de dos (81%), mientras los blancos solo anotaron tres tiros libres de Mirotic en los ¨²ltimos cinco minutos del segundo acto. Una falta antideportiva pitada a Rudy en una acci¨®n con Van Rossom bajo el tablero desat¨® adem¨¢s la crispaci¨®n de los blancos y sus aficionados.

Una doble t¨¦cnica a Sergio Rodr¨ªguez y Rudy por sendas protestas certific¨® la entrada del Madrid en el laberinto

No hab¨ªa noticias de Mirotic ni de Bourousis, no ten¨ªan minutos Mejri ni Dani D¨ªez, no encontraba la batuta El Chacho, no afinaba Carroll, y Slaughter ten¨ªa que ser atendido por los fisios por problemas en la zona de las cervicales. No paraba el Valencia, ahora con Sato al frente. Una canasta de Doellman, firme candidato a sustituir a Mirotic si este se marcha a la NBA, puso al Madrid contra las cuerdas mediado el tercer cuarto (56-73, m. 26) y una doble t¨¦cnica a Sergio Rodr¨ªguez y Rudy por sendas protestas certific¨® la entrada del Madrid en el laberinto (61-81, m. 29). Laso reclut¨® de nuevo a Darden, dio carrete a los que no hab¨ªan participado hasta entonces en el partido y prob¨® con una zona 2-3. Pero el Valencia la desmont¨® sin remilgos a base de triples.

La diferencia se elev¨® hasta los 23 puntos (66-89, m. 31), pero el Madrid reaccion¨® entonces con orgullo de l¨ªder. De nuevo con defensa en zona, de nuevo con el car¨¢cter de Felipe Reyes por bandera, de nuevo con las piernas de Llull y el impulso del Chacho, y de nuevo con el empuje de su entregada afici¨®n, los blancos acortaron la distancia en un ¨¦pico intento de remontada con un parcial de 37-19 en nueve minutos (103-108, a falta de 10 segundos para el final). No le alcanz¨® para lograr la gesta de la victoria, pero si para salvar el basketaverage particular con el Valencia, al que gan¨® por siete puntos en La Fonteta. El l¨ªder vendi¨® cara su primera derrota.