Una batalla tan psicol¨®gica como t¨¢ctica
"Ramos enga?a.Quieren que vayamos pensando que somos los mejores¡±, dice Juanfran Frente al discurso humilde del Atl¨¦tico, en la c¨²pula directiva y el vestuario del Real Madrid se debate entre propagar un mensaje hegem¨®nico o uno m¨¢s moderado
Medio de oficio, estratega ahora, Simeone emiti¨® el pasado lunes un flashazo ante los periodistas que asistieron a la jornada de puertas abiertas programada por el Atl¨¦tico en el palco VIP del Calder¨®n. ¡°El medio del campo puede ser muy importante en el desarrollo del juego¡±, advirti¨® al ser preguntado por cu¨¢l ser¨¢ la clave en la final de la Champions frente al Real Madrid, dentro de tres d¨ªas en Lisboa. Y, en consecuencia, as¨ª obra t¨¦cnico rojiblanco, buen conocedor de los c¨®digos que envuelven una cita tan decisiva como la que afronta su equipo. Es consciente El Cholo de que el duelo contra el conjunto de Carlo Ancelotti tiene una doble vertiente. Por un lado, la batalla t¨¢ctica; por otro, el pulso de los mensajes en la guerra psicol¨®gica.
Convencido de que la batalla en la medular ser¨¢ la que decida la final, el argentino maneja diversas alternativas, siempre amarrado a su idea innegociable de que el equipo debe construirse de atr¨¢s hacia adelante. La inc¨®gnita de Diego Costa, que apura sus escasas opciones de jugar con una visita rel¨¢mpago a la doctora Kovacevic, en Belgrado, condicionan su plan. En la sesi¨®n del martes, a¨²n sin Arda, al que ha visitado su m¨¦dico de confianza en Turqu¨ªa por los problemas en la cresta il¨ªaca que arrastra a ra¨ªz de un golpe de Cesc en el Camp Nou, el preparador rojiblanco ensay¨® con un trivote formado por Tiago, Gabi y Mario Su¨¢rez. Este ¨²ltimo como escoba y sus dos compa?eros unos metros m¨¢s adelantados. En esa ecuaci¨®n, Koke y Arda, que podr¨ªa jugar inflitrado, (o Ra¨²l Garc¨ªa) actuar¨ªan desplazados en los costados y Villa ser¨ªa el ¨²nico punta. No parece probable, sin embargo, que Simeone se decante por esta variable. Sus maniobras no se contemplan m¨¢s all¨¢ de un simple juego al despiste. En la probatura de hoy en el Cerro del Espino, Gabi y Tiago volvieron a actuar de timoneles, con Ra¨²l y Koke en las bandas y Adri¨¢n y Villa como doble referencia.
Convencido de que la final se decidir¨¢ en la media, Simeone juega al despiste al emplear diferentes sistemas t¨¢cticos
En la misma l¨ªnea que su t¨¦cnico, Juanfran, el jugador de campo m¨¢s empleado por Simeone en la Liga (3.149 minutos) y el segundo en la Champions, igualado con Gabi (990), apunta a la media como epicentro del pulso en Lisboa. ¡°En la Copa nos pillaron un poco de imprevisto, con Di Mar¨ªa, Modric y Xabi Alonso nos superaron en el centro del campo y se llevaron el partido, pero en la Liga fue diferente. Ten¨ªamos la lecci¨®n aprendida. Seguro que Ancelotti est¨¢ buscando alternativas, pero nosotros tambi¨¦n debemos buscarlas porque al fin y al cabo s¨®lo empatamos el partido, no ganamos¡±, record¨®.
Se refer¨ªa el defensa a dos partidos que suponen una buena piedra de toque para dise?ar la cita del s¨¢bado. En el de la Copa, la presencia de Di Mar¨ªa como interior descuadr¨® al Atl¨¦tico. El Madrid pas¨® como un rodillo (0-2) por el Calder¨®n. En el campeonato dom¨¦stico, el Atl¨¦tico se repuso con Gabi y Mario como diques de contenci¨®n. Ese d¨ªa, como la ida copera en el Bernab¨¦u, el enfrentamiento fue muy ¨¢spero. ¡°Ser¨¢ una final de fricci¨®n y mucha ansiedad¡±, vaticin¨® Simeone. Vislumbra el argentino un partido bronco y ¨¢spero, muy exigente en el plano f¨ªsico ante un rival muy potente en el cuerpo a cuerpo. ¡°Sabemos c¨®mo ganar¡±, avis¨® God¨ªn.
En el Madrid, mientras, existe una dicotom¨ªa. Una doble vertiente en la directiva y en el vestuario resumida en aquellos que proponen transmitir se?ales hegem¨®nicas que remitan al historial europeo del club y otros partidarios de un discurso m¨¢s prudente. Florentino P¨¦rez se mueve entre dos aguas, entre atender a las personas de su entorno que le proponen una comparecencia p¨²blica para reafirmar la posici¨®n dominante del Madrid en los grandes escenarios y esas otras que apuestan por una posici¨®n m¨¢s moderada. Estas ¨²ltimas piensan m¨¢s en justificarse en el caso de derrota que en intentar presionar al Atl¨¦tico.
Ayer, Ancelotti quiso dejar claras las intenciones de su equipo. ¡°No vamos a jugar para bloquear al equipo contrario sino para imponer nuestra calidad y nuestro estilo¡±, indic¨® el italiano, que baraja tres opciones (Illarramendi, Casemiro y Khedira) para sustituir al sancionado Xabi Alonso, capital en la media blanca. ¡°Es mi s¨¦ptima final [gan¨® dos como jugador y otras dos como entrenador] y debo transmitir la experiencia y crear el ambiente para prepararla lo mejor posible¡±, manifest¨®. Tambi¨¦n confirm¨® que Cristiano y Bale se encuentran en condiciones de jugar. No as¨ª Pepe y Benzema.
El entorno de Florentino P¨¦rez le propone hacer una comparecencia p¨²blica antes del duelo en Lisboa
Desde el aspecto mental, el mensaje que pretende enviar el Atl¨¦tico es, sin renunciar a credenciales, el de la humildad. En este ¨²ltimo sentido, las se?ales han comenzado a lanzarse de un lado y otro. En los micr¨®fonos parece haberse desatado la otra batalla, la psicol¨®gica. ¡°El Atl¨¦tico es el favorito¡±, expuso ayer Sergio Ramos. ¡°Est¨¢ al cincuenta por ciento¡±, cifr¨® Simeone. ¡°Ramos intenta enga?ar. No hay favorito en esta final. Quieren que vayamos pensando que somos los mejores¡±, indic¨® este mi¨¦rcoles Juanfran en rueda de prensa. En el vestuario rojiblanco opinan que los jugadores del Madrid pretenden regalarles los o¨ªdos para traspasarles presi¨®n y un exceso de confianza.
En medio de este tira y afloja persuasivo y el ejercicio de la ret¨®rica, tambi¨¦n se ha colado la m¨ªstica. El Atl¨¦tico se desplaz¨® esta tarde hasta Los ?ngeles de San Rafael (Segovia), el b¨²nker del equipo en el doblete de 1996, as¨ª como en la pretemporada de esta campa?a y en los d¨ªas previos a la final de la Copa conquistada el curso pasado en el Bernab¨¦u. ¡°El que mejor se a¨ªsle de los factores externos tendr¨¢ mucho ganado¡±, argument¨® Simeone. La contienda, tan psicol¨®gica como t¨¢ctica, ya est¨¢ en marcha.
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