Qatar, el eje Par¨ªs-Barcelona
El emirato combina su estrategia deportiva en el PSG y su patrocinio econ¨®mico en el Bar?a
El conflicto de inter¨¦s cristaliz¨® en el dulzor post-Mundial del verano, cuando el Bar?a quiso fichar a Marquinhos. A Luis Enrique le interesaba la velocidad de un central muy codiciado, de 20 a?os, para reforzar su defensa. Incluso lo hab¨ªa se?alado como su objetivo prioritario nada m¨¢s tomar las riendas del equipo. Pero el PSG, propietario del jugador, respondi¨® con un contundente no mediante la intervenci¨®n del emir catar¨ª Tamim ben Hamad al-Thani, su m¨¢ximo accionista.
El caso Marquinhos simboliza la curiosa doble presencia del fondo soberano del emirato de Qatar en el club catal¨¢n y en el franc¨¦s, esta noche adversarios. En Par¨ªs, la rama deportiva de una de las fortunas m¨¢s imponentes del planeta ¡ªQatar Sport Investments, QSI¡ª ejerce de due?a del club desde que en junio de 2011 adquiri¨® el 70% de sus acciones por 40 millones de euros, meses antes de que desembolsara otros 29 para hacerse con el resto.
En la capital francesa, no es un secreto para nadie que Nasser al-Khela?fi, el presidente del PSG, est¨¦ planeando consolidar la estrategia deportiva del club, buscando un sustituto a Leonardo, su ¨²ltimo director deportivo ¡ªpodr¨ªa ser ¨¦l mismo seg¨²n inform¨® L'?quipe¡ª, con el fin de ganar la Champions e instalarse entre los cinco mejores equipos de Europa antes de 2018. ¡°Estamos aqu¨ª para muchos a?os. Este club tiene un gran potencial¡±, repiti¨® m¨¢s de una vez el m¨¢ximo dirigente qatar¨ª, que desde su llegada al club invirti¨® 380 millones en fichajes.
No es un secreto tampoco para nadie que al-Khela?fi est¨¦ desarrollando a todo trapo la mercadotecnia del PSG, quintuplicando en tres a?os, de 15 millones a 80, el volumen de negocio de la empresa en este aspecto. El objetivo es compensar la p¨¦rdida de 50 millones anuales impuesta por el fair-play financiero, por el que la FIFA denunci¨® un acuerdo de patrocinio con QTA, representante del Ministerio de Turismo Qatar¨ª, que promet¨ªa en 2013 150 millones al a?o.
En Barcelona, la intervenci¨®n de los qataris se viste de otro aspecto. El fondo soberano del emir al-Thani, que accedi¨® al trono en junio de 2013, act¨²a solo de patrocinador, formaliz¨¢ndose con el estatuto p¨²blico del Bar?a, un club que pertenece a sus socios. La presencia de los qatar¨ªs en Catalu?a se resume de momento con un patrocinio ¡ªfirmado en verano de 2013¡ª por poner publicidad en la camiseta (Qatar Airways), el museo y el estadio, por el que el club azulgrana ingresar¨¢ 96 millones en tres a?os.
Sin embargo, los qatar¨ªs se plantean la posibilidad de revisar su intervenci¨®n pol¨ªtica y su contribuci¨®n econ¨®mica en 2016, cuando est¨¢ prevista la celebraci¨®n de las pr¨®ximas elecciones presidenciales en el Barcelona. No cabe duda de que, hasta esta fecha, Marquinhos se quedar¨¢ en casa.
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