Tres ascensos sin recompensa

Se llama Albert S¨¤bat, es base, tiene 29 a?os, juega en el Ford Burgos y compite en la Adecco Oro. Su caso es especial, ins¨®lito. Acumula ya tres ascensos a la Liga Endesa, para m¨¢s inri con tres equipos diferentes, pero nunca ha podido disfrutar del premio que obtuvo a pulso en la cancha junto a sus compa?eros. Ni ¨¦l, ni los dos ¨²ltimos equipos con los que consigui¨® el reto pudieron saborearlo: el Alicante en 2013 y el Ford Burgos en 2014. Los requisitos econ¨®micos que exige la ACB frustraron los ascensos de ambos, y en el caso del club burgal¨¦s por segundo a?o consecutivo. La experiencia de S¨¤bat, del Alicante y del Burgos, deja en evidencia la paradoja del baloncesto de ¨¦lite espa?ol. Varios clubes malviven en la Liga Endesa. Algunos deb¨ªan haber descendido atendiendo a su clasificaci¨®n final, pero fueron repescados gracias a que los que ten¨ªan que subir de la Adecco Oro no contaban con los m¨ªnimos que exige la ACB. En el caso del Burgos, por ejemplo, unos cinco millones de euros, convertirse en una Sociedad An¨®nima Deportiva y contar con un pabell¨®n con un aforo m¨ªnimo para 5.000 espectadores.

En 2012, S¨¤bat ya se gan¨® el derecho a probar las mieles de la m¨¢xima categor¨ªa con el Canarias, pero entonces, una decisi¨®n t¨¦cnica de ¨²ltima hora, adoptada mucho tiempo despu¨¦s de que le hubieran prometido que iba continuar formando parte de la plantilla, hizo trizas su ilusi¨®n de competir con los mejores. El base catal¨¢n no dramatiza su situaci¨®n. Todo lo contrario. ¡°Soy perseverante y no me siento frustrado¡±, puntualiza. ¡°Me da mucha rabia porque no tengo la recompensa justamente ganada en la pista. Mis dos ¨²ltimos equipos no han podido hacer efectivos los ascensos que nos ganamos en la cancha, pero yo no me siento ni jugador ACB ni jugador LEB, sino jugador de baloncesto. Podr¨ªa estar en la ACB, pero de todas formas estoy orgulloso de mi carrera, aunque no haya llegado al punto m¨¢ximo de competitividad. Eso s¨ª, me gustar¨ªa mucho poder demostrar alg¨²n d¨ªa que puedo jugar en la ACB¡±.

¡°Me da rabia pero soy perseverante y no me siento frustrado¡±, afirma el base catal¨¢n

S¨¤bat, de Llagostera, el peque?o pueblo gerundense cuyo club de f¨²tbol ha logrado la haza?a de competir en Segunda Divisi¨®n, se dedic¨® al baloncesto instigado por su hermano mayor, Oriol. ¡°Se me daba bastante bien. Hubo un a?o en que no pudimos hacer equipo porque no ¨¦ramos suficientes y me fui al Sant Josep de Girona¡±, cuenta Albert. Aqu¨¦l chaval de 12 a?os empez¨® a destacar y, con solo 17 debut¨® en la m¨¢xima categor¨ªa aunque fuera de forma circunstancial. Era el tercer base del equipo pero, debido a las lesiones, el entrenador, Joan Llaneza, confi¨® en ¨¦l y le dio la alternativa. Fue en la cancha del Valencia, en mayo de 2003. Cuando era junior disput¨® el Europeo Sub-20 con una selecci¨®n espa?ola en la que estaban Marc Gasol, Sergio Rodr¨ªguez y Carlos Su¨¢rez, entre otros. Madur¨® como jugador en equipos como el Figueres, el Lleida, el Tenerife, el Ciudad de Vigo, el Vic y el Sant Josep de Girona. ¡°En 2010 me lleg¨® una oferta del Canarias por dos a?os. En el segundo nos sali¨® todo redondo y quedamos primeros. Fue un poco duro porque, cuando se acab¨® la temporada, me dijeron que seguir¨ªa. Pero lleg¨® el verano y no me dec¨ªan nada. Ve¨ªa que renovaban a otros jugadores. Hasta que habl¨¦ con mi representante y me dijo que no era verdad todo lo que me hab¨ªan prometido. Fue duro, porque adem¨¢s hab¨ªa hecho un buen a?o y hab¨ªa sido titular¡±. Precisamente gracias a su buena temporada con el Canarias le llam¨® el Alicante. ¡°Firm¨¦ al cabo de unos pocos d¨ªas. Y all¨ª, lo mismo. Ten¨ªamos un buen equipo, experimentado. Quedamos terceros y nos jugamos el ascenso en el playoff. Ganamos el quinto partido en Andorra. Logramos el ascenso un jueves y el martes siguiente ya hab¨ªan anunciado que no se pod¨ªa subir¡±, relata.

¡°La Adecco Oro puede perder la identificaci¨®n de las ciudades con sus equipos¡±

Y con el Ford Burgos, el pasado mes de junio, volvi¨® a sucederle tres cuartos de lo mismo. En este caso, era el segundo a?o seguido en que el equipo lograba el ascenso, pero el club no pod¨ªa afrontar el salto de presupuesto que implicaba, de los 800.000 euros que tiene ahora a los ocho millones con los que deb¨ªa contar para ingresar en la Liga Endesa, seg¨²n fuentes de su directiva. Jorge Garc¨ªa, un p¨ªvot cordob¨¦s de 37 a?os, vivi¨® esos dos ascensos frustrados tras haber protagonizado cuatro que s¨ª se materializaron: Alicante (2000 y 2009), Bilbao (2004) y Fuenlabrada (2005). ¡°Lo que ha sucedido frena la evoluci¨®n de los clubes y de los jugadores¡±, afirma el p¨ªvot cordob¨¦s. ¡°La segunda categor¨ªa corre el riesgo de convertirse en una Liga de desarrollo sin identificaci¨®n de las ciudades con sus equipos. Hay que flexibilizar las condiciones para cumplir con los requisitos del ascenso¡±.

La esperanza es lo ¨²ltimo que se pierde. Andreu Casadevall, el experimentado entrenador del Burgos, trata por tercer a?o consecutivo de repetir el ascenso. ¡°Andreu nos dijo que lo del a?o pasado estuvo muy bien, pero que esta temporada empez¨¢bamos de cero y nuestra ventaja es que ya sabemos lo que cuesta conseguir el reto¡±, concluye S¨¤bat.