De Gea, ?para qu¨¦?
Lleg¨® al Madrid hace una temporada, tras ejecutar un fabuloso Mundial en Brasil, donde fue nombrado el mejor portero del torneo. Tal distinci¨®n acab¨® siendo un asunto menor, teniendo en cuenta que el peor Messi fue considerado el mejor jugador. El caso es que Keylor Navas arrib¨® al Bernab¨¦u con la vitola de sustituto del mito, de Casillas, que ya por entonces comenzaba a ser demolido a hachazos por ciertas amistades peligrosas del presidente. Poco pudo demostrar el costarricense, pues poco pudo jugar. Con la definitiva defenestraci¨®n de Casillas rumbo a Oporto, a Keylor se le abrieron las puertas de ese cielo al que reza, de rodillas en el c¨¦sped, antes de cada partido.
Sin embargo, el Real Madrid, o sea, su director deportivo Florentino P¨¦rez y asesores, optaron por apostarlo todo a David de Gea, el cotizado guardi¨¢n de la porter¨ªa del Manchester United. Era el fichaje gal¨¢ctico. Y comenz¨® la guerra civil de cada veranito con el Madrid de por medio, batalla en la que se han visto inmersos caballeros tan ilustres como Figo, Zidane, Ronaldo (el que nunca se enfadaba), Ronaldo (el que siempre se enfada), Modric, Bale y compa?¨ªa. El m¨¦todo a seguir es siempre el mismo. El Madrid negocia con el jugador pretendido y deja en sus manos la ruptura con su club, que suele producirse a garrotazos. En ello est¨¢ De Gea, castigado por su t¨¦cnico, Louis van Gaal, decidido a cortarle la cabeza antes de poner precio a la misma.
A las 12 de la noche de hoy finaliza el periodo de fichajes. Ese es el margen que tiene el Madrid para abonar los 30 o 40 millones que, se dice, est¨¢ dispuesto a pagar por De Gea, un jugador que llegar¨ªa gratis dentro de un a?o. 30 o 40 millones hoy o gratis el pr¨®ximo verano. ?Qu¨¦ elecci¨®n tomar? La sola duda produce sonrojo. Y m¨¢s cuando, de concretarse el fichaje, el gran damnificado ser¨ªa Keylor, que el s¨¢bado consigui¨® que el Bernab¨¦u en pleno coreara su nombre, asunto poco balad¨ª. Y todo por dos acciones puntuales ante el Betis: por robar el bal¨®n a un rival desde el suelo y por detener un penalti. Hoy Keylor tiene el aplauso del p¨²blico, pero ya se sabe que los amores eternos del Bernab¨¦u son perecederos, por mucho que uno tenga el favor del cielo.
El inefable m¨¦todo de Paquillo
En el l¨²gubre devenir de los espa?oles por los Mundiales de atletismo se ha colado un invitado inesperado, otrora h¨¦roe de la marcha hasta que la sombra de la sospecha se lo llev¨® por delante. A Paquillo Fern¨¢ndez, plata ol¨ªmpica en una ocasi¨®n (Atenas 2004) y mundial en tres, no se le ocurri¨® idea m¨¢s brillante que publicar un mensaje en Twitter, aqu¨ª reproducido en su literalidad: ¡°Despu¨¦s de ver el 50 km marchs los Espa?oles siguen sin saber preparar esta prueba. Es penoso, peto es lo que hay...¡±.
?Tal comentario incendi¨® las redes sociales, tan propensas como son a incendiarse, por otra parte. Ya no solo por la cr¨ªtica a algunos de quienes hasta hace poco eran sus compa?eros, entre ellos Jes¨²s Garc¨ªa Bragado, que acab¨® noveno en esos 50 kil¨®metros marcha a sus 45 a?os. El problema mayor es de qui¨¦n proced¨ªan esas palabras. En 2009, la Guardia Civil encontr¨® en el domicilio de Paquillo Fern¨¢ndez diversos productos dopantes, como EPO y hormonas. El atleta asegur¨® un a?o despu¨¦s que le pudo la tentaci¨®n de adquirir sustancias prohibidas, pero que jam¨¢s las consumi¨®. A¨²n as¨ª, y dado que la mera posesi¨®n es delito, fue suspendido por dos a?os. Hoy se muestra en disposici¨®n de criticar la preparaci¨®n del pr¨®jimo, ¨¦l, que guardaba hormonas en la nevera. Para contemplarlas, quiz¨¢.
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