Espa?a vence a Rusia y abraza las semifinales
Los de Cadenas cumplen en la jornada final (25-23) y encaran a Croacia en la lucha por las medallas
Misi¨®n cumplida, pero con matices, much¨ªsimos matices. Espa?a venci¨® a Rusia (25-23) en el desenlace de la segunda fase y disputar¨¢ las semifinales del Europeo de Polonia, premio mayor a tenor de c¨®mo pintaban las cosas hace solo unos d¨ªas. Estar¨¢ una vez m¨¢s -15 en 25 grandes torneos- entre las cuatro selecciones que luchar¨¢n por las medallas, un m¨¦rito del que muy pocas pueden presumir. No lo podr¨¢n hacer, desde luego, mastodontes como Francia o Dinamarca, o la anfitriona Polonia, descabalgadas todas ellas contra todo pron¨®stico. En el horizonte aparece ahora Croacia, rival en las semifinales de ma?ana (21.00, Teledeporte). Pero ojo: demasiadas sombras hasta ahora, demasiadas; pero bendita la fortuna, por otra parte.
ESPA?A, 25 - RUSIA, 23
Espa?a:P¨¦rez de Vargas (p), Sterbik (p), Viran, Guardiola (1), Aginagalde (1), Entrerr¨ªos (2), Maqueda (3), Tom¨¢s (6), Rivera (11), Ugalde, Garc¨ªa, Del Arco, Baena, Gurbindo, Ca?ellas (1) y Dujshebaev.
Rusia: Kireev (p), Bogdanov (p); Shiskarev, Shelmenko (3), Zhitnikov (1), Gorbok (2), Dibirov (5) y Chernoivanov, Kovalev (3), Atman (4), Chipurin (2), Kalarash (1), Dashko, Buzmakov (2), Soroka y Tcelishchev.
Parciales cada cinco minutos: 0-2, 4-4, 5-6, 8-10, 10-11, 11-12 ¡ªdescanso¡ª, 14-13, 17-15, 20-17, 24-19, 24-21, 25-23.
?rbitros: M. Gubica (CRO) y B. Milosevic (CRO).
Centennial Hall de Breslavia. Alrededor de 8.500 asistentes.
Como este campeonato se ha empe?ado en volatilizar todo lo esperado o previsible, Dinamarca cay¨® en el primer pulso de la tarde, frente a Alemania. Bienvenida esa despedida, el adi¨®s de una de las grandes favoritas, pero una vez que se esfum¨® la opci¨®n de que los n¨®rdicos ahorrasen m¨¢s sufrimiento a Espa?a ¡ªun triunfo suyo garantizaba el pase a ambas¡ª, los Hispanos ten¨ªan que vencer s¨ª o s¨ª a Rusia. Cost¨® lo suyo, como no pod¨ªa ser de otro modo, porque hasta que no pisaron el acelerador, a partir del intermedio, el suspense volvi¨® a planear en dosis innecesarias.
El pulso se movi¨® en par¨¢metros muy similares a los previos, con una Espa?a que sufre en est¨¢tico y a la que le cuesta un mundo descerrajar las defensas si los extremos no intervienen. Buena parte de las opciones que tiene de conseguir una medalla pasar¨¢ por las incursiones de V¨ªctor Tom¨¢s, Valero Rivera y Cristian Ugalde; el resto del engranaje debe carburar, por supuesto, pero la aportaci¨®n desde los flancos ser¨¢ absolutamente imprescindible. Piernas, piernas, piernas. De lo contrario, en el ataque se forma un embudo por el centro y el juego se comprime.
Trat¨® de ponerle remedio Ra¨²l Entrerr¨ªos, imperial en la organizaci¨®n del equipo, pero al que esta vez le faltaron socios. Se espera m¨¢s de la primera l¨ªnea y se echa especialmente en falta el virtuosismo de Ca?ellas, que lleg¨® a Polonia con mucho desgaste, y a Julen Aginagalde siguen sin llegarle balones francos para percutir desde el pivote. Por eso, y por la rocosidad de la muralla rusa, Cadenas apost¨® por concederle m¨¢s presencia en pista a Rafa Baena, una alternativa muy a tener en cuenta para erosionar al rival y abrir rendijas. Se agradeci¨® tambi¨¦n el regreso de Gede¨®n Guardiola, aunque como contrapartida supuso el descarte de Niko Mindegia.
El KO de Francia supone que en este torneo solo obtendr¨¢ una plaza ol¨ªmpica el campe¨®n
Si el primer periodo transcurri¨® a r¨¢fagas, a arreones, en el segundo ya se pudo ver a una Espa?a mucho m¨¢s naturalizada, con un Sterbik espl¨¦ndido bajo los palos (11 paradas a 34 env¨ªos) y caballos en los costados. Nada m¨¢s reanudarse el partido se puso por primera vez en ventaja (14-13) y desde ese instante cobr¨® toda su magnitud la figura de Rivera, ese extraordinario extremo que tuvo que emigrar a Francia para dejar muy claro que va mucho m¨¢s all¨¢ de su apellido. Vol¨® desde la izquierda una y otra vez, certero tambi¨¦n desde los siete metros, y rubric¨® 11 goles en 14 lanzamientos.
Como fotograma final, una hermosa pi?a, un abrazo en se?al de uni¨®n y alivio. Despu¨¦s de much¨ªsimo sufrimiento, de demasiadas angustias; con mucho m¨¢s oficio que lustre, Espa?a logr¨® el pasaporte hacia las medallas. Pero un matiz importante: la eliminaci¨®n de Francia supone que en este torneo solo obtendr¨¢ una plaza ol¨ªmpica el campe¨®n; para el resto no hay billete a R¨ªo. As¨ª que solo queda una ruta: la de ir a por todas.
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