Bale se queja y Zidane lo pone en remojo

Gareth Bale no est¨¢ bien y los detalles cient¨ªficos de su dolencia resultan tan sinuosos como siempre desde que, en septiembre de 2013, se declar¨® su primera lesi¨®n. El Real Madrid informa de que el jugador sufri¨® una rotura muscular en el s¨®leo de la pierna derecha el pasado 17 de enero, que despu¨¦s de una semana y media de tratamiento el muchacho se sinti¨® mucho mejor, pero que, de repente, hace unos d¨ªas, volvi¨® a experimentar molestias. Estas percepciones desagradables son subjetivas.

El club insiste en que la incomodidad del jugador no deriva de una reca¨ªda en el desgarro fibrilar, ya que las pruebas m¨¦dicas no revelan herida nueva. Se trata de sus ¡°sensaciones¡±. Y como quiera que Bale no est¨¢ dispuesto a jugar con problemas f¨ªsicos ¡ªcomo hacen tantos jugadores¡ª, Zidane ha decidido no contar con ¨¦l hasta que sea el propio futbolista quien d¨¦ un paso al frente.

Su mejor ¨¦poca

Bale atravesaba su mejor ¨¦poca desde que lleg¨® al Madrid cuando el 17 de enero, al cabo de 40 minutos formidables contra el Sporting, se sent¨® en la hierba y pidi¨® el cambio. Sab¨ªa perfectamente lo que le suced¨ªa porque hab¨ªa experimentado el mismo dolor en los s¨®leos en seis oportunidades en los ¨²ltimos dos a?os. La rotura muscular no ofrec¨ªa lugar a dudas. La hab¨ªa sentido en la otra pierna el 15 de septiembre y ya conoc¨ªa la caracter¨ªstica punzada debajo del gemelo.

Entonces tard¨® siete semanas en volver a competir. Ahora suma tres, de modo que si las molestias le embargan como la ¨²ltima vez se perder¨¢ la eliminatoria de Champions contra la Roma, la visita del Athletic este s¨¢bado, el viaje a M¨¢laga, el derbi contra el Atl¨¦tico, y los encuentros ligueros contra Levante, Las Palmas y Celta. Sumados a los 10 partidos que lleva perdidos esta temporada por baja m¨¦dica, se podr¨ªa componer la temporada de menor actividad del goleador gal¨¦s desde su fichaje.

Zidane conoce bien el caso porque tuvo la oportunidad de trabajar con Bale siendo segundo de Ancelotti en el curso 2013-14. Entonces los t¨¦cnicos del club descubrieron que el futbolista brit¨¢nico era extremadamente sensible a cualquier cosa que ¨¦l percibiera como una anomal¨ªa. Ah¨ª donde los m¨¦dicos entend¨ªan que estaba en condiciones de jugar, ¨¦l no siempre se sent¨ªa seguro. Su car¨¢cter aprensivo acab¨® por convencer a los responsables de la caseta de que es mejor dejar que ¨¦l decida cu¨¢ndo est¨¢ listo. En las oportunidades que jug¨® con molestias su contribuci¨®n result¨®, en el mejor de los casos, decepcionante.

La abundancia de recursos para reemplazar a Bale contribuye a reforzar la idea de Zidane de que es mejor dejar que se cure sin prisa. Isco y James est¨¢n deseosos de tener minutos y el equipo ha disputado algunos de sus mejores partidos con su contribuci¨®n conjunta.

La ausencia de Bale, adem¨¢s, alivia a Zidane en la medida en que le ahorra enfrentarse al dilema pol¨ªtico de si poner a Isco, uno de sus futbolistas preferidos, o a James, una apuesta estrat¨¦gica de la directiva. El cuerpo t¨¦cnico entiende que Isco merece continuidad y lo demuestra con su empe?o. Nadie habr¨ªa dicho que se trata de un fondista, pero el malague?o lleva tres jornadas consecutivas encabezando la estad¨ªstica de kil¨®metros recorridos del Madrid.