La ¡®Biggarena¡¯, el baile que tranquiliza a Gales en el Seis Naciones

¡°?Pero qu¨¦ hace? Por qu¨¦ no se est¨¢ quieto, que va a fallar la patada¡±, exclamaba m¨¢s de un aficionado durante el pasado Mundial de Inglaterra cuando el gal¨¦s Dan Biggar (Swansea, 26 a?os) se dispon¨ªa a lanzar un golpe de castigo de unos 50 metros que pod¨ªa eliminar al anfitri¨®n. El apertura rojo ni se inmut¨® y sigui¨® con su ritual. Sin parar quieto, se toc¨® el hombro izquierdo, luego el derecho, se atus¨® el pelo y otra vez los hombros antes de golpear el oval y certificar la victoria de su equipo en Twickenham y de paso poner de moda en Gales lo que a partir de entonces se conoce como la Biggarena, un baile que han imitado tanto compa?eros de profesi¨®n como una afici¨®n hipnotizada con el movimiento del jugador.

En el Millenium Stadium de Cardiff reinar¨¢ la tranquilidad cuando el 10 busque los palos este viernes (21.05) en la visita de Francia con motivo de la tercera jornada del Seis Naciones. En juego est¨¢n muchas de las opciones del XV del Drag¨®n para seguir en la lucha por el t¨ªtulo, tras cosechar un empate en Dubl¨ªn y una victoria en casa ante Escocia. Por su parte, el reconstruido equipo franc¨¦s suma dos ajustadas victorias en casa, frente a Italia e Irlanda, y debe ganar por lo menos una de sus dos salidas, a Cardiff y Edimburgo, para llegar con opciones a la ¨²ltima fecha en el Stade de France contra Inglaterra, l¨ªder de la clasificaci¨®n gracias a la mejor diferencia de puntos.

Desde hace a?os todos los pateadores tienen sus rituales antes de patear, algo parecido a lo que hacen los tenistas cuando van a sacar. Normalmente, se limita a unos pasos concretos al tomar carrerilla y a controlar la respiraci¨®n, pero algunos exageran un poco m¨¢s. Posiblemente el primero que llam¨® la atenci¨®n fue el ingl¨¦s Jonny Wilkinson, que se colocaba con el culo en pompa y los brazos en forma de L delante del cuerpo. Su compatriota Owen Farrell le lanza miradas seductoras a los palos, pero nadie tiene unas costumbres tan llamativas como Biggar.

El argentino Nicol¨¢s S¨¢nchez, m¨¢ximo anotador del pasado Mundial, asegura que en los meses que entren¨® en Toulon con Wilkinson, para ¨¦l el mejor pateador de la historia, corrigi¨® su postura y la manera de impactar a la pelota, pero sobre todo aprendi¨® que lo m¨¢s importante a la hora de lanzar a palos es la cabeza, creer en lo que vas a hacer. Si para conseguir concentrarte tienes que hacer el baile del Sambito, como es el caso de Biggar, bienvenido sea.

El propio jugador gal¨¦s desvel¨® en el The Times, que su rutina lleg¨® por casualidad, durante una concentraci¨®n previa al Mundial en Doha a 38? C. El apertura asegur¨® que en las sesiones de entrenamiento de patadas, en las que se le ve tan escrupuloso con sus acciones como exigente en su ejecuci¨®n, se empez¨® a sacudir por culpa del calor, la humedad y la ropa que se le pegaba y descubri¨® que ese ritual le liberaba psicol¨®gicamente a la hora de patear y era m¨¢s preciso. Tambi¨¦n fue fortuito, o m¨¢s bien fruto del infortunio, que fuera ¨¦l el encargado de lanzar a palos durante el Mundial, ya que el especialista en esas lides desde hace a?os era el efectivo zaguero Leigh Halfpenny que se lesion¨® de gravedad en el ¨²ltimo partido de preparaci¨®n del torneo.

Los cierto es que el discreto Biggar, que ahora lamenta que debido a la fama adquirida le cueste salir a la calle en Gales sin que le reconozcan, tiene un 90% de acierto con el pie y los hechos parecen que revalorizan sus costumbres. En el primer partido del Seis Naciones contra Irlanda, en el primer golpe de castigo a favor no realiz¨® su ritual y fall¨® el tiro. Eso s¨ª, estaba lesionado y en la siguiente jugada dej¨® su sitio a Rhys Priestland. Contra Escocia, ya recuperado, y para alivio de la grada, volvi¨® a su rutina y precisi¨®n. Contra Francia, Biggar volver¨¢ a hacer del c¨¦sped su pista de baile particular.