Tamudo: ¡°Antes, el f¨²tbol era un b¨²scate la vida¡±

Es una leyenda del Espanyol y lo sabe. Colgadas las botas, Ra¨²l Tamudo (Barcelona, 1977) dej¨® atr¨¢s tiempos m¨¢s ariscos y se muestra cercano y divertido. Amigable y franco. Camina por la calle con EL PA?S y en La Rambla Catalunya le gritan: ¡°?El domingo hay que ganar!¡±. ?l sonr¨ªe. Un a?o despu¨¦s de haberse retirado y casi diez despu¨¦s de su hist¨®rico gol ante el Bar?a que le dio el t¨ªtulo al Madrid en 2007, nadie en Barcelona se olvida del Tamudazo.

Pregunta. ?Est¨¢ harto del Tamudazo?

Respuesta. Los que mandan en el f¨²tbol mundial son el Bar?a y el Madrid. Y eso fue lo que me pas¨® aquel d¨ªa. Marqu¨¦ el gol en el minuto 90 y se llev¨® la Liga el Madrid, en el ¨²ltimo instante, cuando los otros ya la estaban festejando. Pasaron nueve a?os de aquel gol y no pasa un d¨ªa sin que alguien me lo recuerde.

P. ?Fue una forma de reivindicar al espanyolismo?

R. Fue una forma de llevarnos una alegr¨ªa en Barcelona. Aqu¨ª lo normal es ser del Bar?a y nosotros tambi¨¦n nos merecemos algo mejor. Ojal¨¢ que el a?o que viene, con el cambio de due?o, todo vaya mucho mejor. Pero tampoco tenemos que fijarnos tanto en el de al lado, sino en lo que hacemos nosotros e intentar crecer poco a poco.

P. ?Y para usted cu¨¢l es el gol de su vida?

R. El del debut. Ese fue el gol que marc¨® mi carrera. Era un momento en que el Espanyol no contaba tanto con la cantera, est¨¢bamos para bajar a Segunda, sal¨ª un cuarto de hora y marqu¨¦. Ganamos y nos salvamos. Quiz¨¢, sin ese gol no hubiesen llegado nunca todos los dem¨¢s.

P. ?Es uno de los ¨²ltimos exponentes del jugador p¨ªcaro?

R. El f¨²tbol base ha cambiado mucho y, sobre todo, ha cambiado la vida en general. Mis padres trabajaban y yo estaba todo el d¨ªa en la calle jugando al f¨²tbol. Me colaba en los colegios los s¨¢bados y domingos para jugar en un campo de f¨²tbol sala. Hoy en d¨ªa hay cantidad de escuelas de f¨²tbol, donde van los ni?os desde que tienen cinco a?os. Ya pr¨¢cticamente no ves chicos en la calle con la pelota, porque no se puede o porque no hay espacio. Ahora nos encontramos frente a futbolistas de escuela, ni?os m¨¢s trabajados t¨¢cticamente. Antes, en cambio, era un b¨²scate la vida. Ten¨ªas que esquivar a la gente a los postes de luz cuando jugabas en la calle, y eso, quieras o no, te ense?a a espabilarte en la vida, en un campo de f¨²tbol.

P. ?Se fue demasiado tarde del Espanyol?

Cuando jugaba con De la Pe?a me sent¨ªa como Forrest Gump

R. Me fui cuando me dejaron. En el a?o 2010, el Villarreal hizo una oferta por m¨ª, pero no me dejan marchar. Yo estaba bien aqu¨ª, pero al final sent¨ªa que no pod¨ªa hacer nada m¨¢s.

P. ?Le gust¨® su salida?

R. No, yo creo que a nadie le gust¨® mi salida. Si volvi¨¦ramos a pensar en aquello, suceder¨ªa de otra manera.

P. ?Volvi¨® a hablar con Mauricio Pochettino?

R. No, no he vuelto a hablar con ¨¦l. Pasaron cosas que no me gustaron y que me hicieron mucho da?o.

Ahora, falta un l¨ªder que coja las riendas y con el que se identifique la gente

P. ?C¨®mo era usted como l¨ªder?

R. Nunca me he considerado un l¨ªder, mi liderazgo era en el campo. Se hablaron muchas cosas, que mandaba, que eleg¨ªa los entrenadores. Jam¨¢s eleg¨ª a un entrenador. Lo que pasa que quiz¨¢ tengo un car¨¢cter dif¨ªcil cuando estoy trabajando. El mundo del f¨²tbol es complicado, cuando eres capit¨¢n m¨¢s, y tienes que dar ejemplo. ?Qu¨¦ preferimos? ?Un l¨ªder de vestuario que cuando sale al campo nadie sabe qui¨¦n es? o ?Uno que es un ejemplo para todo el mundo con su rendimiento? Esto es f¨²tbol y a m¨ª me pagaban por jugar, por marcar goles.

P. ?Es de goleador pensar as¨ª?

R. Soy una persona que piensa antes en los dem¨¢s que en m¨ª mismo, fuera del campo del f¨²tbol y dentro. Pero llevar el brazalete conlleva una responsabilidad mayor y si encima tu rendimiento en el campo es bueno, pues la responsabilidad es mucho mayor.

P. ?No tiene l¨ªderes hoy el Espanyol?

Este Espanyol ha llegado a jugar a un gran nivel. Eso es lo que hay que exigir

R. El problema es que no han dejado que eso pase. Cada a?o se han vendido jugadores. No hay un jugador que se haya asentado cinco o seis a?os y que coja las riendas del equipo cuando las cosas van mal. Un jugador con el que la gente se identifique.

P. ?C¨®mo ve al equipo para enfrentarse al Bar?a?

R. Hubo partidos en los que demostraron que pod¨ªan jugar a un gran nivel, muy pocos. Pero una vez que se demostr¨®, eso es lo que hay que exigir. Jugar un derbi te da un plus. Hay un buen equipo, con buenos jugadores.

P. ?Le falta un De la Pe?a?

R. Un Lo Pelat le falta a muchos equipos. No existen jugadores como ¨¦l. Era un jugador de dibujos animados. No s¨¦ si hubiera marcado tantos goles si no hubiese jugado tantos a?os a su lado.

P. ?Cu¨¢ntos goles le debe?

R. No s¨¦, pero muchos. Jugar con El Pelado era como el f¨²tbol americano. ?l era el quarterback y yo era uno de los que corr¨ªan para adelante sin mirar. Me dec¨ªa: ¡°T¨² corre¡±. Y yo me pon¨ªa como Forrest Gump a correr y cuando me daba cuenta ya ten¨ªa el bal¨®n adelante. Era as¨ª. Un espect¨¢culo. No s¨¦ por d¨®nde pasaba el bal¨®n, pero siempre lo ten¨ªa adelante para marcar el gol.

P. ?Usted se fue dulcificando con los a?os?

R. Siempre he sido as¨ª. La gente que me quiere, me quiere mucho. Lo que pasa es que yo me volv¨ª muy desconfiado. Y me encerr¨¦ en m¨ª mismo. Al final acab¨¦ harto. Y pens¨¦: ¡®no hablo con nadie¡¯. No le¨ªa la prensa, ni nada. Acababa el entrenamiento y me iba a mi casa. Y ahora me he quitado doscientas toneladas de encima, puedo ir por la calle tranquilamente y estoy feliz y contento.