El Barcelona tambi¨¦n es Luis Enrique
Sacchi, Seti¨¦n, J¨¦mez, Abelardo y Poyet reivindican los retoques del entrenador, que ha dado continuidad a la idea de Guardiola y ha evolucionado al equipo de Messi y el tridente
La LFP nunca le ha dado el premio al entrenador del mes, por m¨¢s que s¨ª fuera galardonado como el mejor del a?o tras el triplete con el Barcelona. No es un t¨¦cnico al que le lluevan los piropos, pero ha ganado seis t¨ªtulos de ocho y, de conquistar ma?ana la Copa ante el Sevilla, igualar¨ªa a Pep Guardiola en cuanto a laureles en sus dos primeros a?os al frente del equipo. Sus colegas de profesi¨®n elogian su gesti¨®n.
Una obra de autor. A este Bar?a se le conoce como el equipo de Messi o del tridente al tiempo que en muchas ocasiones se obvia a Luis Enrique. ¡°Su gesti¨®n es tan buena como la Guardiola. Pero el Bar?a tiene una idea que trasciende a los entrenadores y a los jugadores, y que se ha mantenido en el tiempo...¡±, opina Quique Seti¨¦n, entrenador de Las Palmas. ¡°El libreto es el mismo y se juega muy parecido est¨¦ quien est¨¦, pero para m¨ª es igual de reconocible el trabajo de Guardiola que el de Luis Enrique¡±, expone Paco J¨¦mez, t¨¦cnico del Rayo. ¡°Puede que se mezcle su personalidad ¡ªa los medios no, pero a m¨ª me encanta¡ª con el hecho de que tiene a tres jugadores muy especiales. Es muy f¨¢cil derivar a que hoy gan¨® el Bar?a de Su¨¢rez, de Neymar o de Messi¡±, suma Gustavo Poyet, ya en el Betis. ¡°Se debe valorar su trabajo como lo hacen los jugadores y la gente de f¨²tbol¡±, reivindica Pitu Abelardo, del Sporting. ¡°Cualquier coche, incluso un Ferrari, necesita la gasolina. Eso es el bal¨®n. Pero lo m¨¢s importante es el motor, que lo da el entrenador. Por eso el juego siempre es idea del t¨¦cnico¡±, resuelve Arrigo Sacchi, que dirigi¨® al poderoso Milan de finales de los 80.
Pinceladas de Luis Enrique. Antes de ficharle, las charlas de la direcci¨®n deportiva con el t¨¦cnico versaban sobre c¨®mo se desplegar¨ªa el equipo ante seg¨²n que planteamientos. ¡°Deberemos ser impredecibles¡±, vaticin¨® Luis Enrique. ¡°Y ha evolucionado al equipo; se generan transiciones, contragolpes, se ha mejorado a bal¨®n parado y recuperado la presi¨®n en campo rival¡±, expresa Abelardo. ¡°Tiene velocidad arriba y por eso le ha dado la contra¡±, remarca J¨¦mez. ¡°Mantiene conceptos como salir desde atr¨¢s, mezclar y dar pausa hasta acelerar, pero tambi¨¦n deja caer a los interiores a las bandas para circular el bal¨®n. Son detalles¡±, se?ala Seti¨¦n. ¡°Ha sido capaz de convencer a los jugadores. Eso da una idea de su nivel¡±, agrega Poyet. Sacchi a?ade: ¡°Llegar tras Guardiola tiene un problema, que es dif¨ªcil ser mejor, y una ventaja, que tiene la mesa puesta. Pero le doy las gracias por mantener el f¨²tbol total¡±.
Abanico de recursos. Al inicio de los duelos, el Bar?a parece aguardar a ver c¨®mo juega el rival para atacar en consecuencia. ¡°Se sabe qui¨¦n va a jugar, porque tiene un once definido, pero no c¨®mo lo har¨¢¡±, dice Poyet. ¡°Es un equipo tan rico que utiliza en cada partido lo que necesita¡±, apunta J¨¦mez. ¡°Muchos partidos son un tr¨¢mite para ellos, as¨ª que s¨®lo aceleran cuando ven que el tiempo pasa¡±, argumenta Seti¨¦n. ¡°Para m¨ª no especulan¡±, rebate Abelardo. Y Sacchi resuelve: ¡°Antes, el equipo se miraba muchas veces al espejo; ahora, sabe cu¨¢ndo tener el bal¨®n y cu¨¢ndo atacar¡±.
Liderazgo compartido. Cuando lleg¨® al Bar?a se proclam¨® ¨²nico l¨ªder del equipo. Pero se encar¨® con Messi y desde entonces hay dos jefes. ¡°Su gesti¨®n ha sido muy buena porque est¨¢n casi todos contentos¡±, conviene Seti¨¦n. ¡°Se ha ganado al vestuario¡±, contin¨²a Abelardo; ¡°es muy dif¨ªcil llevar a esos grandes jugadores y que no haya quejas¡±. As¨ª opina Poyet: ¡°Ha lidiado con tres futbolistas de alto nivel y ha sido capaz de encontrarles sitio¡±. Y completa J¨¦mez: ¡°Un club grande es m¨¢s f¨¢cil de puertas para fuera que para dentro. Y ¨¦l se ha ganado el respeto poco a poco y ha sabido compartir su liderazgo¡±.
¡°Se sabe qui¨¦n va a jugar, porque tiene un once definido, pero no c¨®mo lo har¨¢¡±, dice Poyet
El apetito intacto. ¡°Transmite ambici¨®n y ganas en cada entrenamiento¡±, le reconoce Rakitic. ¡°Se ve que el grupo tiene hambre, ?no?¡±, cuenta Abelardo. ¡°Nunca nos deber¨ªamos cansar de ganar, pero sucede porque al final parece lo normal. Pero Luis ha sido capaz de darles energ¨ªa, como se ha visto en el final de una Liga que parec¨ªa que se les escapaba¡±, defiende Poyet. ¡°Pero es que s¨®lo han tenido un mes complicado. Y no ganar la Champions no es un fracaso porque hace tantos a?os que nadie repite...¡±, recuerda Sacchi. Aunque Seti¨¦n le da una vuelta: ¡°Cuando los jugadores est¨¢n felices, no se cansan. Quieren seguir jugando y ganando. Y por eso Messi, Su¨¢rez y Neymar se ceden el protagonismo uno a otro¡±.
El filial no se ve. Aunque siempre ech¨® mano de los j¨®venes en la Roma y en el Celta, Luis Enrique no ha dado carrete a los canteros del Bar?a. ¡°Con el equipo titular claro, no hay espacio¡±, resalta Poyet. ¡°Es muy dif¨ªcil subir a un chico de Segunda B a Primera, y m¨¢s en el Bar?a donde la exigencia es enorme¡±, ahonda Abelardo. ¡°?A qui¨¦n dejas en la grada?¡±, se pregunta Seti¨¦n; ¡°es complicado sentar a un profesional para dar cabida a un chaval¡±. Y J¨¦mez lo tiene claro: ¡°Si no ha subido a nadie ser¨¢ porque no hay nadie. El Bar?a es un ejemplo en la confianza a los jugadores de la base¡±.
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