San Siro excomulga al Real Madrid
El equipo blanco recurre a Modric para remediar una racha de 14 partidos sin victoria en el templo milan¨¦s
Impresiona el despliegue policial y militar en los aleda?os de San Siro, pero tambi¨¦n llama la atenci¨®n la soltura con que se desenvuelve el hampa camorrista. Hay reventas napolitanos en cada esquina. Compradores y vendedores que demuestran la eficacia del crimen organizado en los hitos deportivos, aunque el negocio hubiera sido m¨¢s provechoso de haberse reunido en la final los dos equipos locales: el Milan y el Inter.
El Real Madrid se ha enfrentado a ellos en 14 encuentros oficiales, pero ninguna de las visitas se ha resuelto con una victoria, predisponiendo una inercia o una superstici¨®n ¡ªdiez derrotas, cuatro empates¡ª a la que no conceden demasiada importancia las casas de apuestas locales: 2,40 se paga la victoria del Madrid frente la del 3,15 del Atl¨¦tico.
Es un argumento pragm¨¢tico que relativiza la maldici¨®n de San Siro, aunque no lo suficiente para descuidarla. Tanto por la racha de resultados adversos como por la repercusi¨®n simb¨®lica de algunos de ellos. Incluido el 5-0 que el Milan de Sacchi opuso al Madrid de Beenhakker, no ya arraigando el gran trauma europeo de la era moderna (1989), sino retratando al equipo blanco en el peor resultado europeo de su historia y condicionando desde entonces una suerte de leyenda negra milanesa.
Se explican as¨ª la atenci¨®n y la supercher¨ªa que han despertado la alineaci¨®n de Luka Modric. Por las neuronas y la clarividencia que aporta al juego del Madrid como porque es el ¨²nico futbolista de la plantilla contempor¨¢nea que ha ganado en San Siro.
Lo hizo con los colores del Tottenham en la temporada de 2011, es decir, el mismo equipo con que Gareth Bale se gradu¨® internacionalmente. El hat trick del gal¨¦s ejecutado hace seis a?os no remedi¨® la derrota ante el Inter pero s¨ª lo puso en ¨®rbita internacional y lo convierte en un argumento de fertilidad propiciatoria.
Es un contraste llamativo con la trayectoria de Cristiano Ronaldo en el Giuseppe Meazza. No ha logrado estrenarse el delantero portugu¨¦s pese a haber disputado aqu¨ª 270 minutos. Dos partidos con el Manchester y otro con el Real Madrid. Y ninguno de los tres propicio a la victoria, aunque el duelo de este s¨¢bado presenta dos ins¨®litas novedades. El rival no es un equipo de Mil¨¢n y el Madrid juega como local, no por linaje sino por sorteo, y consolidando San Siro como el escenario m¨¢s habitual de sus misiones exteriores. Ser¨¢ el decimoquinto encuentro que juegan los blancos en la capital lombarda, frente a los 12 que han disputado hasta la fecha en M¨²nich.
Unos y otros datos contrastan con la escasa experiencia del Atl¨¦tico en San Siro. Escasa y halag¨¹e?a, toda vez que el ¨²nico partido de Champions que han disputado los rojiblancos en el estadio italiano se produjo contra el Milan hace dos a?os y se resolvi¨® con victoria visitante en una eliminatoria de octavos de final (0-1).
La eficacia del 100% no adquiere un valor dogm¨¢tico, pero s¨ª es cierto que Simeone tiene m¨¢s razones que ning¨²n protagonista de la final¨ªsima para sentirse en territorio propio. Jug¨® dos temporadas en el Inter y lleg¨® a tiempo de cruzarse con Zinedine Zidane. El balance de ambos en el calcio se atiene a un perfecto equilibrio diplom¨¢tico ¡ªdos empates y una victoria para cada uno¡ª, aunque el actual entrenador del Real Madrid no fue capaz de batirlo en los duelos disputados en el templo de San Siro.
S¨ª logr¨® en cambio completar en el Meazza una de las mejores actuaciones de su carrera, como goleador y catalizador de la victoria sobre de la Juventus sobre el Milan (1-6) hace casi 20 a?os, de forma que Zizou ya ha demostrado recursos para conjurar la maldici¨®n de un santo, San Siro, que tiene poca devoci¨®n por el Madrid. Y viceversa.
Fabio Capello, exentrenador del Milan y del Madrid, apuesta por una victoria rojiblanca, fascinado como est¨¢ con la noci¨®n del f¨²tbol tenso e intenso de Simeone; mientras que Ronaldo, exjugador del Inter y del Madrid, sostiene el triunfo de los locales.
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