El Legan¨¦s debuta en Primera con un triunfo en Bala¨ªdos

De Anduva a Bala¨ªdos, de un hist¨®rico ascenso a un debut victorioso, el Legan¨¦s no deja de escribir las mejores p¨¢ginas en la hoja de vida de una venerable entidad de 88 a?os de trayectoria que siempre recordar¨¢ Vigo como el escenario donde se estren¨® y gan¨® su primer partido entre los grandes. Nadie podr¨¢ decir que fue un acontecimiento inmerecido, porque incomod¨® al Celta y minimiz¨® sus capacidades, algo que al menos la temporada pasada no estuvo al alcance de muchos equipos. Una jugada retrat¨® al Legan¨¦s cuando segundos antes de llegar al descanso tuvo el gol en sus botas. Fue simple, un saque del meta Serantes, un vole¨®n al que no hubo respuesta de la zaga del Celta y que propici¨® que Guerrero se plantase ante el meta Sergio ?lvarez, que tuvo que mostrar su cara m¨¢s felina para evitar que el debutante se pusiese en ventaja. Se inici¨® con desparpajo el Legan¨¦s en la m¨¢xima categor¨ªa y esa acci¨®n resumi¨® su puesta de largo, plena de sencillez y efectividad, cauta en el repliegue, pero al tiempo descarada para buscar el ¨¢rea rival.

El Celta tuvo plomo en las botas en un partido que comenz¨® entre la solana del ocaso vigu¨¦s, en medio de un ambiente relajado y un estadio en obras. Tambi¨¦n su inquilino lo est¨¢. La Liga se le ha echado encima al equipo de Berizzo sin sustanciar el relevo de Nolito. No le resultar¨¢ sencillo encontrar no ya un futbolista de ese nivel sino con esas caracter¨ªsticas que le adornan, capaz de jugar por banda, tambi¨¦n de buscar desde el flanco el interior para realizar permutas con compa?eros. Y, sobre todo, con tanto gol porque ninguno de sus sustitutos parece en condiciones de aportar la cuota realizadora que le daba al equipo el ahora jugador del Manchester City. Berizzo opt¨® por abrir el campo con Pione Sisto y Bongonda, pero el Legan¨¦s no tuvo dudas, atras¨® a los due?os de los carriles, redujo espacios antes su ¨¢rea y gener¨® un atasco.

Al Celta le falt¨® durante bastantes minutos rapidez en la circulaci¨®n, pero sobre todo orden porque cuando sus futbolistas de ataque intercambian posiciones se vuelve demoledoramente indetectable. Mientras desentra?aba la situaci¨®n se encontr¨® con un rival que no perdi¨® el tiempo, que se estir¨® para convertirse en llegador y asust¨® en varias llegadas porque el Celta sigue tan c¨¢ndido en defensa como de costumbre. El Legan¨¦s sufri¨® cuando se activaron Orellana y Iago Aspas. Juntos fabricaron un gol en el que el linier tir¨® mal la escuadra y el cartab¨®n que ante un monitor de televisi¨®n resultan infalibles. Le anularon al Celta su acci¨®n m¨¢s provechosa, la que le mostr¨® que el camino curiosamente estaba por dentro, en los desmarques de Aspas. Por ah¨ª pudo marcar un poco despu¨¦s en la primera jugada tras el descanso, pistoletazo de salida para un partido menos controlado. Quer¨ªa el Celta ese escenario y el Legan¨¦s no lo eludi¨®. Acept¨® el reto y tuvo la capacidad para matizarlo seg¨²n su inter¨¦s, en la certeza de que el empate era bueno.

Pero la victoria era un premio mayor y no estaba lejos. El Celta hab¨ªa mostrado grietas, una vez m¨¢s, para responder ante las acciones de estrategia a bal¨®n parado. Y a falta de un cuarto de hora, cuando Berizzo hab¨ªa reconstruido al equipo con Guidetti y Hern¨¢ndez y sin el ayer decepcionante Pione Sisto, marc¨® el Legan¨¦s tras un saque de esquina en el que toc¨® dos veces la pelota en el ¨¢rea. V¨ªctor D¨ªaz, un lateral con 265 partidos de bagaje como profesional pero que tambi¨¦n debutaba en Primera Divisi¨®n, anot¨® un tanto hist¨®rico. No hubo respuesta del Celta, que ahora deber¨¢ enfrentarse a Real Madrid en Chamart¨ªn y luego recibir¨¢ al Atl¨¦tico.