La noche en que Lionel Messi volvi¨® a enamorar a los argentinos

El Pat¨®n Bauza vivi¨® un momento inc¨®modo durante la rueda de prensa del pasado mi¨¦rcoles. Un periodista uruguayo le consult¨® al entrenador: ¡°?Cu¨¢l es el Messi que vamos a ver: el que juega 14 puntos en Barcelona o el que con usted juega para cinco, en Argentina?¡±. Sorprendido por la pregunta, el entrenador s¨®lo atin¨® a responder que ¡°el puntaje se lo pon¨¦s vos. Para m¨ª jam¨¢s Messi jug¨® para cinco puntos, pero si para vos jug¨® para cinco puntos est¨¢ bien. Para m¨ª jug¨® todos los partidos para 14 puntos¡±. La iron¨ªa del colega sirvi¨® para romper el hielo y tambi¨¦n, para decir algo que muchos no se atreven a aseverar, pero que cada vez que juega la selecci¨®n, retumba en la opini¨®n p¨²blica. Los cuestionamientos que caen sobre el 10 cul¨¦ est¨¢n directamente relacionados con el esp¨ªritu exitista del futbolero argentino, muchos de los cuales est¨¢n cansados de verlo levantar copas con el Barcelona y ninguna con la albiceleste.

La anterior jornada de eliminatorias dej¨® una de cal y una de arena para la selecci¨®n argentina. Derrota por goleada ante Brasil en el estadio Mineirao por 3 a 0 y victoria por el mismo marcador ante Colombia en San Juan, ahora s¨ª, con una gran actuaci¨®n de Messi, que convirti¨® un gol y asisti¨® en los dos restantes. Sin embargo, un conflicto con la prensa por una denuncia contra su amigo Ezequiel Lavezzi de quien dijeron que fum¨® marihuana en la concentraci¨®n, ha puesto de mal humor al capit¨¢n argentino. El fastidio de Messi se sum¨® al de una afici¨®n ansiosa por verse en el mundial de Rusia cuanto antes y el resultado fue un veto a la prensa que ha alejado todav¨ªa m¨¢s a los jugadores de los hinchas.

Sin embargo, el crack argentino y sus compa?eros s¨®lo recibieron afecto apenas saltaron al campo de juego del estadio Monumental para enfrentar a Chile. Es que la situaci¨®n lo ameritaba: Argentina deb¨ªa ganar si o s¨ª para abandonar el puesto de repesca y escalar a la cuarta posici¨®n, que justamente, estaba en manos de La Roja. Messi devolvi¨® con esfuerzo, pases claros y lo que mejor le sale: el gol. El ¨²nico grito del partido lleg¨® a los 15 minutos del primer tiempo, luego de una ca¨ªda algo dudosa de Di Mar¨ªa que Messi cambi¨® por gol. Desde temprano el ¡°Meeeeessi, Meeeeessi¡± cay¨® desde las tribunas, y nunca se fue. Se hizo todav¨ªa m¨¢s intenso cuando el 10 pidi¨® la pelota, marc¨® y corri¨® durante los 90 minutos para aguantar un resultado que durante todo el segundo tiempo se vio en peligro, en gran parte por la gran actuaci¨®n de un excompa?ero suyo, Alexis S¨¢nchez. Esta vez, el capit¨¢n argentino demostr¨® algo m¨¢s que talento con la pelota, incluso hasta con alg¨²n insulto para ordenar a sus compa?eros, de esos que les gusta a esta afici¨®n. La misma que adem¨¢s de goles le pide garra.