A la tercera, Thiem trunca el paso a Nadal

Se llama Dominic Thiem, tiene 23 a?os y hechuras de gran campe¨®n. En su pa¨ªs se le considera el sucesor de Thomas Muster, aquel jugador noventero de car¨¢cter indomable. Sin embargo, poco tiene que ver con ¨¦l Thiem. No es zurdo, es comedido y bastante m¨¢s estiloso en la pista. Y, a este paso, si los augurios se cumplen, puede que un d¨ªa deje atr¨¢s al Animal y se convierta ¨¦l en la referencia, porque lo tiene todo para llegar muy alto. De momento, este viernes venci¨® a Rafael Nadal en el Foro It¨¢lico (6-3 y 6-4, en 1h 51m) e interrumpi¨® la fabulosa secuencia del balear, que encadenaba 17 victorias consecutivas y tres trofeos en esta gira de tierra, enmarcada en Par¨ªs a partir del pr¨®ximo d¨ªa 28.

M¨¢s informaci¨®n

?Qui¨¦n puede con Nadal en la tierra?

Madrid tampoco es una excepci¨®n

En la central romana, una sesi¨®n de acupuntura. A diferencia de los dos enfrentamientos previos, en las finales de Barcelona y Madrid, el austriaco no titube¨® y golpe¨® cada bola como si le fuera la vida en ello para someter al balear a un aguijonazo tras otro, a una desesperante serie de punzadas. Thiem se adue?¨® de la pista de inmediato, hizo retroceder a Nadal al fondo y tradujo el primer parcial en un muestrario de derechas y reveses a una mano. Le hizo recular al espa?ol, que cuando no ten¨ªa que devolver desde la lejan¨ªa le tocaba hacerlo tan escorado que en ocasiones llegaba a rozar los muros exteriores.

No encontraba Nadal la forma de frenar la ofensiva porque Thiem estaba inspirad¨ªsimo y ¨¦l no andaba fino. En el lenguaje gestual del austriaco, fabuloso tenista pero todav¨ªa poco maleado, se adivinaban muchas cosas que no se vieron las semanas pasadas. Ven¨ªa con la lecci¨®n bien aprendida, porque en el God¨® no tuvo opci¨®n y en la Caja M¨¢gica se le agot¨® el dep¨®sito de gasolina, de modo que esta vez no contemporiz¨®. Apost¨® por la v¨ªa recta, rehuy¨® el peloteo y peg¨® duro desde todos los frentes. Se la jug¨® a todo o nada y en esta ocasi¨®n obtuvo premio.

Tan solo sufri¨® cuando pens¨® un poco, porque mientras jug¨® con el piloto autom¨¢tico fue superior. Aun as¨ª, el de Manacor consigui¨® enredar el primer set, que a priori se ve¨ªa sentenciado despu¨¦s de la doble rotura de Thiem en el primero y el quinto juego. Contragolpe¨® el espa?ol en la m¨ªnima franja de tregua que le concedi¨® su rival, pero fue una circunstancia ef¨ªmera. El austriaco ¨Cocho t¨ªtulos en su haber, uno en 2017¨C sell¨® la manga y en la segunda extendi¨® el asedio. Nadal resisti¨®, salvando dos primeras opciones de break en el quinto juego, pero poco despu¨¦s cedi¨® (3-4) y la tarde se le torci¨® del todo.

Isner-Zverev en la otra semifinal

Y es que Thiem le ofusc¨®. Con 4-3, el n¨²mero siete ¨Csemifinalista el curso pasado en Roland Garros¨C volatiliz¨® cualquier esperanza al anular tres bolas de rotura para Nadal. Luego, con el temple de los elegidos, cerr¨® el encuentro con mano firme y celebr¨® su segunda victoria sobre el espa?ol, al que ya bati¨® en Buenos Aires la temporada anterior. No ca¨ªa Nadal desde el pasado 2 de abril, cuando fue derrotado en Miami por Roger Federer. Desfilaba sin oposici¨®n el mallorqu¨ªn en el polvo de ladrillo, hasta que el joven Thiem trunc¨® su marcha triunfal y envi¨® otro mensaje al aficionado: se avecina una estrella.

En las semifinales, el austriaco se enfrentar¨¢ al ganador del pulso entre Novak Djokovic y Juan Mart¨ªn del Potro, y el otro emparejamiento medir¨¢ a John Isner (7-6, 2-6 y 7-6 a Marin Cilic) con otro diamante de la nueva hornada, el alem¨¢n Alexander Zverev (7-6 y 6-1 a Milos Raonic).