Ante Haase, el Nadal imperial

En menos de un cuarto de hora, Robin Haase ya jadeaba, y en media vuelta de reloj, ya hab¨ªa cedido el primer parcial. El holand¨¦s padeci¨® lo que estos ¨²ltimos dos meses ya han padecido tantos otros: Rafael Nadal, si no en estado puro, muy cerca de ello. No afloja un mil¨ªmetro ni el paso el espa?ol, que en su segunda comparecencia en Roland Garros, la primera este a?o en la Chatrier, su Chatrier, volvi¨® a dejar claro que para sacarlo de ah¨ª va hacer falta algo m¨¢s que ganas y buena voluntad. Ahora mismo, en Par¨ªs, no se le advierte mayor rival que ¨¦l mismo o su cuerpo. Desde luego no Haase, con aspecto de muy buen tipo pero despachado en 1h 49m: 6-1, 6-4 y 6-3.

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No afloja Nadal. Ya lo dice uno de sus t¨¦cnicos, Carlos Moy¨¢: ¡°A veces tenemos que decirle que pare en los entrenamientos¡±. No entiende otra v¨ªa el de Manacor, que este mi¨¦rcoles regresaba a su pista fetiche ¨Caunque se siente m¨¢s c¨®modo la Suzanne Lenglen¨C despu¨¦s de un a?o. Para ser exactos, no jugaba en su peque?o reino parisino desde el 27 de mayo de 2016, cuando someti¨® a Facundo Bagnis y alcanz¨® su triunfo 200 en los Grand Slams. El resto, ya se sabe y se ha contado: la mu?eca, el par¨®n, el oro ol¨ªmpico en dobles y una pretemporada a destajo; despu¨¦s, seis finales, tres t¨ªtulos en tierra y los excelentes biorritmos de la actualidad.

No admite r¨¦plica Nadal?ahora. No hasta ahora, al menos. Solo Dominic Thiem ha conseguido batirle esta temporada sobre arcilla (Roma) y progresa en Par¨ªs como un carro de combate. Despach¨® a Benoit Paire sin apuro alguno en el estreno y este mi¨¦rcoles de una forma muy similar a Haase, jugador de su quinta, 46 en el listado de la ATP. Lo dicho al principio: le puso buena voluntad el hombre, de la misma quinta que Nadal, pero solo se solt¨® un poco cuando el balear ya le hab¨ªa dado un garrotazo en la primera manga, resuelta en un santiam¨¦n.

Jeu, Nadal, se oye estos d¨ªas en la megafon¨ªa de Roland Garros. Un juego, otro, otro, otro y otro¡­ El p¨²blico de la Chatrier, entre 20? agradables y algo de brisa, hac¨ªa la ola. Lleno para el espect¨¢culo, como siempre. Y el espa?ol a lo suyo, s¨®lido en todas las vertientes del juego y puliendo esa derecha y el saque (85% de puntos con segundos) para dominar. Haase colabor¨® lo suyo, porque al holand¨¦s no le falta tenis y le propuso un partido con ritmo y peloteo, que en el fondo es lo mejor a estas alturas para ir cogiendo rodaje y llegar a punto a las estaciones definitivas de la segunda semana.

Nadal, siempre cauto, recela de mirar m¨¢s all¨¢ del d¨ªa a d¨ªa y el partido a partido. Liquid¨® a Haase sin sobresaltos, por la v¨ªa imperial (33 ganadores y sin conceder una sola bola de break), y se encontrar¨¢ en la tercera ronda del torneo con el georgiano Nikoloz Basilashvili (7-6, 7-6 y 7-6 a Viktor Troicki). La ficha dice que tiene 25 a?os, est¨¢ en el pelda?o 63 del ranking y todav¨ªa no se ha medido a Nadal. Y los n¨²meros de este lo dicen todo: este a?o, 19-1 en tierra batida; en Roland Garros, 74-2. Jeu, Nadal, Jeu, Nadal, Jeu, Nadal¡­