El Bar?a abraza a Barcelona frente al Betis
Los azulgrana derrotan con claridad a un inocuo rival en un semivac¨ªo Camp Nou
Hay que ganar tiempo sin perder puntos, aunque no se sepa muy bien para qu¨¦, incapaz de adivinar el barcelonismo, m¨¢s ausente que presente en su propia casa, si Messi renovar¨¢ o se ir¨¢ al reencuentro de Guardiola en el City de la misma manera que Neymar se abraza a Alves en Par¨ªs mientras Iniesta visualiza de mayor un futuro que nunca imagin¨® de ni?o en Fuentealbilla.
El hincha azulgrana est¨¢ preocupado por su Bar?a y dolorido por su Barcelona, desorientado por el extrav¨ªo del Camp Nou y pendiente del gent¨ªo de la Rambla, enamorado de Canaletas: por la fuente de la que bebi¨® Cruyff nada m¨¢s llegar de ?msterdam y por la farola desde la que antes se le¨ªa la pizarra que anunciaba los goles de Samitier y en tiempos de victoria se izan las banderas del club, de la ciudad y de Catalu?a. Los culers desconocen cu¨¢ndo podr¨¢n regresar a Canaletas, no atinan a descubrir qu¨¦ le aguarda al Bar?a, y, sin embargo, no pierden la fe en cantar victoria a la espera de las mayores gestas, como cuando Guardiola planeaba de madrugada c¨®mo activar a Messi en el Bernab¨¦u desde un s¨®tano del Camp Nou.
El Bar?a es m¨¢s que nunca Barcelona. Incluso el 10 no llevaba en su camiseta el nombre de Messi sino de Barcelona en el partido contra el Betis. Messi es la ¨²nica certeza en un club presa de la improvisaci¨®n, agitado el equipo en cada partido por Valverde, un entrenador que se niega a ver pasar el tiempo, dispuesto a combatir el decaimiento y la fatalidad que sacuden al Bar?a despu¨¦s de cruzarse con el Madrid. Valverde mir¨® la carrera de Messi y, en ausencia de Neymar y Luis Su¨¢rez, le devolvi¨® a la posici¨®n de falso 9.
Abierto en las bandas por Deulofeu y Alc¨¢cer, al Bar?a le costaba, sin embargo, filtrar el pase a Messi. Aunque los azulgrana presionaban alto, mucho y bien, sin dejar salir al Betis, no hab¨ªa manera de alcanzar posiciones de tiro ante Ad¨¢n. Los verdiblancos bloqueaban los disparos del 10, el punto de encuentro del Barcelona. A su f¨²tbol f¨ªsico, de mucho desgaste, le faltaba fluidez y precisi¨®n; el pase m¨¢s sencillo se convert¨ªa en una jugada imposible y los tiros de falta de Messi ya no entraban por la escuadra como antes sino que daban en el palo izquierdo de Ad¨¢n.
Messi, sin embargo, no desfalleci¨® y su alianza con Deulofeu result¨® tan providencial como el despliegue de Sergi Roberto. La asociaci¨®n funcion¨® como quien da la luz nada m¨¢s llegar a casa despu¨¦s de atravesar la calle m¨¢s oscura de Barcelona. El 10 apret¨® hasta recuperar la pelota y habilitar a Deulofeu para que pusiera el 1-0 despu¨¦s de que el bal¨®n diera en el pie de Tosca y Sergi Roberto cumpliment¨® una asistencia de Deulofeu en el 2-0.
La intensidad en ataque y en defensa de Deulofeu fue tan decisiva como la intervenci¨®n de Mascherano con 1-0. Vulnerable en carrera, el Jefecito es el rey del tackle, espl¨¦ndido cuando le reban¨® el cuero a Sergio Le¨®n. El delantero se dispon¨ªa a rematar a Ter Stegen para el 1-1 cuando se interpuso la bota de Mascherano con la misma eficacia que en su d¨ªa ya le quit¨® un gol a Bendtner en la Champions.
El marcador invitaba al Bar?a a conservar la pelota m¨¢s que a atacar al Betis, un equipo nuevo, demasiado largo y poco intenso, incapaz de chutar a la porter¨ªa de Ter Stegen. Los azulgrana regularon bien alrededor de Messi. Han perdido calidad y han ganado generosidad y sentido de equipo, calidades expresadas en los movimientos de jugadores como Alc¨¢cer y Sergi Roberto y en la actitud de Leo.
El 10 no par¨® de apuntar a los palos de la porter¨ªa de Ad¨¢n mientras apretaba fuerte Semedo. No se sabe muy bien qu¨¦ pasar¨¢ con el lateral derecho despu¨¦s de las pruebas de Valverde. La implicaci¨®n del t¨¦cnico es la mejor noticia en un club paralizado y peleado con el mercado y con Europa. Valverde pide una plantilla acorde con las exigencias y de momento la que hay da para ganar bien al Betis, derrotado, por otra parte, en sus nueve ¨²ltimas visitas al Camp Nou. La afici¨®n, mientras, espera en casa a ver qu¨¦ pasa; quiz¨¢ regrese para el derbi despu¨¦s de saber el resultado de Mendizorroza. Hay que ir d¨ªa a d¨ªa en el Bar?a.
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