Busquets, el guardi¨¢n del estilo

A sus 29 a?os, Sergio Busquets (originario de Sabadell pero criado en Bad¨ªa del Vall¨¦s) est¨¢ a punto de sumarse a la lista de jugadores centenarios con Espa?a. Y lo har¨¢ a su manera, sin ruido, al¨¦rgico como es a exponerse p¨²blicamente, salvo que sea del todo necesario lanzar alguna misiva.

Tras perderse por acumulaci¨®n de tarjetas el encuentro frente a Albania en Alicante, esta noche ante Israel (20.45, La 1) vestir¨¢ de nuevo la el¨¢stica roja, y ya ser¨¢n 100 las veces en las que esa planta imponente ¡ªpero aparentemente desgarbada¡ª se pasee por el centro del campo restando importancia a la velocidad. Porque a Busquets las carreras descarnadas le suponen asumir un error previo, el de su ubicaci¨®n en el campo. Y desde que irrumpiera en la ¨¦lite en 2007 ese ha sido su mayor recurso. Con Busi como ancla, a su alrededor ha gravitado y gravita con alivio esa exquisita factor¨ªa de mediocampistas alumbrada por Espa?a en la ¨²ltima d¨¦cada: Xavi, Xabi Alonso, Iniesta, Silva, Cesc, Mata, Koke, Isco, Sa¨²l, Asensio... Se alinee quien se alinee siempre cuenta con el azulgrana como escolta. Es el guardi¨¢n del estilo. Pese a todo, tan poco le gusta la pasarela que hay quien sostiene que Busi es el mejor jugador an¨®nimo del mundo. Y eso que con sus cien internacionalidades a la vista pocos han sido tan visibles.

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La omnipresencia actual de Busquets en cualquier once de la selecci¨®n espa?ola remite a Vicente del Bosque. ¡°Si fuera jugador de f¨²tbol actualmente, me gustar¨ªa parecerme a Sergio Busquets¡±, lleg¨® a decir el exseleccionador durante el Mundial de 2010. ¡°Lo hace todo bien, est¨¢ continuamente en disposici¨®n de ayudar al equipo, es generoso, se vac¨ªa defensivamente, y es de los primeros que empieza a jugar al f¨²tbol. Y cuando ¨¦l est¨¢ bien el f¨²tbol se hace m¨¢s fluido¡±. Del Bosque utiliz¨® aquellas alabanzas para justificar su variaci¨®n en el esquema 4-3-3 que Luis Aragon¨¦s hab¨ªa implantado con ¨¦xito en la selecci¨®n que se proclam¨® campeona en la Eurocopa de 2008. A diferencia de Aragon¨¦s, Del Bosque reuni¨® a Xabi Alonso y a Busquets por delante de la defensa, modificando el dibujo final a un 4-2-3-1 que se apresur¨® a desetiquetar como defensivo. ¡°No es un doble pivote¡±, advirti¨®.

A Julen Lopetegui la presencia del catal¨¢n en el centro del campo le resulta igualmente sugerente. Sin embargo, a diferencia de su antecesor (que en alguna ocasi¨®n adelant¨® la posici¨®n de Alonso dejando al del Barcelona como ¨²nico jugador por delante de la defensa), el vasco ha reunido a su alrededor a los futbolistas que mejor pueden encarnar esa misi¨®n de acompa?amiento y custodia que vertebra Busquets. Durante los ocho partidos de la fase de clasificaci¨®n Lopetegui ha empleado dos veces el 4-2-3-1 (con Busquets y Koke), cuatro un 4-3-3 al que se han sumado Iniesta y Thiago en el centro, y en tres ocasiones un 4-1-4-1 de marcado corte ofensivo para los encuentros m¨¢s asequibles.

¡°La valoraci¨®n de Busi es clara: es un jugador de m¨¢ximo nivel, de m¨¢xima fiabilidad¡±, se?al¨® en rueda de prensa ayer Lopetegui. Y no se qued¨® ah¨ª. ¡°Es un jugador que transmite pasi¨®n, es un profesional que respeta al m¨¢ximo su profesi¨®n y que juega al f¨²tbol como los ¨¢ngeles¡±, a?adi¨®. ¡°Es un jugador absolutamente importante¡±. El resultado de tanta variaci¨®n alrededor de una constante ha situado a Busquets como el tercer jugador m¨¢s utilizado de la plantilla con 720 minutos, solo por detr¨¢s de De Gea (810) y Silva (728). El canario no ha viajado a Israel despu¨¦s de ver una amarilla ante Albania igual que Piqu¨¦, por lo que la suma de minutos que acumule Busquets en el Teddy Stadium le servir¨¢ para sobrepasar al mediapunta del Manchester City.

Si en algo perjudicara a Espa?a la utilizaci¨®n constante de Busquets tendr¨ªa que ver con la estimulaci¨®n de un plan b. Al margen de Sa¨²l, el recurso al que recurri¨® el seleccionador en Alicante, no parece que exista un jugador sobre el que haya descansado la funci¨®n de complementar al jugador del Bar?a. Ni Herrera, ni Illarramendi ni Javi Mart¨ªnez, a los que ha convocado en diversas ocasiones, han llegado a establecerse. Mucho menos futbolistas que no se han mantenido en las convocatorias. Ha sido el caso de San Jos¨¦, al que Del Bosque valoraba como central y medio centro, o Bruno Soriano, hoy lesionado, pero antes puntualmente dosificado a pesar de su patronaje similar.

Aislado el factor competitivo una vez certificada la clasificaci¨®n para el Mundial, a Espa?a le resta un encuentro en el que poner en valor la amplitud de miras de un vestuario con recursos de todo tipo. O casi, porque cuando es cuesti¨®n de reemplazar a Busquets la imagen de momento se funde a negro.