Dieta vegana y el plan anti ¡®jet-lag¡¯ de la NASA, los secretos de Hamilton

Un bofet¨®n que le cruz¨® la cara. As¨ª interpret¨® Lewis Carl Davidson Hamilton (Gran Breta?a, 1985), que Nico Rosberg, el compa?ero de equipo al que hab¨ªa superando en la pista durante toda su vida, le arrebatara el a?o pasado la corona de campe¨®n del mundo de F¨®rmula 1. Para rematar su frustraci¨®n, el alem¨¢n dio un portazo hist¨®rico y decidi¨® retirarse, dejando a su vecino de taller sin la posibilidad de revancha. Hamilton pas¨® las navidades volando de aqu¨ª para all¨¢ en su avi¨®n privado, un jet de media distancia por el que en su d¨ªa (2013) pag¨® m¨¢s de 23 millones de euros, y entre su casa en las Rocosas y su apartamento en Manhattan, cogi¨® fuerzas para el asalto definitivo, el que en 2017 deb¨ªa emparejarle con Sebastian Vettel en n¨²mero de t¨ªtulos (cuatro).

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Para no hacerle enloquecer, Mercedes incorpor¨® a Valtteri Bottas, un finland¨¦s que en Williams apuntaba maneras, pero que ya ha demostrado alguna que otra carencia, adem¨¢s de necesitar de tiempo de adaptaci¨®n. Sin un contrapoder s¨®lido al otro lado del garaje, la ¨²nica esperanza de que el ocupante del coche n¨²mero 44 no pasara el rodillo se focaliz¨® en Vettel, la sensaci¨®n del invierno. A pesar de un arranque m¨¢s que prometedor del alem¨¢n, que encaden¨® tres triunfos y tres segundos puestos en las seis primeras paradas del calendario, la pegada de Ferrari qued¨® a merced de la fiabilidad, el factor que finalmente propici¨® que el brit¨¢nico celebrara el alir¨®n dos grandes premios antes del final. De cualquier forma, la fragilidad del monoplaza de ¡®Il Cavallino¡¯ no deber¨ªa relativizar el estrepitoso curso de un Hamilton m¨¢s centrado que nunca dentro de lo que es ¨¦l.

Sus nueve victorias, 13 podios y 11 poles hasta el momento, y especialmente la racha de tres triunfos que enlaz¨® al volver del par¨®n veraniego, combinados con las aver¨ªas que provocaron el derrumbe de Ferrari en Malasia y Jap¨®n, y el descalabro de Singapur ¨CVettel arranc¨® desde la pole y tras emparedar a Verstappen no pas¨® de la tercera curva¨C, fueron un martillazo demasiado contundente que termin¨® por abrir un hueco insalvable para la tropa de Maranello, centrada ya desde hace varias semanas en el dise?o del prototipo del a?o que viene. Puntuales a la cita se presentar¨¢n Mercedes y su punta de lanza, convertido m¨¢s que nunca en una aut¨¦ntica multinacional con patas que parte la pana dentro de la pista y tambi¨¦n fuera de ella.

En esta ¨²ltima temporada, Hamilton le dio una vuelta m¨¢s a su vida. Puestos a buscar responsables que de alguna forma justificaran su falta de mordida frente a Rosberg despidi¨® al que hasta ese momento era su preparador f¨ªsico e incorpor¨® a Angela Cullen, que compagina su funci¨®n de fisioterapeuta con la de asistente y cuya especialidad es la de optimizar el rendimiento f¨ªsico y mental de los deportistas de ¨¦lite. Junto a ella tom¨® una de las dos decisiones m¨¢s importantes de su vida, seg¨²n reconoce el propio protagonista. ¡°Fichar por Mercedes y convertirme en vegano me ha cambiado. A lo largo de todo el a?o me he sentido muy fuerte desde la vertiente mental, pero debo reconocer que cambiar mi dieta me ayud¨® a dar un gran paso adelante desde el punto de vista f¨ªsico¡±, explica el tetracampe¨®n, que este domingo en M¨¦xico se uni¨® al exclusivo club de leyendas que acumulan un m¨ªnimo de cuatro mundiales: Michael Schumacher (siete), Juan Manuel Fangio (cinco), y Alain Prost y Vettel (cuatro).

El otro pilar de este protocolo aplicado por Hintsa, la escuela finlandesa de la que forma parte Cullen y la mayor parte de los entrenadores de los principales equipos del paddock, radica en tratar de que el corredor descanse todo lo que pueda y evitar en la medida de lo posible los efectos del jet-lag. ?Y c¨®mo se consigue eso? Pues a partir de un programa desarrollado en su d¨ªa por la NASA, y que basa su eficacia en unos horarios de sue?o que deben respetarse a rajatabla, con la ayuda de pastillas de melatonina y de unas gafas de sol para adaptar su vista a la luz seg¨²n convenga estimular el cerebro para que crea que es por la ma?ana, la tarde o de noche. Una rutina que debe funcionar de maravilla si tenemos en cuenta que es eficaz en un tipo que se pasa el d¨ªa en el aire, de las pasarelas de Par¨ªs y Mil¨¢n a las de Nueva York, pasando antes por Montmel¨®, M¨®naco o Silverstone, y que despu¨¦s se sube a un b¨®lido con el que exhibe ese don que esconde en sus manos y que le han llevado a ser el piloto con m¨¢s pole position de la historia (72). Y lo que le queda.