Nadal se engrasa con Mayer

Para el nutrid¨ªsimo pelot¨®n de jugadores que agrupa a la clase media del tenis, definitivamente, Rafael Nadal es un verdadero tormento. Uno de ellos es el argentino Leonardo Mayer, 52 del mundo y que en las seis ocasiones que se ha cruzado con el actual n¨²mero uno ha salido trasquilado. Recientemente le ha ocurrido un par de veces: hace cuatro meses en Nueva York y esta vez en Melbourne; en la primera al menos logr¨® ara?arle un set, pero en esta ocasi¨®n Nadal le dej¨® todav¨ªa menos migas y eso que el espa?ol no lleg¨® a meter la sexta marcha en ning¨²n momento.

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Suficiente, en cualquier caso, para progresar en Melbourne (6-3, 6-4 y 7-6, en 2h 38m) y citarse en la tercera ronda con el bosnio Damir Dzumhur, otro de esos proletarios que est¨¢ lejos de la burgues¨ªa del circuito y que aspira a d¨ªas de gloria puntuales. Y el suyo, cosas de la vida, fue precisamente ante Nadal, al que super¨® la ¨²nica vez que se han cruzado en la pista. Ahora bien, hay trampa: aquel d¨ªa, en Miami, al balear le retir¨® un golpe de calor, no el tenis de Dzumhur. No obstante, el balc¨¢nico tendr¨¢ para siempre el laurel de haber vencido al gigante en un partido oficial.

El bosnio (25 a?os, 30 de la ATP) aparece ahora en el horizonte, pero antes fue el turno de Mayer y el argentino le puso todas las ganas del mundo, como siempre, pero a su potente derecha le acompa?a un rev¨¦s de mantequilla que le desinfla una y otra vez. Y eso, ante Nadal, es algo as¨ª como abrirse una herida en medio de un tanque de tiburones. Si el primer d¨ªa V¨ªctor Estrella Burgos le habilit¨® con un serial de reveses cortados, este mi¨¦rcoles Mayer le facilit¨® las cosas con un reverso a una mano que cedi¨® constantemente ante la bola picante del espa?ol.

"En general, dir¨ªa que lo he hecho todo pr¨¢cticamente bien, dir¨ªa que nada mal", analiz¨® ante los periodistas. "He cometido solo 10 errores no forzados, en 2h 38m, y son muy pocos; he metido 40 golpes ganadores... En general, dir¨ªa que ha sido muy bueno", repas¨® antes de referirse a su pr¨®ximo escollo: "Dzumhur sabe jugar al tenis, t¨¢cticamente se equivoca muy poco y te regala cero. Es un jugador que si no est¨¢s bien te va a ganar".

Mayor frescura, mejores automatismos

No quedar¨¢ este partido con Mayer para el recuerdo, porque de hecho fue m¨¢s bien plano; le bast¨® a Nadal una ruptura tempranera en el primer parcial, conservar el servicio en el segundo y otro quiebre en el tercero ¨Ccon r¨¦plica, pero abortada en el tie-break¨C para cerrar el d¨ªa sin mayor complicaci¨®n. Y eso, as¨ª lo dice ¨¦l, es lo que cuenta ahora a fin de cuentas. Necesita rodaje y Mayer (buen tenista, pero muy tierno a la vez) le permiti¨® desarrollar un punto m¨¢s de juego que Estrella, de modo que se march¨® satisfecho. F¨ªsicamente ofreci¨® m¨¢s frescura y continu¨® engrasando los automatismos que demandan estos primeros compases de la temporada, m¨¢s a¨²n con su retorno tard¨ªo a la competici¨®n.

De esta forma, Mayer cay¨® como fruta madura. Mayer, Estrella Burgos (79), Pablo Cuevas (36), Hyeon Chung (55), Jared Donaldson (56), Karen Khachanov (42), Andrey Rublev (53), Alexandr Dolgopolov (64), Taro Daniel (121), Dusan Lajovic (85), Donald Young (43), John Millman (137)¡­ y tant¨ªsimos otros ocupantes de la zona media de la pir¨¢mide a lo largo del ¨²ltimo a?o. Conclusi¨®n: Nadal es una pesadilla para todos ellos.