Sainz vislumbra la victoria de su segundo Dakar

Despu¨¦s de que el director del Team Peugeot Total, Bruno Famin, dijera que el m¨¢s lento de sus pilotos era Cyril Despres, justo antes de la salida en Lima (Per¨²), el franc¨¦s aseguraba, convencido como estaba despu¨¦s de haber ganado cinco veces el Dakar en moto y de debutar con nota el a?o pasado en la categor¨ªa de coches, que ¨¦l pod¨ªa ser tan r¨¢pido como sus compa?eros de equipo, a saber: St¨¦phane Peterhansel, Carlos Sainz y Sebastien Loeb. Y lo fue. Gan¨® la segunda especial. Fue la jornada en la que a Nani Roma (Mini) se lo llevaron en helic¨®ptero de vuelta a Lima. Ser¨ªa el primer sacrificado de este Rally Dakar, el m¨¢s duro en diez a?os de carrera en Sudam¨¦rica, seg¨²n los propios pilotos. El Dakar que est¨¢ a punto de ganar Carlos Sainz (el segundo, pues ya venci¨® en 2010) despu¨¦s de una de las pocas jornadas en las que ha disfrutado del terreno que m¨¢s le gusta, la tierra, en las pistas de la manga argentina del mundial de rallies. Ni un pu?ado de arena. De eso ya tuvo bastante en las primeras jornadas de competici¨®n.

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Desde entonces, conservador en las ¨²ltimas jornadas (ayer termin¨® sexto a m¨¢s de 19 minutos del ganador, Al-Attiyah), ha sido el ¨²nico capaz de resistir al duro plan ideado por Marc Coma, director deportivo. En las etapas iniciales el desierto peruano se abr¨ªa ante Sainz, Despres y compa?¨ªa. Y la supervivencia era primordial. Sufr¨ªa el espa?ol (mucha navegaci¨®n, m¨¢s dunas), pero llevaba mejor que nadie los d¨ªas malos. Mientras ¨¦l se dejaba unos minutos aqu¨ª y otros pocos all¨¢, Despres destrozaba su Peugeot al tratar de remontar una duna: rompi¨® la rueda y las suspensiones, tuvo que esperar ayuda y perdi¨® tantas horas que lleg¨® de madrugada al campamento. Sal¨ªa de Chilecito ayer como el 33 clasificado de la general. Perdidas sus opciones de ganar, el franc¨¦s, gran navegador, empez¨® cubriendo las espaldas de su colega y amigo Peterhansel.

Pero desde entonces ha llovido mucho (tambi¨¦n literalmente) y han fallado casi todos: fall¨® Al-Attiyah (Toyota) el mismo d¨ªa que Despres y se dej¨® una hora tras un choque; luego Loeb, que tuvo que retirarse al quedar herido su copiloto; y Peterhansel, que perdi¨® casi dos horas por un accidente (y otra hora ayer, tras chocar contra un ¨¢rbol). Y Despres se convirti¨® en el ¨¢ngel de la guarda de Sainz (55 a?os), que qued¨® como la ¨²nica esperanza de Peugeot para despedirse del Dakar con una victoria, pues la casa francesa anunci¨® que este ser¨ªa su ¨²ltimo Dakar.

Este jueves, el franc¨¦s, que de joven ejerci¨® de mec¨¢nico en un taller de Paris, asisti¨® al espa?ol para que pudiera seguir sin perder mucho tiempo despu¨¦s de pinchar una rueda. Adem¨¢s, Sainz tuvo que acabar la especial, la m¨¢s larga del Rally (523 kil¨®metros cronometrados entre Chilecito y San Juan) en tercera marcha tras romper la caja de cambios. Fue otra jornada afortunada: se dej¨® solo 18 minutos, nada grave despu¨¦s de la ventaja de una hora que hab¨ªa conseguido con paciencia y la buena gu¨ªa de su copiloto Lucas Cruz. La pen¨²ltima jornada, ayer, era la ¨²ltima gran prueba. La super¨®. Conserva m¨¢s de 46 minutos de ventaja sobre Al-Attiyah. Y ya acaricia la victoria. Le quedan 120 kil¨®metros para la meta en C¨®rdoba.