Aquel tongo en el M¨¢laga-Salamanca

¡ªYo vi aquel partido y fue infame.

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El que me habla es un viejo amigo malague?o, a¨²n dolido. El partido en cuesti¨®n es el M¨¢laga, 0 - Salamanca, 3, jugado el 27 de abril de 1980, en La Rosaleda. Hasta la fecha, el ¨²nico en el que hubo sanciones por trucar el resultado en Primera Divisi¨®n.

Para esa fecha, jornada ya 31, el M¨¢laga estaba desahuciado, condenado al descenso tras una temporada muy mala. Un mes antes hab¨ªa rehusado jugar contra el Almer¨ªa un partido para el que ten¨ªa el campo cerrado por incidentes ante el Rayo en La Rosaleda. Se estableci¨® que se jugara en Algeciras. El M¨¢laga no compareci¨®, tras apurar los plazos para presentar el recurso. Extra?¨® aquello. M¨¢s adelante surgir¨ªa una explicaci¨®n¡­

Pero est¨¢bamos ya por la jornada 31 y ahora el M¨¢laga ten¨ªa que recibir al Salamanca, que andaba por la segunda mitad de la tabla, en apurillos. El viernes, Orozco, delantero centro del M¨¢laga, recibi¨® una llamada de un excompa?ero, Castronovo, que se ha prestado a hacer de intermediario de Felipe Mesones, entrenador del Salamanca. Tras dejar el M¨¢laga, Castronovo hab¨ªa estado a las ¨®rdenes de Mesones en el H¨¦rcules y el Salamanca. Ahora jugaba para el Algeciras.

Castronovo transmiti¨® la oferta: 4.400.000 pesetas por dejarse ganar por el Salamanca. Orozco habl¨® con el club. La plantilla estaba muy quejosa por unos atrasos tremendos. Posiblemente, aunque nunca qued¨® aclarado, utiliz¨® la oferta para presionar al club para que pagara los atrasos.

En la ciudad corri¨® cierto runr¨²n y as¨ª se lleg¨® al partido del domingo. Castronovo acudi¨® a M¨¢laga. Pas¨® el d¨ªa en el hotel con el Salamanca, ya en el campo visit¨® ambos vestuarios. El Salamanca gan¨® 0-3 entre un griter¨ªo continuo de ¡°?tongo, tongo¡­!¡±. En la comparecencia ante la prensa, el entrenador, Viberti, se manifest¨® avergonzado. El M¨¢laga mult¨® a sus jugadores por falta de esp¨ªritu.

El asunto salt¨® a la prensa con fuerza ese mismo lunes. Hab¨ªa demasiados indicios de ama?o como para dejarlo pasar. La Federaci¨®n, dirigida por Pablo Porta, entr¨® de lleno en el asunto. Fueron citados a declarar seis jugadores del M¨¢laga: Corral, Ar¨¢ez, Mac¨ªas, Migueli, Megido y Orozco. Tambi¨¦n el entrenador, Viberti, y el presidente, Brinkmann Gil. Y Castronovo. Y Felipe Mesones, entrenador del Salamanca, as¨ª como el presidente, Jos¨¦ Luis Paniagua, los jugadores D¡¯Alessandro y Bustillo, los intermediarios Minguella y Pareja...

El asunto fue seguido con pasi¨®n por la afici¨®n de toda Espa?a. Fueron semanas y semanas de comparaciones, careos. De las pesquisas, seguidas al detalle por toda la prensa, se destap¨® lo que en realidad hab¨ªa pasado con el M¨¢laga-Almer¨ªa no jugado en Algeciras: que Corral, Ar¨¢ez, Mac¨ªas, Migueli y Orozco hab¨ªan aceptado ofrecimientos para vender el partido y el M¨¢laga prefiri¨® no presentarse.

El fallo lleg¨® el 20 de junio. Para entonces, la Liga ya ha acabado, han descendido el Rayo, el Burgos y el M¨¢laga (¨²ltimo) y el Salamanca ha terminado ocho puntos por encima del descenso. El fallo, con tres resultandos y seis considerandos, es terminante. Concluye que el partido se vendi¨® por la cantidad de 4.400.000 pesetas, lo declara nulo (se le restan los puntos al Salamanca, aunque no le afecta para el descenso), suspende por dos a?os a Orozco, Castronovo y Mesones, por uno a Corral, Ar¨¢ez, Mac¨ªas y Migueli y propone a la Federaci¨®n la inhabilitaci¨®n a perpetuidad del presidente del Salamanca.

En M¨¢laga se acepta el fallo. La afici¨®n daba por descontado que los jugadores vendieron el partido. Algunos hasta lo admit¨ªan como consecuencia de que no cobraban. Se trataba adem¨¢s de hombres ya entrados en la treintena, con mucho m¨¢s por detr¨¢s que por delante. Pero en Salamanca hubo un movimiento de indignaci¨®n, sobre todo por la figura del presidente, respetad¨ªsima. El Salamanca recurri¨®, pero Apelaci¨®n confirm¨® el fallo en todos sus t¨¦rminos.

Sin embargo, la cosa no qued¨® as¨ª. En octubre de ese mismo a?o se cre¨® un organismo supremo para la justicia deportiva el Comit¨¦ Superior de Disciplina Deportiva. La AFE present¨® recurso en defensa de los futbolistas del M¨¢laga. A su juicio, se hab¨ªa buscado un castigo ejemplar en un procedimiento sin garant¨ªas ni pruebas suficientes. Por su parte, Mesones acudi¨® a la misma v¨ªa, defendido por Jos¨¦ Mar¨ªa Gil Robles. El nuevo organismo admiti¨® el recurso, lo estudi¨® y decidi¨®, por cuatro votos contra tres, dejar sin efecto la sanci¨®n a los cinco malaguistas y a Mesones, con gran disgusto de Pablo Porta y toda la Federaci¨®n, que se vio desautorizada.

Ninguno de los futbolistas volvi¨® a jugar. Sus carreras acabaron all¨ª. No fue el caso de Felipe Mesones, que en la 80-81 sigui¨® ejerciendo en el Salamanca, aunque en la sombra, tras Neme, que figuraba como entrenador oficial. Una vez exonerado, sigui¨® entrenando veinte a?os m¨¢s.