La triple palanca de Djokovic

En Par¨ªs hubo este mi¨¦rcoles noticia, concentrada en tres segundos: uno por cada hachazo que dio Novak Djokovic a la arena de la pista Suzanne Lenglen, cuando estaba a punto de ceder un set contra Roberto Bautista. En ese lapso m¨ªnimo de tiempo volvi¨® el antiguo Nole, el originario, al que le herv¨ªa la sangre y le ard¨ªan los ojos; el que no regalaba nada, ni un c¨¦ntimo, cuando estaba sobre la pista y de lo que se trataba era de vencer o vencer, sin otra opci¨®n. Fueron tres segundos de puro Djokovic. Furia: ?Zasca, zasca, zasca! Y la herramienta reventada. El serbio termin¨® entregando esa manga en el tie-break, pero no as¨ª el partido. Gan¨® (6-4, 6-7, 7-6 y 6-2, en 3h 48m), accedi¨® a los octavos (contra Fernando Verdasco, este 7-6, 6-2 y 6-4 a Grigor Dimitrov) y volvi¨® a enviar se?ales positivas: el drag¨®n durmiente despert¨®. Es decir, el fuego interior no ha desaparecido del todo.

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¡°Algunas veces las emociones sacan lo peor o lo mejor de ti. A lo largo de mi carrera, algunas situaciones como esta me han ayudado a liberarme de la presi¨®n y otras no¡­ De todos modos, no estoy orgulloso de ello. No me gusta hacer esto, pero a veces ocurre¡±, explic¨® despu¨¦s ante los periodistas. ¡°Ning¨²n tenista debe hacer eso, porque debemos ser un ejemplo, pero hay veces que pierdes el control. A Novak se la ha ido la pi?a un poco¡­¡±, continu¨® Bautista, tremendo m¨¦rito el suyo porque compiti¨® en Par¨ªs solo una semana despu¨¦s de que falleciera su madre. ¡°?l lo est¨¢ intentando a muerte, pero esto no es cuesti¨®n de hacer un clic y ya est¨¢: soy de nuevo Novak, el mismo de antes. No. Esto cuesta mucho y ¨¦l est¨¢ mejorando¡±, sentenci¨® el castellonense, de 30 a?os.

Pese a las malas maneras, ese arrebato supone una maravillosa novedad para el tenis. Lentamente, Djokovic parece ir reconduci¨¦ndose hacia su vieja versi¨®n y el aficionado lo agradece, porque su regreso definitivo le aportar¨ªa much¨ªsima pimienta al circuito. Como en los viejos tiempos, jug¨® y gesticul¨® con intensidad, y despist¨® a Bautista con un abanico de servicios que tiene un sentido f¨ªsico. Despu¨¦s de medio a?o en el dique seco, como consecuencia de una lesi¨®n en el codo que le oblig¨® a pasar por el quir¨®fano en febrero ¡ªporque reapareci¨® en el Open de Australia pero el dolor no remit¨ªa¡ª, Nole decidi¨® variar la mec¨¢nica del saque para no da?ar la articulaci¨®n.

Y el resultado es una fotograf¨ªa con nuevos matices: distintas posturas, distintas rotaciones, distintos grados de elevaci¨®n del codo. Maniobras de m¨¢s o menos recorrido (tendiendo siempre a esto ¨²ltimo) y, por lo tanto, menos agresivas. ¡°Debo alternar¡±, explic¨® hace unos d¨ªas el 22 del mundo. ¡°Cambi¨¦ de raqueta y llev¨¦ a cabo algunas modificaciones. Comenc¨¦ a explorar nuevas t¨¦cnicas, diferentes movimientos. Si analizas mis partidos desde Melbourne o Indian Wells hasta aqu¨ª te dar¨¢s cuenta de que estoy haciendo tres tipos de servicios. Es algo en lo que estoy trabajando con mi equipo. A veces me siento bien y otras no tanto, pero es cuesti¨®n de coger ritmo y confianza para llegar a estar lo m¨¢s c¨®modo posible¡±, expres¨® el ganador de 12 grandes.

Cambios de velocidades, efectos y direcciones

¡°Var¨ªa constantemente¡±, atestigu¨® Bautista. ¡°No es para nada repetitivo y crea muchas dificultades al restador porque va variando velocidades, efectos y direcciones durante todo el partido. Cuesta descifrarlo, porque va cambiando todo el rato el gesto, aunque con Novak siempre ha costado¡±, agreg¨® el espa?ol, que ayer encaj¨® 10 aces, planteando una dura resistencia de principio a fin. ¡°He estado a un buen nivel y he competido de t¨² a t¨², pero cuando juegas contra alguien como ¨¦l y tienes la oportunidad, o la coges o es muy dif¨ªcil que tengas otra. Est¨¢s fuera. Desgraciadamente, el partido se ha definido en tres o cuatro puntos y he tenido mis opciones¡±, lament¨® el de Castell¨®n, despedido por el serbio con un fuerte abrazo y condolencias.

¡°Roberto nunca te va a regalar una victoria. Contra ¨¦l siempre tienes que merec¨¦rtela. Me gusta Roberto. Es un buen chico y siempre nos hemos llevado muy bien dentro del tour. Nos tenemos toneladas de respeto y aprecio, y he tratado de transmitirle todo mi apoyo. Son momentos dif¨ªciles para ¨¦l y su familia¡±, expuso con elegancia Nole, un caballero como la copa de un pino. ¡°En mi opini¨®n, las opiniones no son controlables¡±, cerr¨® este viernes. ¡°Puedes observarlas e intentar adquirir una habilidad para evitar que te conduzcan a situaciones comprometidas, pero no se pueden controlar. Si conoc¨¦is a alguien que se capaz de hacerlo, dec¨ªdmelo y hablar¨¦ con ¨¦l¡±, concluy¨® con una sonrisa que se extendi¨® por toda la sala.

Alexander Zverev, al borde del ¡®ko¡¯

Por la ma?ana abri¨® la central el alem¨¢n Alexander Zverev, uno de los jugadores que?te¨®ricamente le deber¨ªan poner espinas a Rafael Nadal. Sin embargo, el de Hamburgo sufri¨® de lo lindo en su pulso contra Damir Dzumhur, que lo tuvo contra las cuerdas. El bosnio desaprovech¨® una bola de partido y luego, despu¨¦s de 3h 54m, lo pag¨®: 6-2, 3-6, 4-6, 7-6 y 7-5. No obstante, al igual que en la ronda previa contra Dusan Lajovic, Zverev volvi¨® a irse a cinco mangas y esta vez cometi¨® 73 errores no forzados, adem¨¢s de entregar ocho veces el saque. Deber¨¢ mejorar ostensiblemente ante Lucas Pouille o Karen Khachanov, cuyo partido fue interrumpido por la lluvia.

Quien no pas¨® apuros fue Fernando Verdasco, un cl¨¢sico de los octavos en Par¨ªs. El madrile?o super¨® a Grigor Dimitrov, al¨¦rgico a la tierra batida, por 7-6, 6-2 y 6-4 (en 2h 21m). Se filtr¨® de esta forma por s¨¦ptima vez en la cuarta parada del grande franc¨¦s. Camino de los 35 a?os, todav¨ªa no renuncia a conseguir un trofeo del m¨¢ximo cach¨¦. ¡°Me gustar¨ªa conseguir cualquier t¨ªtulo importante a nivel individual, porque ya tengo tres Copas Davis, y mi gran sue?o es un Grand Slam o un Masters 1.000. Puede ser que no lo consiga, pero quiero darlo todo¡±, afirm¨® el 35 de la ATP.