Lopetegui: ¡°Debemos saber vivir cuando no tengamos la pelota¡±
El seleccionador espa?ol analiza el juego de La Roja a tres d¨ªas del comienzo del Mundial
D¨ªas antes de viajar a Rusia, a Julen Lopetegui no se le ve¨ªa relajado ante las grabadoras en su despacho de Las Rozas (Madrid). Tiene su l¨®gica. A sus 51 a?os, el guipuzcoano afronta como seleccionador su primer campeonato cumbre y tiene por delante tanto traj¨ªn como desvelos. A¨²n no ha cumplido dos a?os al frente de La Roja (lo har¨¢ el 21 de julio), pero ha encadenado 20 partidos sin una derrota. Aunque ya nadie mirar¨¢ por el retrovisor. Rusia 2018 ser¨¢ otra historia y el debutante Lopetegui parece tener una m¨¢xima: el talento individual al servicio del colectivo.
Pregunta. En el partido de clasificaci¨®n para Rusia frente a Italia en el Bernab¨¦u ¡ªen el que m¨¢s elogios se mereci¨® el equipo con usted al frente¡ª se alinearon ocho de los que cayeron frente al mismo rival en la Eurocopa de 2016. ?Al asumir el cargo se propuso cambiar pocas cosas?
Respuesta. Busc¨¢bamos una evoluci¨®n, no una revoluci¨®n. Sobre todo porque nos encontramos con un equipo con muy buena salud. En el f¨²tbol, cuando se gana, no todo est¨¢ bien, y cuando no se gana, no todo est¨¢ mal. Evolucionar no conlleva el cambio de jugadores, conlleva encontrar respuestas colectivas a todos los momentos del juego. Eso es lo que tratamos de potenciar respetando las virtudes de cada jugador, que son las que prevalecen en el f¨²tbol espa?ol.
P. ?Hacia d¨®nde ha querido usted que evolucionara el equipo?
R. Quer¨ªa que fuera un equipo m¨¢s completo, con las mejores respuestas colectivas posibles atacando y defendiendo.
P. ?La Roja ya ha cogido el punto de evoluci¨®n que quer¨ªa?
R. Los jugadores han demostrado una gran ambici¨®n en favor de lo colectivo. Lo hemos agradecido y exigido a la vez.
P. Con usted han jugado al tiempo Silva, Thiago, Rodrigo, Iniesta, Isco... Mucha gente en un mismo espacio y, sin embargo, en la selecci¨®n funciona con gran naturalidad. ?C¨®mo se consigue?
R. Los futbolistas han entendido que el hecho de tener una serie de condiciones no exime de una serie de responsabilidades. Y no me refiero solo a los momentos en que no tenemos la pelota. Tambi¨¦n hay que jugar r¨¢pido, a dos toques, tener amplitud permanentemente y que vayan jugadores por dentro. Esa movilidad, ese dinamismo de los jugadores, creo que nos ha hecho jugar bien. Pero todo eso con un objetivo claro: el gol. A veces tenemos m¨¢s espacios para atacar y tenemos que dar respuestas diferentes, y a veces, se nos repliegan m¨¢s atr¨¢s y tenemos que trabajar el espacio.
P. Ramos, Silva e Iniesta son los ¨²nicos que se han perpetuado en todas las grandes citas desde 2008. ?Le ha sorprendido su respuesta? ?No le miraron con escepticismo, como a un entrenador que no estaba encumbrado?
R. No. Esperaba que su reacci¨®n fuese la que ha sido. Los jugadores buscan respuestas, soluciones y argumentos. Nosotros tratamos de d¨¢rselos y, a partir de ah¨ª, la relaci¨®n ha sido muy buena. Una relaci¨®n honesta, clara, concisa y profesional.
P. ?Y su relaci¨®n consigo mismo tras verse como seleccionador absoluto?
R. La exigencia de entrenar a la selecci¨®n espa?ola te obliga a ser consciente de la responsabilidad que tienes, no solo ante los propios jugadores, sino ante los medios y ante la sociedad.
P. Desde que le nombraron da la sensaci¨®n de que se siente muy responsabilizado, casi obsesionado con dar la talla.
R. M¨¢s que obsesionarme me ilusiona. Es mi manera de sentir esta profesi¨®n. No ser¨ªa diferente si estuviera en un equipo.
P. Preparar un Mundial absoluto no es lo mismo que orientar un Mundial sub-21. ?Le preocupa una larga convivencia con un grupo de ¨¦lite?
R. No. Me preocupan las cosas cuando suceden. Intentamos ocuparnos de lo que tenemos que hacer, que es preparar al equipo para ese primer partido del d¨ªa 15 con Portugal. Eso es lo que nos preocupa, no la convivencia.
P. ?Qu¨¦ le lleva m¨¢s tiempo, entrenar el ataque o la defensa?
R. Todo. Piensas en c¨®mo atacar mejor, en c¨®mo defender mejor, en c¨®mo manejar mejor los partidos. Dar respuestas colectivas a los problemas que genera el juego es la esencia de este trabajo. Por eso dedicamos mucho tiempo al visionado de partidos.
P. ?Qu¨¦ faceta t¨¢ctica le ha resultado m¨¢s compleja?
R. Somos un equipo que intenta tener la pelota. Pero no siempre lo conseguimos, y hay que saber vivir con esos momentos. Entonces hay que actuar como equipo. Cuando la tenemos, intentamos hacer da?o al rival como objetivo prioritario, y cuando no la tenemos, procuramos recuperar lo m¨¢s r¨¢pido posible. Para convivir con la tipolog¨ªa de jugador que tenemos debemos ser muy ambiciosos y capaces tras nuestra p¨¦rdida en campo contrario. Si estamos bien colocados tendremos m¨¢s posibilidades de ¨¦xito. Y es lo que he tratado de hacer, ajustar cuatro cositas que forman parte del orden natural de los jugadores que tenemos.
P. A veces da la sensaci¨®n de que tras adelantarse en el marcador el equipo quiere seguir con la pelota, pero situ¨¢ndose unos metros m¨¢s atr¨¢s y a los jugadores no se les ve c¨®modos.
R. No buscamos que el rival nos domine. Tampoco somos un equipo que tenga como caracter¨ªstica la velocidad en la transici¨®n. Pero insisto: un equipo que aspira a ser completo no debe desmerecer ning¨²n momento del juego.
P. Da la sensaci¨®n de que lo menos definido es el nueve. ?Tiene claro lo que le gusta o vamos a asistir a una rotaci¨®n permanente entre Rodrigo, Aspas y Costa?
R. Son perfiles distintos. Tratamos de tener diferentes respuestas en ese puesto tambi¨¦n en funci¨®n del rival. A veces entiendes que es mejor tener una referencia clara y otras no.
P. ?Contra qu¨¦ rivales es mejor una referencia clara?
R. Yo no ser¨ªa muy absoluto en eso. Por encima de si juegas con un nueve en teor¨ªa cl¨¢sico o no, lo m¨¢s importante es lo que el resto de jugadores le brinda al equipo colectivamente, con y sin bal¨®n. Llegado el caso, tambi¨¦n podr¨ªamos jugar con dos jugadores espec¨ªficos de ataque.
P. ?No ha notado que el volante espa?ol se adapta mejor a un nueve no tan cl¨¢sico?
R. Hay ejemplos para demostrar claramente que con un nueve de los llamados cl¨¢sicos o de ¨¢rea el equipo puede funcionar. Y tambi¨¦n cuando, sin ning¨²n jugador de ¨¢rea, buscas llegar con muchos. Todo tiene sus pros y sus contras. Muy por encima de eso est¨¢ lo que el equipo me d¨¦.
P. Pero la conducta del equipo cambia en virtud del punta.
R. Son matices. Somos un equipo que trata de llegar con mucha gente al ¨¢rea. Otra cosa es que lo consigamos. No me gustan las etiquetas, como el r¨®tulo de nueve cl¨¢sico. El f¨²tbol es muy cambiante. Ahora, a cada jugador se le exige dominar muchos aspectos del juego. Antes era diferente. Un pel¨ªn m¨¢s primitivo. Esa especificidad contrasta con los jugadores modernos, donde tantos tienen una implicaci¨®n m¨¢s directa en muchos aspectos y un conocimiento m¨¢s amplio del juego colectivo en todas las zonas.
P. Busquets, capital para todos los entrenadores, es el jugador m¨¢s singular de la plantilla porque no tiene un relevo claro. ?Le inquieta?
R. Busquets ha sido y es determinante en su equipo y en la selecci¨®n. Sin ninguna duda. Pero no hay dos jugadores iguales. Creo que su gran cualidad, aparte de ser un muy buen jugador, es que es un aut¨¦ntico apasionado de su profesi¨®n.
P. Desde la retirada internacional de Xabi Alonso en Brasil 2014 tampoco el equipo ha dado con el nuevo acompa?ante de Busquets. Koke, Thiago, Sa¨²l, Illarramendi¡
R. Lo importante es que el equipo pueda sobrevivir y convivir con mucha naturalidad y solvencia a ausencias de jugadores muy importantes. Eso potencia la importancia del grupo.
P. ?C¨®mo lleva estar entre los favoritos?
R. No me voy a pelear con nadie que est¨¦ ilusionado. Si el equipo ha generado esta esperanza, bienvenida sea. Los equipos grandes se ganan esa ilusi¨®n. A partir de ah¨ª, ?te da algo esa ilusi¨®n? Es un intangible. Lo que hagamos en este Mundial depender¨¢ de la respuesta que demos en el campo. Vamos con un billete de tres partidos y el resto nos lo tenemos que ganar.
P. Si se estuviera tomando una ca?a con los amigos les dir¨ªa que Espa?a es favorita¡
R. Lo har¨ªa seguro, ?pero ahora no estoy tomando una ca?a!
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