El balonmano unifica Corea
Se¨²l y Pyongyang presentan un equipo conjunto en el Mundial que arranca este jueves en otro paso hacia el deshielo
Si hubo una guerra en el siglo XX que pr¨¢cticamente empez¨® en un campo de f¨²tbol -el conflicto de los Balcanes en el choque, nunca mejor dicho, entre el Dinamo de Zagreb (croata) y el Estrella Roja (serbio) de 1990-, el deporte en el siglo XXI se esmera por mostrarse tambi¨¦n como un instrumento ¨²til para la alta diplomacia. Incluso, para ayudar a destensar un problema tan crudo como el de la pen¨ªnsula de Corea.
Uno de los equipos que disputar¨¢ el Mundial de balonmano de Alemania y Dinamarca a partir de este jueves ser¨¢ el conjunto unificado de Corea del Norte y Corea del Sur, dos pa¨ªses t¨¦cnicamente en guerra desde 1950 y divididos por una de las fronteras m¨¢s calientes del planeta. La Federaci¨®n Internacional curs¨® la invitaci¨®n hace un a?o, tras consultar con el Comit¨¦ Ol¨ªmpico, y los dos implicados recogieron el guante en se?al de buena voluntad.
Competir¨¢ bajo el nombre de "Corea" y, como medida excepcional, la plantilla tendr¨¢ 20 fichas, y no 16 como el resto, para dar cabida a cuatro jugadores norcoreanos invitados de los que poco o nada se sabe en los d¨ªas previos a la cita m¨¢s all¨¢ de que tambi¨¦n son militares del r¨¦gimen de Pyongyang. El Norte, de hecho, nunca ha participado en un torneo internacional. El Sur, en cambio, es un referente del balonmano asi¨¢tico. Logr¨® el billete para el Mundial gracias a la medalla de bronce en el ¨²ltimo campeonato de su continente y lleg¨® a subirse al podio en unos Juegos, los que organiz¨® en 1988. El gesto pol¨ªtico disfrutar¨¢ del escaparate del partido inaugural el d¨ªa 10 contra Alemania en Berl¨ªn ante 15.000 espectadores.
Los jugadores de uno y otro lado de la pen¨ªnsula se conocieron dos d¨ªas antes de las Navidades en la capital germana, adonde llegaron por separado y con muy pocas horas de diferencia desde sus respectivos pa¨ªses. Se estudi¨® la posibilidad de que los norcoreanos pudieran ir antes al Sur a reunirse con sus compa?eros, pero finalmente el primer encuentro se produjo en Berl¨ªn. Seg¨²n narra la Federaci¨®n surcoreana en una especie de diario de la concentraci¨®n en su p¨¢gina web, la convivencia transcurre en armon¨ªa y los chicos evolucionan favorablemente en los entrenamientos.
Recibieron el mismo d¨ªa la visita de los embajadores de los dos pa¨ªses, el kimchi coreano no se ha hecho esperar a la hora de comer y, a diferencia de lo que ocurri¨® con el equipo femenino unificado de hockey hielo en los Juegos de Invierno del a?o pasado, todo indica que el plantel al completo se aloja en el mismo hotel. En la cita ol¨ªmpica, las 12 jugadoras norcoreanas viv¨ªan en un edificio separado de las otras 23 surcoreanas por exigencia de Kim Jong-un. La seleccionadora, la canadiense Sarah Murray, reconoci¨® despu¨¦s que las reuniones del equipo eran complicadas porque hab¨ªa que usar tres idiomas: ingl¨¦s, coreano del norte y coreano del sur. En Alemania, de momento, no hay noticias en este sentido. "Estamos decididos a actuar como un conjunto unido", asegur¨® el capit¨¢n del Sur, Jung Su-young, antes de subirse al avi¨®n.
"Lucharemos con agallas"
Salvo sorpresa, la suerte deportiva recaer¨¢ sobre los representantes surcoreanos, habituales de las grandes citas internacionales, pese a no clasificarse para los dos ¨²ltimos Mundiales. En el campeonato asi¨¢tico son uno de los dominadores (tienen nueve t¨ªtulos) y, cuando salen de su continente, nunca resultan un rival c¨®modo, sobre todo en los arranques de los torneos. Muy potentes f¨ªsicamente, su juego aparentemente an¨¢rquico de ataques r¨¢pidos y defensas abiertas y presionantes, siempre lleva su tiempo de someter.
Esta vez deber¨¢n multiplicarse todav¨ªa m¨¢s porque les ha tocado la parte dura del cuadro, con la actual campeona, Francia, la anfitriona Alemania, Serbia, Brasil y Rusia en la primera fase. Si la superan, se cruzar¨ªan probablemente con Espa?a. "Competimos como una Corea unida, va a ser algo hist¨®rico. Jugaremos con mentalidad de aprendiz y lucharemos con agallas", proclam¨® su t¨¦cnico, Young Shin Cho.
Sin embargo, el valor de este equipo?trasciende a lo que haga sobre la pista;?reside en realidad en su propia existencia. El deporte se ha convertido en una pieza m¨¢s de la pol¨ªtica de deshielo iniciada a principios de 2018 y refrendada en el apret¨®n de manos entre ambos presidentes en la Zona Desmilitarizada que les separa. Desde entonces se han sucedido los gestos. Kim Jong-un, el dictador del pa¨ªs m¨¢s herm¨¦tico y oscuro del mundo, mand¨® a su hermana Kim Yo-jong a la ceremonia de inauguraci¨®n de los Juegos Ol¨ªmpicos de Invierno celebrados en Pyeongchang el pasado febrero, donde ambas delegaciones desfilaron juntas y presentaron un conjunto unificado de hockey femenino, el primero en 27 a?os. Ahora le toca el turno al balonmano y ya han anunciado una candidatura com¨²n para los Juegos de 2032. Pol¨ªtica y deporte tambi¨¦n pueden formar un matrimonio posible e irreprochable.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.