Pliskova firma un ¡®ko¡¯ hist¨®rico ante Serena

No habr¨¢ r¨¦cord, al menos no a¨²n, para Serena Williams. La estadounidense abandon¨® la pista central de Melbourne con los ojos vidriosos hasta que no pudo m¨¢s, y en el t¨²nel del vestuario rompi¨® a llorar. Se le hab¨ªa escapado el 24, otra vez, la cifra m¨¢gica que luce Margaret Court y la raz¨®n nuclear por la que ella sigue compitiendo, porque el n¨²mero figura en negrita en los libros de historia del tenis y la norteamericana no quiere irse hasta que lo haya alcanzado. No ser¨¢ en Melbourne, escenario de su ¨²ltimo Grand Slam, en 2017; no ser¨¢ esta vez, no, porque se le escap¨® su tercera final consecutiva. Incre¨ªblemente, perdi¨® un partido que lo ten¨ªa ganado y Karolina Pliskova avanz¨®, salvando cuatro match points: 6-4, 4-6 y 7-5, en 2h 10m. Game over Serena.

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Serena Williams y la obsesi¨®n del 24

Hab¨ªa volteado el partido y mandaba 5-1 en el tercero, con 40-30 y servicio, pero en una carrera lateral se lastim¨® el tobillo izquierdo y a partir de ah¨ª se diluy¨®. La checa enlaz¨® seis juegos seguidos para acceder a las semifinales tras una remontada inolvidale. Despu¨¦s de haber cedido el a?o pasado dos finales de un major, en Londres y Nueva York, la estadounidense se llev¨® un severo golpe en Melbourne, porque enfila los 38 a?os y ha dejado marchar tres trenes en medio a?o. La australiana Court, por tanto, sigue reinando en solitario, con m¨¢s t¨ªtulos que nadie.

¡°Ella jug¨® de manera incre¨ªble cuando yo tuve los match points¡±, justific¨® Williams, que rest¨® importancia a la torcedura. ¡°Simplemente jug¨® muy bien en esa situaci¨®n. Mi tobillo parece ser que est¨¢ bien, ahora est¨¢ bien; lo que no s¨¦ es c¨®mo estar¨¢ ma?ana¡±, dijo.?¡°Yo continu¨¦ siendo agresiva, pero ella envi¨® todas las bolas a las l¨ªneas. Hice todo lo que pude, no me rend¨ª; simplemente ella fue mejor. No me gusta poner excusas. Odio llamar al m¨¦dico en mitad de un partido, no pens¨¦ que fuera necesario y segu¨ª adelante. No pensaba que fuera a hacerse tan duro y comet¨ª algunos errores, pero ella jug¨® de forma brillante¡±, zanj¨®.

Parec¨ªa improbable que a Serena se le escapase el t¨ªtulo en Australia. Ven¨ªa lanzada Williams, en un estado de forma que no se advert¨ªa desde hace mucho tiempo y con un movimiento de piernas magn¨ªfico que le hab¨ªa propulsado en las cinco rondas previas, despachadas a estacazos: Maria, Bouchard, Yastremska y luego la n¨²mero uno, Simona Halep. Solo esta fue rival. Abatida la rumana, en la recta final parec¨ªa que no hab¨ªa mayor amenaza que la japonesa Naomi Osaka, que efectivamente, est¨¢ a solo dos victorias de elevar su segundo grande con solo 21 a?os. 6-4 y 6-1 a Elina Svitolina. Cita, pues, con Pliskova.

Doble aliciente: primer Grand Slam y el trono

A la checa se le abri¨® de par en par el cielo. Williams comenz¨® a tener problemas para maniobrar y sobre todo en los apoyos de los saques. De nada sirvieron sus 54 golpes ganadores, los 12 aces. Se ech¨® la mano un par de veces al tobillo y fue desinfl¨¢ndose. En su cuarto asalto despu¨¦s de haber regresado siendo madre, Serena volvi¨® a fallar. Pliskova, dirigida por Conchita Mart¨ªnez, engarz¨® la victoria y mantiene su doble aspiraci¨®n: ganar su primer Grand Slam ¨Cdisput¨® la final del US Open en 2016 y las semifinales de Roland Garros al a?o siguiente¨C y recuperar el n¨²mero uno que defendi¨® de forma ef¨ªmera hace dos a?os.

Estando Halep fuera de combate, ella, Osaka y su compatriota Petra Kvitova pugnan por sentarse en el trono de la WTA a partir del pr¨®ximo lunes.

¡°Estaba casi en el vestuario y ahora estoy aqu¨ª, hablando contigo¡±, dec¨ªa la checa durante la entrevista a pie de pista, mientras Serena lloraba en la intimidad y Court, seguramente, se frotaba las manos en alg¨²n rinc¨®n australiano. ¡°Es la mejor remontada de mi carrera. No creo que ella lo hiciera mal, sino que yo fui m¨¢s agresiva. Siempre necesitas suerte, pero yo puse todo de mi parte¡±, concluy¨® la ganadora, protagonista de un desenlace hist¨®rico.