El Legan¨¦s corta la racha del Rayo

Es muy pronto para hablar de finales, pero tal como est¨¢ la Liga y c¨®mo est¨¢n Rayo y Legan¨¦s, lo de este lunes fue lo m¨¢s parecido a una final por la permanencia. La gan¨® el Legan¨¦s, que sobrevivi¨® a media hora con un jugador menos y a unos ¨²ltimos diez minutos de locura total. El Rayo ve cortada su racha de cinco partidos sin perder y vuelve a caer a zona de descenso tras un duelo extra?o en el que nunca se encontr¨® a gusto, ni cuando se vio acorralado en la primera parte ni cuando intent¨® acorralar. Sonr¨ªe el Legan¨¦s, que obtiene camiones de ox¨ªgeno.

Desde el principio el Legan¨¦s entr¨® mejor en el partido. Braithwaite era molesto tanto con el bal¨®n como sin ¨¦l porque presionaba cualquier sombra franjirroja y enfilaba la porter¨ªa en cuanto controlaba el cuero. Nada m¨¢s empezar el delantero dan¨¦s se la hizo a Ba y este tuvo que derribarlo al borde del ¨¢rea. Un minuto de juego y ya una tarjeta para los locales.

El Rayo quer¨ªa jugar desde atr¨¢s, no regalar balones, pero la presi¨®n del Lega era un muro sin fisuras. Tras un mal pase, el bal¨®n le qued¨® a Recio para que chutase y exigiese una buena intervenci¨®n de Dimitrievski. Solo cuando el cuadro pepinero relaj¨® un poco la intensidad el Rayo empez¨® a operar en campo contrario. Una buena acci¨®n por la izquierda de ?lex Moreno hizo pensar que el campo se hab¨ªa inclinado hacia la meta de Cu¨¦llar. Un espejismo, porque Braithwaite remat¨® al palo en una falta lateral y volvi¨® a amedrentar al Rayo.

La ocasi¨®n fue un aviso, y el que avisa no es traidor. El Legan¨¦s volvi¨® a activar la presi¨®n y el Rayo se ahog¨®. Tampoco le hizo falta al equipo de Pellegrino un ejercicio ofensivo tremendo, le bast¨® con apretar y forzar algunos c¨®rners, y en uno de ellos lleg¨® el gol. Braithwaite, que estaba en todas, remat¨® en el punto de penalti con cierta comodidad, hasta tuvo que agachar un poco la cabeza para contactar con el bal¨®n y mandarlo a la red de Dimitrievski.

En el descanso M¨ªchel desmont¨® la defensa de tres centrales que tanto hab¨ªa dado al Rayo en las ¨²ltimas semanas. Entr¨® otro delantero, el debutante Franco di Santo, y se march¨® Ba. Con ese planteamiento m¨¢s ofensivo, el equipo vallecano se estir¨® y el partido se afinc¨® en la mitad de campo del Legan¨¦s. Aun as¨ª, la producci¨®n no era suficiente: apenas un cabezazo de Ra¨²l de Tom¨¢s y un disparo lejano de Imbula que se marcharon fuera.

El Rayo estaba volcado, con los dos laterales, Adv¨ªncula y Moreno, ejerciendo de extremos, pero el Lega no sufr¨ªa. Se sent¨ªa c¨®modo el equipo de Pellegrino bien pertrechado atr¨¢s porque nadie sospechaba que a Nyom le iba a sufrir enajenaci¨®n mental transitoria e iba a patear a Embarba cuando el juego estaba parado. Roja y se abr¨ªa un panorama nuevo en Vallecas.

Con uno m¨¢s al Rayo le cost¨® tocar a rebato, lo hizo cuando quedaban 15 minutos y los puntos estaban cogiendo el Cercan¨ªas rumbo a Legan¨¦s. En los ¨²ltimos diez minutos se precipitaron los acontecimientos. Primero Cu¨¦llar sac¨® una mano incre¨ªble a un cabezazo de De Tom¨¢s. Un minutos despu¨¦s el portero pepinero repiti¨® milagro a disparo de Pozo, pero el rechace le cay¨® a ?lvaro para que empatase a placer, ya era demasiado. Con el partido igualado, los pepineros prepararon las barricadas para intentar salvar un punto, pero el bot¨ªn fue mucho m¨¢s jugoso. Solo un minuto despu¨¦s del tanto del empate, un c¨®rner lanzado por ?scar fue cabeceado por En-Nesyri, y el bal¨®n, aparentemente manso, pas¨® entre muchas piernas hasta colarse en la porter¨ªa rayista. Despu¨¦s de ese golpe, el Rayo no tuvo ¨¢nimo ni f¨²tbol para levantarse. El Legan¨¦s, en dos c¨®rners, se llev¨® la final de Vallecas.