El modelo noruego para el mediofondo espa?ol
De Arriba, Garc¨ªa y Guerrero, tres espa?oles se clasifican para la final de 800m mientras Jakob Ingebrigtsen aumenta su leyenda
Jakob Ingebrigtsen y el 800m espa?ol triunfan en Glasgow. El noruego, de 18 a?os, el gran favorito para la final de 1.500m, logr¨® el primer oro de su vida en los 3.000m (7m 66,15s, y su hermano mayor, Henrik, fue tercero), la distancia para la que parece haber nacido. De Arriba, brillante, paciente como un francotirador y cl¨ªnicamente eficaz, pas¨® a la final de 800m junto al murciano Mariano Garc¨ªa, cuyo mito se agranda con cada competici¨®n que disputa, con cada aceler¨®n que arrea a su ya famosa moto imaginaria. Esther Guerrero corri¨® a lo Rudisha, como un metr¨®nomo en cabeza de su semifinal, y pas¨® tambi¨¦n a la final de 800m.
La distancia est¨¢ en ebullici¨®n en Espa?a. Por pura coincidencia quiz¨¢s, en una charla de sabios del atletismo y el rendimiento en Madrid, se traz¨® parte del destino de ambos, de De Arriba y del Ingebrigtsen menor, el llamado Mozart del atletismo.
¡°Lo que nos suele pasar en Espa?a es que en el proceso de evoluci¨®n de los atletas sobreviven en edad juvenil no los m¨¢s aptos, los que tienen m¨¢s cualidades o talento, sino los que ganan, que suelen ser m¨¢s bajos y m¨¢s fuertes con mayor edad som¨¢tica que la que marca su fecha de nacimiento, y tambi¨¦n son los que tienen un recorrido m¨¢s corto¡ Queremos lo contrario, que sobrevivan los mejores¡±. Mateu Ca?ellas, responsable de desarrollo de talentos de la federaci¨®n espa?ola suelta la parrafada. Despu¨¦s, toma ox¨ªgeno y contin¨²a. ¡°Y aqu¨ª estamos, aunque nos duela, los espa?oles que nos hemos cre¨ªdo los maestros del medio fondo pidi¨¦ndole ayuda a un noruego. ?Qu¨¦ hay que hacer?¡±
Al otro lado de la mesa le escucha atento Leif Inge Tjelta, el fisi¨®logo noruego que conoce como nadie el funcionamiento del organismo de los tres hermanos Ingebrigtsen, la familia fen¨®meno, y, sobre todo, el de su gran talento, el precoc¨ªsimo Jakob, a quien ya someti¨® a diversos tests de rendimiento cuando ten¨ªa 11 a?os. ¡°Ya le med¨ª entonces un VO2max [capacidad del cuerpo para consumir ox¨ªgeno: prueba de la capacidad f¨ªsica] exagerado, como el de un joven de 16 o 17 a?os¡±, le cuenta Tjelta, que trabaja en la Universidad de Stavanger, donde el equipo de f¨²tbol Viking y el ciclista Alexander Kristoff. Y donde los Ingebrigtsen, a los que les han salido los dientes dando vueltas al lago Mosvatnet, y su per¨ªmetro de 3.000 metros exactos. ¡°A los 14 a?os, Jakob ya hac¨ªa el recorrido en menos de 8m 30s. Ha sido m¨¢s precoz y tiene m¨¢s talento que sus hermanos mayores, Henrik y Filip¡±.
¡°Claro, con tan buenos genes es f¨¢cil ser bueno¡±, le responde Ca?ellas. ¡°Pero tiene que haber algo m¨¢s¡±.
¡°Los genes le dan el VO2max, s¨ª, y tambi¨¦n su extraordinaria econom¨ªa de carrera, su eficiencia: la mayor parte de su energ¨ªa se traduce en movimiento¡±, dice Tjelta. ¡°El algo m¨¢s es el entrenamiento sistem¨¢tico que sigue desde los ocho a?os. Ha corrido lo mismo que un ni?o keniano que va a pie al colegio. ?l se levantaba a las seis para hacer esqu¨ª sobre ruedines en el parking de un hipermercado vecino. Su padre ensay¨® m¨¦todos con los hermanos mayores, y con el peque?o evit¨® todos los errores, afin¨® su m¨¦todo al m¨¢ximo. Y tambi¨¦n trabajan en altura. Y el m¨¦todo no es nuevo. Entrenan como se entrenaba siempre en Escandinavia: mucho volumen a una intensidad no muy elevada, y, como hac¨ªa ya Zatopek en los a?os 50, introduciendo intervalos de intensidad un par de d¨ªas a la semana. Esa es la clave: alto volumen, baja intensidad e intervalos de 10 miles o as¨ª¡±.
A la conversaci¨®n tambi¨¦n asiste Josu G¨®mez, un joven que quiere saberlo todo de fisiolog¨ªa y que para ello ha recorrido medio mundo, Australia, Sur¨¢frica, Polonia, Qatar, con la mochila vac¨ªa al hombro. ¡°Hace un par de d¨¦cadas el trabajo de los fisi¨®logos estaba muy integrado en el atletismo, pero como reacci¨®n a varios asuntos de dopaje, todos salieron y el atletismo se qued¨® en una relaci¨®n casi cerrada entrenador-atleta¡±, dice G¨®mez. ¡°Hubo un poco de chapuza y por reacci¨®n se cerr¨® el paso a la ciencia. Todo es muy emp¨ªrico ahora, y los j¨®venes nos hemos ofrecido para ayudar a una preparaci¨®n m¨¢s cient¨ªfica, similar a la que se hace fuera¡±.
La primera experiencia personal de G¨®mez es su trabajo con De Arriba, un atleta muy curioso por todo aquello que pueda ayudar al rendimiento pero que trabaja con su entrenador, Juan Carlos Fuentes, de una forma muy intuitiva. ¡°Ha subido a altura a Sierra Nevada en noviembre y a Navacerrada hace unas semanas¡±, dice. ¡°Lo ha hecho sin un plan muy claro, pero conmigo empezar¨¢ a sistematizar todo m¨¢s. Ya le he prestado mi c¨¢mara hip¨®xica para que duerma en altitud y alargue los beneficios de las concentraciones en altura¡¡±
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