La ca¨ªda de M¨¢rquez, el fabuloso triunfo de Rins en Austin

Su estilo es ¨²nico. Fino en las l¨ªneas, erguido sobre la moto, bueno en las frenadas, listo, fr¨ªo, elegante como ning¨²n otro piloto en MotoGP, Alex Rins huy¨® de las modas al llegar a la categor¨ªa reina y se empe?¨® en defender su manera de correr. Nada de descolgarse m¨¢s de la cuenta, nada de andar derrapando por los rincones. ?l ten¨ªa otras formas y quer¨ªa demostrar que eran igual de v¨¢lidas.

Lo hizo este domingo en Austin, donde se impuso en una carrera magn¨ªfica y sorprendente. Donde le gan¨® al m¨¢s grande piloto de todos los tiempos, un Valentino Rossi que, con 40 a?os, todav¨ªa no se ha bajado del podio este curso. Un tipo insaciable que sigue peleando por todo. Al mito, a su ¨ªdolo de juventud ¨Ctiene 23 a?os el espa?ol¨C le venci¨® el chico de los rizos alocados en la zona m¨¢s t¨¦cnica del trazado texano: en esa sucesi¨®n de curvas enlazadas, de la tres a la seis, tan compleja y tan bella a la vez. Faltaban tres giros para el final y donde el 46 fall¨® a la entrada de una curva al 42 no se le movi¨® un pelo. Sigui¨® dibujando su l¨ªnea perfecta hasta cruzar por ¨²ltima vez la meta con cuatro d¨¦cimas de ventaja.

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Pocas motos de la parrilla le hubieran sentado tan bien a Rins como esta Suzuki con la que han crecido tanto el piloto como la marca. Hoy, la moto de la casa de Hamamatsu, de las m¨¢s humildes del paddock, tiene poco que envidiar a los monstruos del campeonato. Probablemente no pueda medirse todav¨ªa a las Honda o las Ducati en cuanto a potencia se refiere, pero el craso error cometido por Marc M¨¢rquez cuando rodaba en cabeza, tratando de marcar territorio ¨Cde abrir distancia en los primeros giros como hizo dos semanas atr¨¢s en Argentina¨C, le emparent¨® con una Yamaha en las interminables curvas del Circuito de las Am¨¦ricas. No pod¨ªa tener mejor escenario el piloto de Barcelona para culminar por fin un inicio de a?o fant¨¢stico (un cuarto y un quinto puestos en dos carreras) con una victoria. La primera victoria de su corta historia en MotoGP.

El circuito, adem¨¢s, le gustaba. Siempre le gust¨®. No en vano ya gan¨® en suelo texano en las categor¨ªas inferiores, tanto en Moto3 como en Moto2. Hasta este a?o, sin embargo, los triunfos en la pista texana los ten¨ªa reservados M¨¢rquez en la categor¨ªa reina. Seis de seis, de 2013 a 2018. Y pleno tambi¨¦n de pole position. Pero ya hab¨ªa advertido el campe¨®n del mundo este s¨¢bado que algo fallaba. No se sinti¨® tan c¨®modo este a?o en su ataque por el primer puesto de la parrilla. El Circuito de las Am¨¦ricas tiene much¨ªsimas curvas, 20, y la mayor¨ªa son lentas, demasiado lentas para esta Honda. Donde antes M¨¢rquez pod¨ªa sacar ventaja, ahora sufre un poco m¨¢s. Es la contrapartida por tener una moto m¨¢s equilibrada, m¨¢s potente. Y ah¨ª fall¨®, en una de esas curvas cr¨ªticas, la 12, un ¨¢pice pronunciad¨ªsimo al que se accede despu¨¦s de alcanzar los 340 km/h en la contrarecta. Enorme la frenada, grande el riesgo. Y el piloto m¨¢s salvaje termin¨® por perder el control de su neum¨¢tico delantero. Se desliz¨® por el asfalto agarrado a su moto, pero nada pudo evitar el desastre. Ni siquiera pudo volver a encender la Honda. Su carrera termin¨® y su dominio en Austin tambi¨¦n.

Su error dej¨® a Rossi en primer lugar. Algo m¨¢s cauto, menos veloz que M¨¢rquez, que ya le sacaba casi cuatro segundos, el italiano se relami¨® al pensar que volver¨ªa a ganar, algo que no hace desde la carrera de Assen del 2017. Pero ah¨ª estaba Rins para imped¨ªrselo. S¨¦ptimo esta vez en parrilla (su mejor clasificaci¨®n en el presente curso), bord¨® la primera vuelta, gan¨® dos posiciones y fue escalando poco a poco, como hab¨ªa hecho ya en Qatar y en Argentina. Entonces se qued¨® a las puertas del podio. Este domingo nadie, ni siquiera el gran Rossi, pudo frenarle: llegados al ecuador de la prueba ya era segundo a escasas d¨¦cimas del 46. Le sigui¨®, le estudi¨®, y le dio el mazazo cuando crey¨® m¨¢s oportuno.

Al tercer escal¨®n del podio, por cierto, se subi¨® un genial Miller, cada d¨ªa m¨¢s consistente.

La mala suerte, por otro lado, se ceb¨® de nuevo con otros dos espa?oles: Vi?ales, que se movi¨® ligeramente en la salida y fue penalizado con un paso por boxes (al igual que Mir, aunque al catal¨¢n le pesaron los nervios e hizo, sin necesidad, una vuelta r¨¢pida adem¨¢s del castigo estipulado, conocido como drive trough); y Lorenzo, a quien le fall¨® la Honda, igual que el d¨ªa anterior. La moto lo dej¨® tirado en la curva 12, el mismo punto en que sucumbi¨® M¨¢rquez en una jornada negra para la f¨¢brica alada, la m¨¢s poderosa del paddock, en el punto de mira ahora por tres fallos mec¨¢nicos en dos semanas ¨Ca M¨¢rquez se le sali¨® la cadena en Argentina, tambi¨¦n a Lorenzo en Austin, que este domingo volvi¨® a tener problemas t¨¦cnicos¨C a los que parece no haber encontrado respuesta todav¨ªa. Mientras tanto, el Mundial llega a Europa en tres semanas con la clasificaci¨®n en un pu?o, con Dovizioso (cuarto) como l¨ªder y con cuatro pilotos separados por solo nueve puntos. Cuando parec¨ªa que el campeonato iba a ser un paseo para M¨¢rquez, el motociclismo tira de t¨®pico: esto son carreras.