M¨¢rquez marca el tempo y gana tambi¨¦n en Le Mans

Marc M¨¢rquez volvi¨® a ganar. Y culmin¨® un fin de semana en que se apunt¨® la pole y la victoria. El campe¨®n mantiene el liderato y saca pecho: es el hombre a batir.

Es ¨¦l quien impone el ritmo. Quien marca los tiempos. Los c¨®mo y los porqu¨¦s de la carrera. Sabe cu¨¢ndo pelearse, cu¨¢ndo defender una posici¨®n. Tambi¨¦n, cu¨¢ndo concentrarse en calcar una vuelta tras otra. Cu¨¢ndo aflojar para conservar los neum¨¢ticos y el tipo. M¨¢rquez bord¨® el plan establecido en Le Mans. Siempre corri¨® para ganar. Pero ya no compite como aquel piloto que prefer¨ªa esperar a las ¨²ltimas vueltas para lanzar su ataque, ese al que se le escapaba la sonrisa pilla con las batallas cuerpo a cuerpo, la salsa de las carreras para el 93. Su estrategia ha cambiado. Probablemente porque al calzar la goma m¨¢s blanda delante, algo que nunca suele a hacer, sab¨ªa que ten¨ªa que ser ¨¦l quien rodara en cabeza, para evitar sobrecalentar el neum¨¢tico. Seguramente, tambi¨¦n, porque la Honda se lo permite: m¨¢s estable, m¨¢s consistente, muy potente. Un caballo salvaje que, bien domado, se ha convertido en una apuesta segura en cualquier hip¨®dromo.

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M¨¢rquez: dos ca¨ªdas y una ¡®pole position¡¯ en un mismo s¨¢bado

Y nadie lo doma como M¨¢rquez.

As¨ª que se impone salir al galope desde la primera vuelta. Esta vez sal¨ªa desde la pole position y no fue dif¨ªcil. Se las vio con Petrucci en las primeras curvas, pero sali¨® vencedor. Se impone tratar de colocarse en cabeza. Y eso hizo. A pesar del empuje de un fant¨¢stico Miller, que se le col¨® tras cinco giros y con quien inici¨® un bello cara a cara a la s¨¦ptima vuelta: M¨¢rquez lo busc¨® en la primera chicane de Le Mans, Miller le devolvi¨® el adelantamiento, y lo hizo tambi¨¦n el espa?ol unas curvas m¨¢s tarde. Defendido el primer puesto, toca apretar los dientes y apretar las tuercas a los rivales cuando se acerca el ecuador de la prueba. Y, de nuevo, bord¨® el plan. Baj¨® sus cronos y empez¨® a marcar vueltas en menos de 1m,33s. Fij¨® la vuelta r¨¢pida de la carrera (1m,32¡¯3s) al d¨¦cimo giro, empalm¨® otros tres giros id¨¦nticos, en 1m,34¡¯4s y cuando se hab¨ªa cubierto la mitad de la carrera ya sacaba dos segundos al australiano, que perder¨ªa fuelle poco a poco y acusar¨ªa el desgaste ante el genial rendimiento de las otras dos Ducati, las oficiales, que acompa?ar¨ªan a M¨¢rquez en el podio.

La del espa?ol fue una victoria que se trabaj¨® poco a poco, d¨¦cima a d¨¦cima, curva a curva. La pista fr¨ªa, el cielo gris, un gris Le Mans que amenaza siempre con un chaparr¨®n inesperado que esta vez, por suerte, no lleg¨®. Cuando comprob¨® que su ventaja superaba con creces los tres segundos, afloj¨® ligeramente. No hab¨ªa necesidad de arriesgar en semejantes condiciones. No ten¨ªa nada que demostrar que no hubiera demostrado ya en Jerez, dos semanas antes. Y cruz¨® la meta haciendo un caballito, la rueda delantera en el aire. Y la alegr¨ªa inmensa. Ya es un poco m¨¢s l¨ªder. No solo por los ocho puntitos que hoy le separan con Dovizioso, segundo en carrera y en la clasificaci¨®n. Tambi¨¦n por c¨®mo compite y por c¨®mo gana. En cualquier condici¨®n y cualquier escenario. Importa poco que la pista tenga m¨¢s curvas lentas de las deseadas para la Honda, que aplauda a las motos con buen paso por curva o exija m¨¢quinas ¨¢giles en cambios de direcci¨®n tan exigentes como los de las dos chicane de Le Mans. No era la pista perfecta ni para M¨¢rquez, ni para la RC213V. Pero gan¨® igualmente.

Tras ¨¦l, tres Ducati, se?al m¨¢s que evidente de que la moto italiana es una de las m¨¢s completas de la parrilla, despojada de sus complejos tras un rendimiento magn¨ªfico en un circuito corto y estrecho, que adem¨¢s de frenadas y fuertes aceleraciones (ah¨ª lleva a?os triunfando la Desmosedici) presenta curvas largas que deben hacerse a muy baja velocidad, y ah¨ª llevaba muchos a?os sufriendo. Se impuso Dovizioso a Petrucci (y ambos a Miller) en un final de carrera fant¨¢stico en que el reci¨¦n llegado al equipo de Borgo Panigale trat¨® de poner en aprietos al experimentado Dovi. No funcion¨®. Pero poco le importa a Petrucci, cansado como estaba de terminar sexto (posici¨®n en que acab¨® todas las carreras, salvo Jerez, donde fue quinto), por fin se subi¨® al podio.

Y lo hizo inmediatamente despu¨¦s del rival que m¨¢s le ha ayudado en los ¨²ltimos tiempos: italianos ambos, el nueve se mud¨® a Forli, donde vive su compa?ero de equipo, con quien ahora se entrena y comparte los d¨ªas, las preocupaciones y las alegr¨ªas. ¡°Este resultado es tambi¨¦n para ¨¦l, que me ha ayudado mucho. Lo di todo, pero tambi¨¦n s¨¦ que ¨¦l se est¨¢ jugando el t¨ªtulo y yo peleo por el quinto puesto. No quer¨ªa arruinarnos el podio¡±, confes¨® despu¨¦s.

Rossi, el hombre que siempre est¨¢ ah¨ª, acab¨® quinto un gran premio en que tuvo m¨¢s dificultades de las esperadas. Y sigue en la pelea, regular como es cada domingo. No as¨ª su compa?ero de equipo, Vi?ales, que tuvo muy mala suerte esta vez: se fue al suelo por un error de Bagnaia y no pudo culminar la remontada so?ada. Como tampoco hizo Rins, 19? en parrilla, 10 en carrera. Y menos Lorenzo, que termin¨® 11?. La ovaci¨®n, esta vez, se la gan¨® Pol Espargar¨®, trabajador y consistente todo el fin de semana para llevar a la KTM, la moto m¨¢s compleja y dif¨ªcil de la parrilla ahora mismo, al sexto lugar. Y a escasos seis segundos de M¨¢rquez.

Alex M¨¢rquez: primera victoria espa?ola en Moto2 a?o y medio despu¨¦s

La alegr¨ªa fue total este domingo en casa de los M¨¢rquez Alent¨¤. Al hermano mayor se le vio correr para felicitar al peque?o a su llegada al corralito unos minutos antes de enfundarse el mono para tratar, ¨¦l tambi¨¦n, de completar la fiesta con otra victoria. El triunfo de ?lex M¨¢rquez fue especial, no solo porque sus victorias sean menos habituales que las del primog¨¦nito de la familia ¨Cmagn¨ªfico este domingo desde el inicio: ¡°Este a?o he aprendido a ir r¨¢pido solo, algo que antes no sab¨ªa hacer¡±, dijo al terminar¨C, sino porque hac¨ªa tanto que el trabajo no se ve¨ªa recompensado con resultados que todos en Cervera sab¨ªan lo feliz que esa carrera en Le Mans hac¨ªa al peque?o de la casa. Fue especial, tambi¨¦n, porque Espa?a llevaba a?o y medio sin vibrar con un triunfo de un piloto espa?ol en Moto2. El mismo a?o y medio que llevaba M¨¢rquez sin subir a lo m¨¢s alto del podio, pues suya fue aquella victoria, en Jap¨®n 2017.

Y al final, el triunfo sucedi¨® donde menos se lo esperaba. En un circuito no le era especialmente amigo, pero donde se encontr¨® c¨®modo desde que se subi¨® a la moto el viernes. "Hoy he cre¨ªdo en m¨ª mismo, la ¨²nica diferencia con otros circuitos ha sido que he disfrutado mucho encima de la moto; iba al l¨ªmite pero me lo estaba pasando muy bien, no luchaba contra la moto y esa es la diferencia respecto al a?o pasado, por eso creo que tenemos una base sobre todo desde Jerez muy buena", dijo el piloto del equipo Estrella Galicia. Este domingo se quit¨®, a lo grande, el mal sabor de boca que se le qued¨® en Jerez, donde empez¨® condenado la carrera al salir desde el pit lane tras verse involucrado en una ca¨ªda m¨²ltiple que ocasion¨® Gardner. Esta vez, todo fue distinto. Y mucho m¨¢s fluido. Pr¨¢cticamente lider¨® la carrera de inicio a fin, m¨¢xima concentraci¨®n, constancia y l¨ªneas delicadas. Y adem¨¢s lo celebr¨® en el podio con otros dos espa?oles: Jorge Navarro y Augusto Fern¨¢ndez. Es la primera vez que los espa?oles copan el podio en Moto2.