El Celta entrega su proyecto futbol¨ªstico a Fran Escrib¨¢

El Celta y Fran Escrib¨¢ han vinculado sus caminos por las pr¨®ximas dos temporadas. Al menos eso es lo que han firmado. El acuerdo con el t¨¦cnico valenciano pretende darle estabilidad a un banquillo por el que han pasado quince entrenadores en trece temporadas. En la ¨²ltima empez¨® el argentino Antonio Mohamed, prosigui¨® el luso Miguel Cardoso y a doce jornadas del final se incorpor¨® Escrib¨¢, que llevaba temporada y media sin equipo desde su despido en Villarreal.

Escrib¨¢ reactiv¨® al Celta. Aunque siempre quedar¨¢ la razonable duda de s¨ª quien de verdad lo hizo fue Iago Aspas, que regres¨® de su lesi¨®n casi al tiempo que el t¨¦cnico valenciano arrib¨® a Vigo. Escrib¨¢ lleg¨® con el equipo decimos¨¦ptimo, dos puntos sobre el descenso y lleg¨® al final del campeonato en la misma posici¨®n, cuatro puntos sobre la l¨ªnea roja que marc¨® el Girona. En ese tiempo el Celta gan¨® cuatro partidos, empat¨® otros tantos y tambi¨¦n perdi¨® el mismo n¨²mero.

En ese estado de ni fr¨ªo ni calor se suscit¨® en el club celeste la duda respecto a qu¨¦ decisi¨®n tomar. Pes¨® la idea de darle continuidad al equipo y m¨¢s tras una serie de experiencias nada satisfactorias con entrenadores que no conoc¨ªan la liga espa?ola. Escrib¨¢ atesora un curr¨ªculum con m¨¢s de 200 partidos en el f¨²tbol profesional como primer entrenador y un bagaje anterior de siete a?os como auxiliar de Quique S¨¢nchez Flores en Getafe, Valencia, Benfica o Atl¨¦tico. En el Celta ha integrado su equipo de trabajo, en el que figura como segundo un exjugador como David Generelo, a otros t¨¦cnicos del club que no hace mucho que colgaron las botas como son Borja Oubi?a o Mario Bermejo.

A Escrib¨¢ le gusta una idea de f¨²tbol combinativa y en el Celta valoran esa idea porque quieren retomar el estilo que no hace tanto le llev¨® a Europa. Lo demanda adem¨¢s Iago Aspas, que le ha pedido al club dar un paso m¨¢s. Escrib¨¢ fue un ni?o prodigio del f¨²tbol, una joya que se pul¨ªa en la cantera del Valencia y no logr¨® dar el salto al primer equipo. Se diluy¨® en equipos de Segunda B y Tercera antes de pasar a los banquillos donde su progresi¨®n no fue explosiva, tanto que por si acaso estudi¨® y se sac¨® una oposici¨®n de administrativo. Pero desde hace a?os ya solo piensa en f¨²tbol e incluso se ha permitido desechar alguna opci¨®n antes de atender la llamada del Celta. Asegura que el pasado verano le llegaron m¨¢s propuestas de trabajo que nunca, pero no se anim¨® con ninguna hasta que a primeros de marzo se mud¨® a Galicia. ¡°El proyecto bueno est¨¢ por llegar y cuando lo tenga delante sabr¨¦ que es ese¡±, dec¨ªa. Ah¨ª est¨¢, en Vigo, con dos a?os por delante para extraer rendimiento a un equipo con muchas m¨¢s posibilidades que las que mostr¨® en la ¨²ltima campa?a. Se sienta, eso s¨ª, en un banquillo caliente.