Virginia Torrecilla, los pulmones de la Roja
La mediocentro, pilar b¨¢sico en tareas defensivas, se ha fortalecido en lo f¨ªsico en Francia, donde lo pas¨® muy mal por la dureza de los entrenamientos
¡°Para de existir y comienza a vivir¡±. Son las dos frases que Virginia Torrecilla, mediocentro de la selecci¨®n, tiene tatuadas en los muslos. En letra negra y muy peque?ita. Nacida hace 24 a?os en Cala Millor (Mallorca), Vir, como la llaman sus compa?eras, ser¨¢ la encargada este mi¨¦rcoles de hacer menos dura la batalla que Alemania librar¨¢ en la medular. No entraba en las quinielas para ser titular en este Mundial, pero jug¨® de inicio contra Sud¨¢frica y lo har¨¢ hoy tambi¨¦n en el segundo encuentro de la fase de grupos. Vi¨¦ndola entrenar en las ¨²ltimas semanas, no sorprende que Jorge Vilda haya apostado por ella. Est¨¢ en un estado de forma excepcional. ¡°No tengo el tute que han tenido otras compa?eras del Atl¨¦tico o del Barcelona [que han disputado la final de la Copa y de la Champions]. He jugado 7-8 partidos menos y eso se nota¡±, cuenta.
Adem¨¢s, viene de terminar la temporada en el Montpellier, adonde lleg¨® en 2015. En Francia, como asegur¨® la central del PSG y segunda capitana de la selecci¨®n Irene Paredes, se juega y se entrena a otro ritmo. En los entrenamientos prima mucho m¨¢s el f¨ªsico y la velocidad. ¡°Recuerdo cuando lleg¨® Irene a Par¨ªs el primer a?o, me llamaba y me dec¨ªa: ¡®Virginia, las chicas aqu¨ª tiran m¨¢s fuerte con la cabeza que yo con la izquierda¡¯. Y es tal cual, yo tambi¨¦n lo not¨¦ cuando llegu¨¦: hay una diferencia de fuerza incre¨ªble. Aqu¨ª llevan muchos a?os trabajando el gimnasio, la velocidad, la fuerza y eso se nota mucho¡±, cuenta sentada enfrente del campo de entrenamiento del Stade Jean Jeaques en Villenueve-d¡¯Ascq d¨®nde Espa?a ha fijado su cuartel general estos tres d¨ªas para preparar el duelo contra Alemania
¡°Yo en el Montpellier lo pas¨¦ bastante mal el primer a?o para coger el ritmo del equipo. Hac¨ªa horas extras en el gimnasio despu¨¦s de cada entrenamiento. Estuve bastantes meses mal. Me cost¨®¡±, confiesa. ¡°Soy una futbolista diferente ahora. He ganado much¨ªsimo f¨ªsicamente. El otro d¨ªa vi una foto m¨ªa en el Bar?a de hace seis a?os y mis brazos y mis piernas no tienen nada que ver, es como si fuese otra Virginia, o dos Virginias en la misma foto¡±, a?ade.
Pulmones, eso s¨ª, dice seguir teniendo dos. ¡°Ojal¨¢ pudiesen ser cinco¡±, bromea. Y m¨¢s pensando en el duelo de esta tarde. ¡°Va a ser un partido muy f¨ªsico. Va a haber un machaque de intensidad nada m¨¢s empezar; hay que tener el bal¨®n y no permitirle a Alemania que haga su juego a la contra¡±, analiza. Contra ese machaque de intensidad quiere Vilda que luche Torrecilla. En el primer partido contra Sud¨¢frica fue el ¨²nico pivote; por delante de ella ten¨ªan libertad Alexia Putellas y Vicky Losada. Hoy, casi seguramente la acompa?ar¨¢ Silvia Meseguer, para que el dique de contenci¨®n sea m¨¢s s¨®lido y a la vez no pierda calidad en la salida de bal¨®n.
¡°Virginia es una mediocentro con mucha presencia, tiene mucha calidad en la salida de bal¨®n, tiene muy buen desplazamiento en largo, buenos pases medios y cortos, y eso hace de ella un 6 que no es f¨¢cil de encontrar. Defensivamente es muy buena, va bien de cabeza porque es alta, est¨¢ siempre en buena posici¨®n y a la vez sabe sacar el bal¨®n. Para una selecci¨®n como Espa?a es fundamental. Tiene mucha calidad y lo que la hace diferente es ese desplazamiento en largo que en f¨²tbol femenino es bastante dif¨ªcil todav¨ªa de encontrar¡±, la define Vero Boquete que fue su compa?era en la selecci¨®n durante a?os, incluido el Mundial de Canad¨¢.
En las ¨²ltimas temporadas es cuando Torrecilla se ha convertido en una mediocentro m¨¢s defensiva; centrocampista lo hab¨ªa sido siempre, pero nunca se hab¨ªa caracterizado por defender. ¡°Cuando era m¨¢s peque?a era m¨¢s mediocentro total, jugaba en m¨¢s posiciones. En la sub-17 y en la sub-19 cuando hab¨ªa que remontar los partidos la met¨ªan arriba porque por su estatura [mide 1,74] siempre terminaba tocando alg¨²n bal¨®n. En los ¨²ltimos a?os es m¨¢s 6 y hay pocos 6 que aportan lo que ella con el bal¨®n¡±, insiste Boquete.
El Montpellier y la Liga francesa han sido, en ese sentido, una gran escuela. ¡°En Francia he tenido que trabajar much¨ªsimo ese aspecto porque aqu¨ª defensivamente tienes que apretar mucho para llegar luego a porter¨ªa. Me han exigido mucho aqu¨ª en ese sentido y es algo que ahora tengo¡±, cuenta Torrecilla. Ese algo lo aprecia especialmente Vilda. ¡°Lo que me pide el m¨ªster es trabajo, sacrificio y dejarlo todo en el campo. ?l prefiere una jugadora que pueda rendir durante 60 minutos y luego hacer un cambio que jugar 90 y no dar el cien por cien¡±, desvela.
Torrecilla es de las pocas jugadoras que estos d¨ªas no se ha visto afectada por la energ¨ªa de las j¨®venes ¡ªNahikari, Luc¨ªa Garc¨ªa, Aitana Bonmat¨ª, la generaci¨®n del 98¡ª que vienen empujando fuerte ya no s¨®lo como revulsivos sino para hacerse un hueco en el once. A¨²n as¨ª el pique est¨¢ ah¨ª. El lunes, durante la rueda de prensa despu¨¦s del entrenamiento, le preguntaron a Patri Guijarro por esas nuevas generaciones. La centrocampista, mejor jugadora del Mundial sub-20 del a?o pasado, contest¨® que hab¨ªan tenido un buen aprendizaje en las inferiores y ahora hab¨ªan cogido el ritmo de la absoluta y que esperaban aportad la ilusi¨®n de la juventud. ¡°?A ver si te crees que soy mayor...!¡±, le solt¨® Torrecilla sentada a su lado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.