Koepka a¨²n aspira a un r¨¦cord de hace 114 a?os
El estadounidense, a cuatro golpes del l¨ªder, Woodland (-11), busca su tercer US Open seguido. Rahm sigue arriba con -4
Tres birdies, ni un bogey. Tarjeta limpia de fallos. 68 golpes en la jornada que permiten a Brooks Koepka seguir optando este domingo a un r¨¦cord de otra ¨¦poca. Ganar su tercer US Open seguido e igualar el r¨¦cord del escoc¨¦s Willie Anderson, que enlaz¨® la triple corona hace una eternidad, en 1903, 1904 y 1905. Koepka va de menos a m¨¢s. No ha mostrado esa versi¨®n demoledora del pasado Campeonato de la PGA, cuando gan¨® su cuarto grande con una superioridad tal, sobre todo en los dos primeros d¨ªas, que hizo recordar la antigua tiran¨ªa de Tiger Woods. Es un Koepka m¨¢s humano, y sin embargo tiene la presa a tiro. Con -7, est¨¢ a cuatro golpes del l¨ªder, Gary Woodland (-11, soportando la presi¨®n de los pesos pesados) y a uno de Justin Rose (-10), que ofrecieron un mano a mano de a¨²pa. McIlroy est¨¢ en el siguiente escal¨®n con -6.
Fue un d¨ªa de banderas dif¨ªciles y greens m¨¢s duros, una jornada en la que costaba ganarse una buena opci¨®n de birdie. Cada golpe ara?ado al campo estaba caro, y ante la necesidad de atacar, las tarjetas se llenaron de curvas. Jon Rahm vivi¨® otra de esas jornadas de supervivencia en las que se aferra como un jabato al campo cuando las circunstancias no son las mejores. Como con ese birdie en el 3 con un putt muy firme despu¨¦s de un bogey en el segundo hoyo, o el par que salv¨® en el cuatro despu¨¦s de mandar su bola fuera de calle en la salida; embocando desde el rough en el ocho con un toque de talento; y sobre todo con los birdies en el 14 y el 15 cuando hab¨ªa perdido el paso con tres bogeys en el 10, 11 y 13. Con esa recuperaci¨®n volvi¨® a bajar del par del campo por tercer d¨ªa seguido (-1) y con -4 est¨¢ entre la nobleza, a siete golpes del l¨ªder Woodland.
De la cabeza se ha descolgado Sergio Garc¨ªa (+4 en el d¨ªa, +1 en la general). El Ni?o volvi¨® a su versi¨®n m¨¢s err¨¢tica. Cinco bogeys en los nueve primeros hoyos hablan de una desconexi¨®n como las que hab¨ªa sufrido anteriormente en los grandes. Despu¨¦s de dos rondas muy positivas el jueves y el viernes, el castellonense mostr¨® otra vez el juego fr¨¢gil que en las citas mayores le ha penalizado desde que vistiera hace dos a?os la chaqueta verde.
Tiger se qued¨® en el par en el d¨ªa y est¨¢ en el par en el total. El Tigre se dej¨® est¨¦ s¨¢bado algunas buenas opciones por el camino. Con destellos, que los tuvo, no basta en el Us Open. Pebble Beach no es Augusta, donde podr¨ªa jugar con los ojos cerrados. Despu¨¦s de triunfar en el Masters, a Woods le ha costado competir con los mejores en los dos grandes siguientes (en el PGA ni pas¨® el corte), lo que abre la duda sobre sus opciones de m¨¢s t¨ªtulos en el Grand Slam fuera del jard¨ªn de Georgia.
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