Muchas bocas calladas

Se acab¨® el Mundial para Espa?a. La selecci¨®n est¨¢ ya de vuelta en casa, pero despu¨¦s de perder por la m¨ªnima frente a Estados Unidos la sensaci¨®n es de victoria y de las grandes. Porque perder siempre duele, pero hay maneras y maneras, y sin duda Espa?a eligi¨® la mejor; luchando hasta el final sin miedo y con valent¨ªa, con orgullo y con f¨²tbol.

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Vayamos por partes. En lo meramente deportivo, Espa?a tute¨® a las actuales campeonas del mundo, que se vieron sorprendidas y, por momentos, superadas por el buen juego con bal¨®n (aunque eso ya lo esperaban) y sin ¨¦l. Espa?a hizo su partido m¨¢s completo en este Mundial y quiz¨¢s el mejor de siempre. Solidarias y agresivas en defensa, con calidad e intenci¨®n en ataque, e incluso r¨¢pidas en las transiciones, buscando lo que en los otros partidos falt¨®, profundidad y verticalidad. Cierto es tambi¨¦n que no se crearon oportunidades claras, pero la sensaci¨®n era de peligro y amenaza constante. Y a eso no est¨¢n acostumbradas las estadounidenses. Y sufrieron, vaya que si sufrieron.

Hacer sufrir a EE UU no es f¨¢cil, sobre todo si somos conscientes de que f¨ªsicamente son superiores y mentalmente son fuertes y resistentes para enfrentarse a lo que sea. Pero a esto del f¨²tbol se juega con un bal¨®n y con ¨¦l las espa?olas son mejores. Y el f¨²tbol son decisiones, y en eso tambi¨¦n somos mejores gracias a nuestra cultura futbol¨ªstica y a una amplia comprensi¨®n del juego; a la ejecuci¨®n espa?ola solo le falt¨® el gol, o menos penaltis.

Estados Unidos ten¨ªa soluciones en el banquillo, pero el bloqueo lleg¨® incluso al cuerpo t¨¦cnico, que seguramente se debat¨ªa entre se?alar p¨²blicamente a algunas de sus estrellas con el cambio o aguantar el descaro espa?ol y confiar en que el pitido final llegase pronto. Se decantaron por lo segundo y el partido estuvo abierto hasta el final, con Espa?a buscando el gol del empate incluso con su defensa central. Fue como morir ahogado en la orilla, para las jugadoras y para todos los que segu¨ªamos el partido por televisi¨®n. La gesta estuvo cerca y lejos a la vez.

Nos falt¨® un poco de mordiente, alguna salida en conducci¨®n rompiendo l¨ªneas, fijando y creando superioridades (al menos posicional), algo m¨¢s desde el banquillo, algo m¨¢s de f¨ªsico, algo m¨¢s de qu¨¦ s¨¦ yo... Pero ahora sabemos el camino y los ajustes, y ese es el futuro. En cuatro a?os Espa?a volver¨¢ al Mundial y lo har¨¢ para luchar por el t¨ªtulo, porque ahora ya s¨ª se ha graduado y se ha ganado el respeto internacional. Ahora ya saben c¨®mo competir con las grandes. En cuatro a?os, las j¨®venes que liderar¨¢n la Espa?a del futuro ser¨¢n m¨¢s maduras y las ya no tan j¨®venes ser¨¢n a¨²n mejores.

Fuera del verde tambi¨¦n se ha ganado. Se han roto audiencias, se ha sido portada, se ha llegado a millones de familias y el nivel de nuestra selecci¨®n y de este Mundial en general ha callado muchas bocas. Y tambi¨¦n ha abierto muchas otras, para, como dije en mi primer art¨ªculo sobre este Mundial, hablar, opinar y criticar. Eso era lo que quer¨ªamos, que se hablase de f¨²tbol, sin g¨¦nero.

Y ahora que Espa?a no sigue en Francia, ?qu¨¦ hacemos? ?Seguir viendo el Mundial! Empieza lo mejor y estos cuartos de final dejan claro la progresi¨®n y ya dominio absoluto del f¨²tbol europeo, con siete de las ocho selecciones (EE UU como excepci¨®n), y la importancia de ligas nacionales potentes y profesionales.

El duelo m¨¢s esperado ser¨¢ este viernes en Par¨ªs, una final anticipada entre Francia y Estados Unidos. Al ganador le quedar¨¢ el ¨²ltimo paso frente a Inglaterra o Noruega. Por el otro lado del cuadro se ha colado Italia, la sorpresa del torneo, que buscar¨¢ el sue?o de las semifinales contra Holanda (actual campeona de Europa). El ¨²ltimo enfrentamiento ser¨¢ uno de los cl¨¢sicos, Alemania-Suecia.

No apaguen la televisi¨®n, enciendan las radios y compren los peri¨®dicos; hagan caso y disfruten del f¨²tbol y de sus emociones.