El Tour del Porvenir de G¨®mez del Moral
El espa?ol gana en 1962 la segunda edici¨®n de esta prueba que iba en paralelo a la carrera principal, aunque recortada
El Tour del Porvenir naci¨® en 1961 y en su primera edici¨®n fue segundo Patxi Gabica. La siguiente la gan¨® Antonio G¨®mez del Moral, hermano de Jos¨¦ G¨®mez del Moral, que le sacaba ocho a?os. Naturales ambos de Cabra (C¨®rdoba), como Jos¨¦ Sol¨ªs Ruiz, la Sonrisa del R¨¦gimen, ministro del Movimiento, cartera que inclu¨ªa el ¨¢rea de Deportes. El que ped¨ªa ¡°menos lat¨ªn y m¨¢s deporte¡±.
La carrera se disputaba en paralelo con el Tour grande, pero ven¨ªa a ser dos tercios de este.
Empezaba cuando el otro ya llevaba una semana, ten¨ªa 14 etapas en lugar de 21. Sol¨ªan salir y llegar en las mismas ciudades, pero por un recorrido m¨¢s corto. Corr¨ªan ciclistas con licencia independiente, un salto entre la categor¨ªa juvenil y la profesional.
Aquel 1962 el Tour mayor pas¨® a equipos comerciales, mientras que el del Porvenir se corr¨ªa por pa¨ªses. Por tanto, en el grande ya no hab¨ªa equipo de Espa?a. Bahamontes, Campillo y Ota?o corr¨ªan por el Margnat Paloma; Antonio Su¨¢rez y Angelino Soler por el Gichi; y Jaime Alomar por el Peugeot. En el del Porvenir s¨ª hab¨ªa equipo Espa?a: Mome?e, G¨®mez del Moral, Eusebio V¨¦lez, Mart¨ªn Colmenarejo, L¨®pez Cano, Mayoral, Gin¨¦s Garc¨ªa y Quesada.
Lo de los equipos de marcas sent¨® mal. Eso de no poder seguir a los corredores en un conjunto nacional (y de paso criticar sus discordias, tan frecuentes), desconcertaba. Para no dar publicidad gratuita, la prensa ofrec¨ªa la clasificaci¨®n por equipos por el nombre de los directores. Por ejemplo, el Margnat Paloma de Bahamontes era el ¡°Raoul R¨¦my¡± y el Saint Raphael de Anquetil era el ¡°Raphael Geminiani¡±.
Por supuesto, del Tour mayor todo se nos reduc¨ªa a Bahamontes, que lleg¨® muy retrasado a los Pirineos, remont¨® espectacularmente all¨ª, pero luego perdi¨® 15 minutos camino de Carcasonne, lo que le descart¨® para la general. En los Alpes volvi¨® a brillar. Gan¨® la Monta?a por cuarta vez.
As¨ª que la mirada se iba al Tour del Porvenir, donde el equipo espa?ol respondi¨® como tal, lo que en s¨ª era una feliz novedad, frente al gallinero que siempre hab¨ªa sido la selecci¨®n profesional.
Fue un duelo entre Espa?a y Holanda, tal como hab¨ªa supuesto antes de la salida el seleccionador, Gabriel Saura, que lamentaba que se hab¨ªa limado monta?a respecto a la edici¨®n anterior.
El primer l¨ªder fue Jan Janssen. Le quit¨® el amarillo Mome?e en la tercera etapa, lo que provoc¨® la visita de Elola Olaso, delegado Nacional de Deportes, que se acerc¨® desde San Sebasti¨¢n, donde veraneaba, a Bayona. En los Pirineos tom¨® el maillot G¨®mez del Moral, que tras una contrarreloj se lo ceder¨¢ a Hugens, tambi¨¦n holand¨¦s. En la octava etapa, llana, todo el equipo espa?ol cay¨® en una trampa de abanicos y G¨®mez del Moral perdi¨® ocho minutos: ¡°Nosotros entonces no sab¨ªamos lo que era eso. Cuando hab¨ªa viento de costado, los holandeses, los belgas, los franceses y hasta los italianos se organizaban, nos dejaban fuera y nos ca¨ªan los minutos como ladrillos¡±. Y as¨ª era. En aquellos a?os jam¨¢s sal¨ªa la palabra abanicos en las cr¨®nicas ciclistas.
De la mili a Par¨ªs
El resto fue una remontada soberbia en los Alpes, al comp¨¢s de los nuevos arreones de Bahamontes. En Brian?on, G¨®mez del Moral recuper¨® el maillot, un d¨ªa que Hugens y Nijdam, otro holand¨¦s que llev¨® el amarillo, llegaron derrumbados, llorando. De ah¨ª al final, bien protegido por el equipo, el de Cabra mantuvo el liderato. Gan¨® en el Parque de los Pr¨ªncipes, donde dio la vuelta de honor, como hab¨ªa hecho Anquetil, y entreg¨® el ramo a Eusebio V¨¦lez en agradecimiento por el apoyo de todo el equipo. Los ocho espa?oles acabaron la carrera.
El regreso a Madrid fue apote¨®sico. En la estaci¨®n de Pr¨ªncipe P¨ªo le abraz¨® su paisano Sol¨ªs Ruiz en medio de un ambiente de euforia general. ¡°?Somos o no somos espa?oles!¡±, gritaban los corredores. Y el ganador dedic¨® el triunfo a la Patrona de Cabra y al Capit¨¢n General de Canarias. Estaba en periodo militar y corri¨® gracias a un permiso especial.
El tercero de la prueba, el holand¨¦s Jan Janssen, ganar¨ªa el Tour grande en 1968. G¨®mez del Moral no lleg¨® a tanto, aunque tuvo una larga y feliz carrera. Gan¨® etapas en el Giro y en la Vuelta, en la que se clasific¨® varias veces entre los diez primeros. Ahora vive feliz en Sevilla, donde se vuelca en la organizaci¨®n de la Vuelta a Sevilla, carrera de promoci¨®n.
Y aquella selecci¨®n, de tan buena conducta como equipo, fue germen de lo que luego ser¨ªa el Kas, continuo ganador de las clasificaciones por equipos en el Tour y en la Vuelta.?
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