Joaqu¨ªn dise?a la remontada del Betis

Betis y Legan¨¦s sestearon en una primera mitad discreta para brindar un excelente segundo acto en la calurosa noche sevillana. Momentos en los que Joaqu¨ªn dio dos pases de nivel para que su equipo remontara ante un buen rival, timorato primero, luego valiente con un estupendo Braithwaite. El dan¨¦s fue un incordio para la defensa b¨¦tica, como tambi¨¦n Arn¨¢iz cuando salt¨® al terreno de juego. Gan¨® el Betis porque atesora m¨¢s calidad en elementos como Fekir, el propio Joaqu¨ªn o Canales. El Legan¨¦s no supo mantener su gol porque el Betis, con el tanto en contra, se dej¨® de complejos y fue a por la remontada. Joaqu¨ªn, con esos dos pases excelentes, abri¨® el camino luego muy bien recorrido por Loren (tres goles ya) y Fekir, que se movi¨® con talento y acierto en el gol.

El Betis tir¨® de calidad para superar a un Legan¨¦s que sabe a lo que juega, pero que acumula ya tres derrotas y es colista. El primer triunfo b¨¦tico no debe ocultar sus problemas en defensa mientras se adapta a lo que se desea Rubi. El Legan¨¦s tuvo hasta tres claras ocasiones de gol para lograr el empate, desbaratadas por un Joel que estuvo a gran nivel. Fekir puso la calidad y el gol. Joel, con siete paradas, sostuvo a este Betis fr¨¢gil en su entramado defensivo. En periodos de transici¨®n, nada como las victorias para crecer y despejar fantasmas.

Mientras busca su nueva identidad, hay aspectos que el Betis, como club, deber¨ªa mejorar. Uno de ellos es, sin duda, el estado del terreno de juego, blando e irregular, un escenario impropio para el equipo encargado de proponer f¨²tbol. No se entiende muy bien por qu¨¦ los futbolistas b¨¦ticos, y los del Legan¨¦s, tuvieron que luchar contra un problema que debe tener soluci¨®n. Otros, como los 34 grados con los que se inici¨® el encuentro, son inevitables en Sevilla en el mes de agosto. Pero el Betis tiene m¨¢s problemas. Su f¨²tbol, a trompicones, sin continuidad, choc¨® con el esp¨ªritu de un Legan¨¦s que se defiende con cierto orden. En esa b¨²squeda de su nueva identidad, Rubi cambi¨® el sistema para que sus jugadores actuaran con un 4-3-3, con Canales y Guardado escoltando a Carvalho y Joaqu¨ªn de delantero. Bartra, adem¨¢s, se qued¨® en el banquillo para que entrara Mandi. Que al Betis le est¨¢ costando es evidente, aunque tambi¨¦n hay aspectos que deben invitar a la esperanza mientras Rubi da con la tecla. Y es que los jugadores quieren.

Adem¨¢s, aunque el f¨²tbol no fluya, el Betis tiene elementos como Fekir o Joaqu¨ªn. Por eso, aunque el Legan¨¦s se defendiera bien, con poco ataque y muchas faltas, las apariciones del franc¨¦s y los destellos de Joaqu¨ªn fructificaron en dos claras ocasiones de gol de los andaluces. Joaqu¨ªn envi¨® al palo una falta lanzada con mucho tino y luego Mandi cabece¨® al larguero un c¨®rner muy bien sacado por el portuense, con error incluido de Cu¨¦llar en la salida. Todo fue fruto de la fe b¨¦tica ante un Legan¨¦s quiz¨¢s angustiado por el tremendo calor que se vivi¨® en Heli¨®polis. A los de Pellegrino les falt¨® tener algo m¨¢s el bal¨®n para inquietar la meta de Robles.

El segundo tiempo fue una delicia. Influy¨®, sin duda, que el Legan¨¦s se adelantara en el marcador en la en¨¦sima acci¨®n de buen delantero de Braithwaite. El tanto espole¨® al Betis, superado en muchas fases de la primera mitad. Lleg¨® el momento del talento, con Joaqu¨ªn ejecutando pases para abrir la defensa del Legan¨¦s. Emerson centr¨® y Loren, en gran momento, acert¨®. El empate abri¨® los mejores momentos del Betis, que hizo el segundo en una acci¨®n maravillosa entre Joaqu¨ªn, Canales y Fekir, certero en el remate tras el arrastre de Loren. Una jugada que define la calidad de este equipo, que, sin embargo, tiene una doble vertiente. La del sufrimiento en defensa despu¨¦s de los cambios ofensivos ordenados por Pellegrino. Braithwaite y Arn¨¢iz rozaron el empate y chocaron con Joel. Tambi¨¦n Silva en una falta. No lleg¨® para alegr¨ªa de un Betis que debe aprender a competir. Como Carvalho con su amarilla en la ¨²ltima jugada del partido impidiendo el ataque del Legan¨¦s. Con tanta seda, de vez en cuando viene bien algo de esparto.