Las claves del Mundial de rugby
Las potencias del norte y del sur buscan las debilidades de Nueva Zelanda, que aspira en Jap¨®n a su tercer Mundial consecutivo
Nueva Zelanda busca desde este viernes en Jap¨®n su cuarto Mundial ¨Cel tercero consecutivo- ante una hueste de hambrientos adversarios. Destacan Sud¨¢frica, invicta este a?o, o las europeas, sobre todo Irlanda e Inglaterra, construidas a medida para tumbarles.? El torneo arranc¨® este viernes con la victoria de Jap¨®n sobre Rusia (30-10), el duelo que habr¨ªa jugado Espa?a de no caer en B¨¦lgica y ser descalificada por alinear jugadores inelegibles. Es la puesta de largo del primer anfitri¨®n que no representa a una potencia tradicional. Los nipones, la gran sorpresa en 2015, buscar¨¢n progresar a cuartos y apear a Escocia o a Irlanda en el camino. Mientras, el grupo de la muerte lo integran Francia, Argentina e Inglaterra; tres gigantes para dos plazas.
Siete de los ocho t¨ªtulos corresponden al hemisferio sur; el de Inglaterra, en 2003 es el ¨²nico del norte. El evento, el tercero que m¨¢s espectadores mueve despu¨¦s de los Juegos y el Mundial de f¨²tbol, pretende expandir el oval a un terreno que presume f¨¦rtil. Las lesiones ¨Cinevitables en un torneo que se prolonga hasta el 2 de noviembre¨C y la sanci¨®n a las acciones m¨¢s fronterizas ser¨¢n protagonistas en un deporte que estudiar¨¢ prohibir cualquier placaje por debajo de la cintura.
La te¨®rica vulnerabilidad de los All Blacks
Nueva Zelanda se exige la excelencia a trav¨¦s de la renovaci¨®n permanente. Los killers de 2015, Julian Savea y Nehe Milner-Skudder, han dejado hueco a un sinf¨ªn de recambios de garant¨ªas como George Bridge o Sew Reece. La fuente del talento es inagotable, Beauden Barrett es un prodigio y Kieran Read es un digno sucesor del mito Ritchie McCaw. Con todo, su din¨¢mica no es la deseada. La derrota en noviembre en Dubl¨ªn hizo da?o; siguieron este a?o un empate ante Sud¨¢frica y un tropiezo duro (47-26) ante Australia. Que lleguen con el n¨²mero 2 del ranking es una anomal¨ªa. Y su gran tanque, Brodie Retallick, no jugar¨¢ hasta cuartos. No es la ¨²nica lesi¨®n rese?able de un jerarca con ciertas fugas.
La medicina de Australia
Tras su peor a?o de resultados en seis d¨¦cadas, Australia entendi¨® en 2018 que era demasiado tarde para relevar a Michael Cheika. El t¨¦cnico pondr¨¢ a prueba su reputaci¨®n en los grandes torneos, que refut¨® en 2015 llevando a unos Wallabies improvisados a la final. Su receta para recuperar el control de una selecci¨®n an¨¢rquica ha sido apostar por un estilo f¨ªsico, a veces brutal, personificado en su centro Samu Kerevi, toda una apisonadora no exenta de talento. La salud de sus delanteros, desde el emergente segunda Rory Arnold a los cl¨¢sicos terceras Michael Hooper y David Pocock, ser¨¢ clave. Son grandes portadores de balones y una garant¨ªa defensiva.
La ambici¨®n argentina
Pese a llevar 13 meses al frente de Los Pumas, Mario Ledesma asegura que sus pupilos aspiran a ganar el torneo. Su experiencia como jugador y t¨¦cnico ¨Cfue el asistente de delanteros de Australia en 2015¨C suma la prudencia: el primer reto es llegar a cuartos y Francia plantea un debut peliagudo. Rozaron en julio su primer triunfo ante los All Blacks y su franquicia, los Jaguares ¨Caporta 26 de los 30 convocados- lleg¨® a la final del Super Rugby, la Champions del hemisferio sur. El renacido medio-mel¨¦ Tom¨¢s Cubelli ¨Cun perfil muy completo¨C y el vers¨¢til Emiliano Boffelli ¨Cun comod¨ªn para la trasera¨C atraer¨¢n muchas miradas.
La enrachada Sud¨¢frica
Hace dos a?os, Sud¨¢frica sufri¨® ante los All Blacks la peor derrota de su historia (57-0). El merito de Rassie Erasmus es haber transformado al mismo grupo de jugadores en el ¨²nico equipo imbatido de 2019. La elecci¨®n de Siya Kolisi, el primer jugador negro en capitanear a los Springboks, fue m¨¢s que cosm¨¦tica y el flanker se ha erigido en un gran l¨ªder. Faf de Klerk se ha convertido en un medio-mel¨¦ estelar, mientras Handr¨¦ Pollard llega en su plenitud como apertura con gran presencia f¨ªsica. La ventaja de compartir grupo con Nueva Zelanda es que no se cruzar¨ªan con ellos hasta la final.
Inglaterra y el embajador Eddie Jones
Eddie Jones gest¨® en Brighton la mayor campanada de la historia reciente tumbando a Sud¨¢frica al frente de Jap¨®n. As¨ª se gan¨® en 2015 el honor de ser el primer seleccionador no brit¨¢nico del XV de la Rosa. Su proclama es cristalina: tutear a los All Blacks. Tras dos a?os rompedores, ha mostrado sus costuras en los dos ¨²ltimos. El ingl¨¦s es un equipo imponente con los hermanos Vunipola o Maro Itoje en una delantera atl¨¦tica y un gran director de orquesta como Owen Farrell. Le falla la consistencia, sobre todo a domicilio, y su juego de trincheras ha adolecido en tardes grandes. Necesita fondo de armario y el juego mental del preparador australiano.
La orgullosa Gales
Gales esgrime un a?o inmaculado, con el Grand Slam del Seis Naciones y triunfos convincentes ante Inglaterra e Irlanda. En la despedida de su seleccionador, el neozeland¨¦s Warren Gatland, buscar¨¢n resolver choques parejos. Las lesiones no les han ayudado. No estar¨¢ su apertura titular, Gareth Anscombe, y ser¨¢ el veterano Dan Biggar el que recupere el 10. La tercera est¨¢ muy mermada tras la temprana retirada de Sam Warburton y la lesi¨®n de Faletau. Queda como basti¨®n Justin Tipuric. Menos fondo de armario hay en el puesto de medio-mel¨¦. No va Rhys-Webb por la pol¨ªtica federativa de exigir al menos 60 internacionalidades a jugadores que no compitan en Gales. Su fortaleza en el tramo final de los partidos, su adaptaci¨®n a rivales muy distintos y su fe les hace un verdadero hueso.
La barrera de Irlanda
Pese a su decepcionante Seis Naciones, Irlanda llega al Mundial con el n¨²mero uno del ranking y con la confianza de haber batido en noviembre a los All Blacks. Joe Schmidt, que deja el cargo tras el torneo, ha gestado una plantilla profunda, una debilidad intr¨ªnseca en el rugby irland¨¦s. Porque el enigma es si su juego de desgaste, siempre a partir de su esforzada delantera, es sostenible a lo largo de mes y medio. El XV del Tr¨¦bol,? que nunca ha pasado de cuartos de final, deber¨¢ superar, previsiblemente, a Sud¨¢frica o Nueva Zelanda para llegar a semis. La salud de su apertura, Johnny Sexton, y el momento de forma de su compa?ero en la bisagra, Conor Murray, que viene de un mal a?o, ser¨¢n determinantes.
La impredecible Francia
La tendencia del XV del Gallo no invita a un renacer mundialista, pero su pedigr¨ª exige cautela en los pron¨®sticos. Apenas ha ganado 34 de sus 89 encuentros tras perder la final del Mundial de 2011 ante los All Blacks. Mientras el tempo del rugby crece en todo el mundo, su competici¨®n dom¨¦stica apuesta por la contundencia, con una velocidad m¨¢s baja. Sin estabilidad en la bisagra ¨Cel 9 y el 10-, podr¨ªa quedar fuera de cuartos por primera vez, a las puertas de su Mundial de 2023. Su gen impredecible est¨¢ en Antoine Dupont, un medio-mel¨¦ m¨¢s anotador que distribuidor y con un estilo an¨¢rquico que le vale errores y sorprender a las defensas. O el estilo de Damian Penaud, un ala explosivo y vers¨¢til.
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