El mando de Oblak
La marcha de pesos pesados ha convertido al meta en un jefe del vestuario
El final de la temporada pasada ya dej¨® atisbar el cambio de mando en el vestuario del Atl¨¦tico. El enfrentamiento de Diego God¨ªn con el club por una renovaci¨®n que no se dio hizo dar un paso al frente a Koke, Oblak, Sa¨²l y Gim¨¦nez, los cuatro capitanes ya de facto en este curso. El central uruguayo limit¨® mucho su radio de acci¨®n a lo que suced¨ªa en el campo de juego.
Entre los asuntos espinosos que hubo de manejar en la caseta estuvo el de Diego Costa. Su expulsi¨®n en el Camp Nou en el partido en el que el equipo se jugaba meterse de lleno en la pelea por el t¨ªtulo irrit¨® al club y a parte del plantel. La elevada multa econ¨®mica que la directiva rojiblanca le impuso a Costa, por encima del medio mill¨®n de euros, deriv¨® en la negativa del jugador a entrenarse. Reconducida la situaci¨®n, con Simeone como principal defensor, tambi¨¦n Oblak desempe?¨® un papel fundamental en la reinserci¨®n en el grupo del hispanobrasile?o.
Con su renovaci¨®n ya sellada, el meta esloveno de 26 a?os organiz¨® una comida en su casa a la que asistieron Costa, Savic y su compatriota el baloncestista Luca Doncic. El acercamiento al grupo de los balc¨¢nicos se interpret¨® como el pistoletazo al nuevo rol de Oblak, al que solo el simbolismo de Koke le ha impedido ser el primer capit¨¢n. En el primer partido de pretemporada confirm¨® su jerarqu¨ªa. Ante la ausencia de Koke, el guardameta luci¨® el brazalete por delante de Sa¨²l.
¡°Jan [Oblak] ha sido muy observador durante los cinco a?os que lleva aqu¨ª y ahora se ha corrido el escalaf¨®n tras las marchas de Gabi, God¨ªn, Juanfran y Griezmann. Tiene mucha personalidad y siempre ha tenido peso, pero ahora est¨¢ muy jefe. Habla poco, pero cuando lo hace tiene peso y le escuchan¡±, conceden en el club.
La renovaci¨®n de Oblak estaba consideraba como una de las patas que deb¨ªan sostener el obligado renovado proyecto del Atl¨¦tico. Con la extensi¨®n de su contrato hasta 2023 a raz¨®n de 10 millones de euros netos por temporada a punto de cerrarse, seg¨²n fuentes conocedoras de las negociaciones, Oblak lleg¨® a inquietarse ante la desbandada que se avecinaba y presion¨® al club para que afinara y apuntara alto en los refuerzos. ¡°M¨¢s que presionar, estuvo muy interesado en c¨®mo se iba a confeccionar la plantilla. Siempre dijo que lo importante era tener un equipo para competir y que lo dem¨¢s daba igual¡±, relata un directivo rojiblanco.
Iniciado el curso, Oblak mantuvo su porter¨ªa a cero en los dos primeros partidos de Liga contra el Getafe (1-0) y el Legan¨¦s (0-1). La inusual secuencia de encajar dos goles en tres partidos consecutivos ¡ªEibar (3-2), Real Sociedad (2-0) y Juventus (2-2)¡ª le inquietaron sobremanera. En esos tres encuentros se apreci¨® a un portero que no parec¨ªa fiarse de los parapetos que ten¨ªa delante. ¡°No es un portero rajador o que haga grandes aspavientos para se?alar a sus compa?eros cuando encaja un gol, pero lo lleva mal cuando eso sucede. Es normal que estuviera inquieto en el partido con el Eibar porque nos hicieron dos goles en 20 minutos¡±, advierten desde el club.
El empate con el Celta en el Metropolitano (0-0) y la victoria en Mallorca han normalizado sus n¨²meros. Los cuatro tantos que ha recibido en las seis primeras jornadas ligueras igualan sus registros de las dos temporadas anteriores. En esas dos citas sin encajar los futbolistas de Simeone tambi¨¦n han contribuido a reducir a ocho el n¨²mero de remates que Oblak recibe por partido, la mejor marca desde que aterriz¨® en el Atl¨¦tico en el verano de 2014. El duelo de este s¨¢bado amenaza esas estad¨ªsticas para un portero que aspira a lograr su quinto Trofeo Zamora consecutivo, algo que ning¨²n portero ha logrado.
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