Unos presupuestos muertos y resucitados en el Athletic

Un compromisario puntilloso y un secretario despistado pueden tumbar unos presupuestos de m¨¢s de 100 millones de euros. Sucedi¨® en la Asamblea del Athletic, que por una vez, se traslad¨® a la ma?ana de un domingo de partido. Aitor Elizegi no las ten¨ªa todas consigo para enfrentarse a unos compromisarios, que elegidos en el mandato de su antecesor, Josu Urrutia, al que le aprobaron casi por aclamaci¨®n todas sus cuentas, estaban mirando con lupa todos sus pasos. El plato fuerte de cada Asamblea, que se desarroll¨® puerta con puerta con un acto de Vox en el Palacio Euskalduna, es la aprobaci¨®n de la gesti¨®n econ¨®mica de la campa?a anterior, con un super¨¢vit de 63,8 millones de euros y la de los presupuestos, que la junta estima en 132 millones.

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El primer punto se aprob¨® con estrechez, pero sin problemas: 321 votos a favor y 240 en contra. Lo m¨¢s peliagudo llegaba con la aprobaci¨®n de los presupuestos, porque si en el primer caso, muchos de los votos a favor llegaron porque eran los n¨²meros de Urrutia en su mayor parte, las cuentas previstas para 2020 son obra completa de la directiva de Elizegi.

Y entonces se mont¨® el quilombo.

Las votaciones dieron un resultado de 284 votos a favor, 276 en contra, 14 en blanco y 16 nulos, un margen muy estrecho, en teor¨ªa, una victoria de la junta, pero mientras las urnas permanec¨ªan abiertas para los votos, una de las intervenciones en el estrado, por parte de un compromisario, concluy¨® con que para aprobar los n¨²meros hac¨ªa falta que se llegara al 50% de los asistentes a la Asamblea. El secretario de la junta directiva, Fernando San Jos¨¦, le dio la raz¨®n. Cuando lleg¨® el resultado de la votaci¨®n y se proclamaron los resultados, el mismo secretario anunci¨® que los presupuestos no se aprobaban porque no se hab¨ªa conseguido el 50% de los votos de los asistentes. En principio, un varapalo a la directiva de Elizegi.

Nadie rechist¨®, aunque un mensaje de whatsapp que recibi¨® uno de los responsables de prensa del Athletic le puso en alerta: eso no era lo que fijaban los estatutos, que dicen que las votaciones ordinarias se resuelven por mayor¨ªa simple.

Mientras se votaban otros puntos, en la mesa de los directivos se empezaron a ver movimientos despu¨¦s del mensaje de alerta. Los estatutos son claros. En un receso se reuni¨® el gabinete jur¨ªdico del club y se constat¨®, en efecto, que la mayor¨ªa simple de los votos serv¨ªa para aprobar los presupuestos, en este caso aunque s¨®lo llegaran al 47,33% de las papeletas. En el regreso a la sala, Fernando San Jos¨¦ explic¨® la nueva situaci¨®n, pese a algunas protestas. Los presupuestos de Elizegi, por los pelos, estaban aprobados, aunque ni ¨¦l mismo se lo crey¨® en un principio.