El Athletic se complica la vida ante el Valladolid
Un gol en propia puerta de los rojiblancos da vida al equipo de Sergio Gonz¨¢lez en San Mam¨¦s
A veces se complican las cosas sin saber muy bien por qu¨¦; que se lo pregunten al Athletic, que ten¨ªa sesi¨®n doble con su asamblea general, y con el partido. En la asamblea se torcieron, porque pasaron cosas asombrosas como que se dieran por derrotados unos presupuestos que despu¨¦s se aprobaron.
En San Mam¨¦s, porque cientos de seguidores del Athletic entraron al campo en el descanso y que dej¨® de funcionar una aplicaci¨®n m¨®vil que sustituye al carn¨¦ y se formaron largas colas para entrar. Por eso y por el partido, claro, en el que los bilba¨ªnos, perdieron dos puntos ante el Valladolid por un error del portero, tan infantil como flagrante.
Parec¨ªa que iba a ser una cosa y fue otra. Funcionaba el Athletic por las bandas, y los centros los remataban los delanteros, como indican los manuales, y adem¨¢s sin oposici¨®n pucelana, y en esto estaba el envite, que parec¨ªa que se resolver¨ªa por decantaci¨®n, eso tan antiguo de que tanto va el c¨¢ntaro a la fuente. Frente a un Athletic din¨¢mico aparec¨ªa un Valladolid liviano. Pero despu¨¦s de un despiste de Yeray, que perdi¨® un bal¨®n intrascendente, en el que ?nal se encontr¨® con el muro de Unai, despert¨® el equipo visitante, que se anim¨® a asomarse al balc¨®n del Athletic.
Y con el equipo rojiblanco m¨¢s replegado y el Valladolid un poco m¨¢s valiente, quedaban m¨¢s espacios para correr, y en este negociado el m¨¢s veloz es Williams. As¨ª lo interpret¨® Unai L¨®pez, en el minuto 32, cuando desde el borde del ¨¢rea, en vez de pegar un pelotazo, lanz¨® una bomba letal al espacio por donde pastaba su compa?ero, que se deshizo de los dos centrales, regate¨® a Masip, y cuando se qued¨® de espaldas a la porter¨ªa, tuvo la suficiente presencia de ¨¢nimo para girarse y disparar donde el portero no pod¨ªa llegar.
El Athletic se pon¨ªa por delante, casi cuando menos lo merec¨ªa, y el Valladolid no encaj¨® bien el golpe, pero mantuvo el tipo hasta el descanso. Despu¨¦s, Sergio hizo algunas modificaciones que le cambiaron la cara a su equipo, mientras el Athletic segu¨ªa en lo mismo, aunque con Unai L¨®pez, que hab¨ªa sido el motor hasta entonces, mucho m¨¢s cansado. Apret¨® el equipo visitante, le puso una marcha m¨¢s a su juego, apareci¨® por las bandas y aprovech¨® los errores. Su gol lleg¨® despu¨¦s de una mala salida del bal¨®n por parte de Yeray. Rob¨® Toni Villa, centr¨®, y Unai Sim¨®n, que quiso atraparla, pero que estaba pensando m¨¢s en c¨®mo dar salida despu¨¦s a la jugada que en atenazar la bola, vio c¨®mo se le escurr¨ªa, golpeaba en la espalda de I?igo Mart¨ªnez, que pasaba por all¨ª, y se colaba en la porter¨ªa.
Pudo entonces adelantarse el Valladolid, con un Athletic casi terminal, pero prefiri¨® resguardarse y estuvo a punto de perder el bot¨ªn, porque se reh¨ªzo el equipo de Garitano y acos¨® la porter¨ªa de Masip, que desvi¨® un bal¨®n definitivo despu¨¦s de que Muniain le robara la pelota a Kiko Olivas en el centro del campo y se plantara al borde del ¨¢rea para lanzar un derechazo que no entr¨® por la estirada del guardameta. Fue el ¨²ltimo estertor del Athletic, conformista a ratos, que pag¨® por ello, en un d¨ªa en el que las cosas se le complicaron sin saber por qu¨¦.
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