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Rodrygo se grad¨²a a lo grande con tres goles al Galatasaray
El brasile?o, autor de un triplete y una asistencia, monta una fiesta para un Real Madrid que aplast¨® de principio a fin al pachanguero equipo turco
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Bien pudo jugar en chanclas el Real Madrid, que se regal¨® una noche bienaventurada frente al pachanguero Galatasaray. Un rival con tan poco forro como el que mostr¨® en el duelo en Estambul. Entonces, el Madrid precis¨® 27 remates para un gol. Gui?os del f¨²tbol: en Chamart¨ªn, apenas se hab¨ªan quitado el ch¨¢ndal los madridistas cuando ya volaban con un 3-0 antes del cuarto de hora. Al frente, el cadete Rodrygo. Un chacal ante el gol. El rev¨¦s de Vinicius. El jovenzuelo no se inmuta donde a otros que le doblan la edad les casta?etean los pies. Tiene repertorio. El primero, como si nada. Mand¨® a la lona a Lemina, arm¨® la zurda con silenciador y la pelota repos¨® en un rinc¨®n de la porter¨ªa del uruguayo Muslera. Tanto sosiego para marcar como tanta contenci¨®n para festejar su primer bingo europeo. Y no un bingo cualquiera. El chico se convirti¨® en el brasile?o m¨¢s joven en anotar en Champions (18 a?os y 301 d¨ªas). Nada nuevo para su extraordinaria precocidad. La pasada temporada ya fue el m¨¢s biso?o en hacer diana en la Copa Libertadores. Con todo, los pies en el suelo. El chico es rotundo y cerebral. Por ahora, sin un rasgo de vedetismo. Y es persistente el brasile?o. Sin demorarse con confetis u otras jeremiadas, un cabezazo terminal a pase de Marcelo. Su aire de botones solo es una m¨¢scara, a sus 18 parece un futbolista ya licenciado. No solo le alumbra el gol, que ya se sabe que va y viene. Rodrygo sabe interpretar el juego, lo que precisa su discurrir en cada momento.
At¨®nito andaba el aparatoso Galatasaray cuando N¡¯Zonzi pis¨® a Kroos sobre la raya frontal del ¨¢rea. El juez recibi¨® un soplo, consult¨® el monitor y Sergio Ramos no hizo la concesi¨®n que ped¨ªa la hinchada. La gente quer¨ªa el tercero de Rodrygo, pero el capit¨¢n es mucho capit¨¢n y le ha cogido un singular apego a Panenka.
No fue casual que el penalti se cometiera sobre Kroos. Este curso, el alem¨¢n merodea como nunca por el per¨ªmetro del ¨¢rea rival. A su equipo no siempre le cuelgan los goles, as¨ª que todos deben remar, incluidos los volantes. Y Kroos tiene plomo y precisi¨®n con la bota derecha.
Con 3-0 y el conjunto turco en busca de una gatera por la que salir en estampida del Bernab¨¦u, el Madrid no dio por liquidada la faena. Pudo inclinarse por una jornada de ba?o y masaje, pero opt¨® por una noche recreativa. Ante la abdicaci¨®n de los de Terim ¡ªsin un gol tras cuatro partidos europeos¡ª, los de Zidane colonizaron la pelota, la hicieron circular con chispa, a pocos toques y en todas las direcciones. Nadie quiso perderse un partido para el lucimiento, sin ansiedades. Por fin, el Madrid sell¨® un partido redondo de principio a fin, sin rebajas de por medio. Si acaso, le falt¨® una escala mayor de Hazard, que a¨²n va de puntillas en b¨²squeda del aut¨¦ntico Hazard. Benzema le enchufa, lo mismo que Marcelo ¡ªal alza hasta que tuvo molestias poco antes del intermedio¡ª. El belga gotea clase, pero todav¨ªa no es el futbolista decisivo que se entroniz¨® en el Chelsea y la selecci¨®n de Roberto Mart¨ªnez. A la espera de un Hazard menos ambulante, ah¨ª est¨¢n Benzema y Rodrygo. A un paso del descanso, el chico de moda aprovech¨® un gatillazo del japon¨¦s Nagatomo para asistir al franc¨¦s, que se lo agradeci¨® como debe hacer un tutor.
No hubo madridista que mereciera una tacha, por m¨¢s que el adversario turco fuera una calamidad. Valverde tuvo tir¨®n, lo mismo que Mendy, relevo de Marcelo. Ninguno decay¨®. Ni siquiera cuando Zidane movi¨® el cesto en el segundo acto, con la aparici¨®n de Modric e Isco. La del croata tuvo su miga, por darle el testigo Casemiro, al que por un d¨ªa su t¨¦cnico concedi¨® un respiro. El malague?o, tan a la sombra ¨²ltimamente, tambi¨¦n tuvo su impacto con un cabezazo da?ino y alguna asistencia meritoria.
Pero en la noche que abri¨® Rodrygo no pod¨ªa faltar Benzema. Con su primer tanto ya hab¨ªa igualado a Di St¨¦fano como los terceros m¨¢ximos goleadores en la legendaria historia madridista en Europa. Con el segundo, el quinto de la noche, ya solo tiene por delante a dos jugadores tot¨¦micos: CR y Ra¨²l. Un gol que Benzema agradeci¨® a Carvajal, convertido en uno de los mejores mensajeros del gol del Madrid. De un Madrid que ya tiene a tiro su clasificaci¨®n tras un inicio tan borrascoso con el PSG y el Brujas. Mucha culpa tiene Rodrygo, que mont¨® tal fiesta para los suyos que se gan¨® poner el broche final (el 6-0). Con ¨¦l, todos se lo pasaron pipa.
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