Maya Moore, una canasta por la justicia
La gran estrella de la NBA femenina renunci¨® a la cima para defender a un hombre que lleva 23 a?os en prisi¨®n y ahora ha conseguido que un juez anule la sentencia condenatoria
Maya Moore gan¨® su segundo Mundial de Baloncesto en 2014, su segundo oro ol¨ªmpico en 2016 y su cuarto t¨ªtulo en la NBA femenina (WNBA) en 2017. En febrero de 2019, cuando ten¨ªa 29 a?os y estaba en la cumbre de su carrera, argument¨® su prematura retirada. ¡°Cada vez que lo pienso, me sorprende el ¨¦xito del que he formado parte. Pero no mido el ¨¦xito en la vida expl¨ªcitamente a trav¨¦s del baloncesto profesional. Mido el ¨¦xito a trav¨¦s de una pregunta: ?estoy viviendo de acuerdo con mi prop¨®sito? Hace mucho tiempo aprend¨ª que mi prop¨®sito es conocer a Jes¨²s y darlo a conocer. En 2019 no me centrar¨¦ en el baloncesto, sino en mi familia y en invertir mi tiempo en algunos sue?os que han conmovido mi coraz¨®n durante muchos a?os¡±, conclu¨ªa en un art¨ªculo en The Players Tribune. Y uno de esos sue?os es conseguir que se haga justicia a Jonathan Irons. Lleva 23 a?os en prisi¨®n, cumpliendo una sentencia de 50, acusado de robo y asalto a mano armada, a pesar de la ausencia de huellas dactilares, pruebas de ADN o testigos que corroboren el delito. Y, a pesar de que ten¨ªa 16 a?os cuando sucedieron los hechos, el joven afroamericano fue juzgado como adulto y declarado culpable por un jurado popular en el que todos sus integrantes eran blancos.
Maya Moore ha trabajado con los abogados de Irons, ha asistido a las audiencias y le visita desde hace a?os en la c¨¢rcel para brindarle su apoyo. Hace un mes celebr¨® como un primer, pero vital paso, la decisi¨®n del juez Daniel Green que anul¨® la sentencia que hab¨ªa condenado a Irons debido a una prueba que no fue revelada por los fiscales en el juicio inicial. Moore es cauta. La fiscal¨ªa dispone de unas semanas para apelar o pedir que se vuelva a juzgar el caso. La estrella de la WNBA conoci¨® a Irons a trav¨¦s de sus padrinos, que son de Jefferson City, la misma ciudad donde naci¨® ella. ¡°Estudi¨¦ los hechos de su caso y con los a?os aprend¨ª m¨¢s y m¨¢s. Me retir¨¦ del baloncesto y as¨ª dispuse de m¨¢s tiempo para trabajar en el caso¡±, explica.
Las sospechas de quienes apoyan a Irons es que se ocultaron pruebas exculpatorias. La exjugadora impuls¨® la campa?a de acci¨®n social Win with justice (Gana con justicia). ¡°Durante demasiado tiempo, una victoria para un fiscal ha sido un recuento de condenas y los resultados del juicio a menudo se asemejan a un marcador deportivo¡±, afirma. ¡°A menudo rastreamos el ¨¦xito en nuestro sistema de justicia con un conteo simple, eligiendo minimizar las complejidades de cada historia personal. No hemos valorado adecuadamente c¨®mo nuestro sistema de justicia trata a quienes entran en contacto con ¨¦l¡±.
Reivindicaci¨®n del deporte femenino
Se pens¨® que Moore se hab¨ªa tomado un a?o sab¨¢tico como jugadora. Pero en enero anunci¨® que iba a cumplir su segunda temporada sin competir en la WNBA y que tampoco lo har¨ªa en Tokio 2020. El aplazamiento de los Juegos abre un nuevo horizonte para su vuelta a las canchas. Cuenta con una exitosa experiencia en el baloncesto europeo que comenz¨® en 2012, cuando ayud¨® al Ros Casares de Valencia a conquistar su primera Euroliga y la Liga. Un a?o despu¨¦s jug¨® en la Liga china con el Shanxi Flame, dirigido por el seleccionador Lucas Mondelo. En 2018 gan¨® su segunda Euroliga, junto a Alba Torrens, en el Ekaterimburgo.
D¨ªas antes de que falleciera, Kobe Bryant afirm¨® que ella y varias jugadoras de la WNBA pod¨ªan jugar en la NBA. ¡°Algunas facetas de mi juego podr¨ªan ser efectivas, pero la diferencia f¨ªsica entre hombres y mujeres marca la desigualdad. Me lo tom¨¦ como una muestra de cari?o de Kobe, queriendo valorarnos¡±, afirma la jugadora de Misuri. Y reivindica: ¡°El mercado del deporte femenino profesional es complejo y desafiante. Trat¨¦ de no frustrarme demasiado al sentirme subestimada y mal pagada. Al mismo tiempo sent¨ª el aprecio de muchas personas que reconocieron mi ¨¦xito y el de mis compa?eras. Hay un est¨¢ndar distinto para hombres y mujeres en c¨®mo se define el ¨¦xito. Tenemos el mismo valor, pero c¨®mo se mide ese valor es diferente¡±.
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