El Circuito de Getxo resiste y se reanima

Las cosas cambian, pero no todas. En Getxo ya no es posible, como era tradici¨®n el d¨ªa de la carrera ciclista, comprar un bocadillo en la tienda de los Ros¨¢enz, al final de la cuesta de Txomintxu, ni beber un vino en la tasca Gurug¨², convertida, cosas de la modernidad, en una vivienda de planta baja. No es recomendable, en tiempos del coronavirus, recorrer a la inversa, con paradas para repostar en los bares del camino, el circuito cicl¨ªstico hasta llegar a la meta, antes en el muelle de Arriluze, ahora en la cuesta del Ayuntamiento. De hecho, ser¨¢ imposible acceder a la llegada salvo para equipos, periodistas y organizadores. Pero al menos, con las limitaciones y los requerimientos sanitarios impuestos por la pandemia, la carrera se mantiene, y se revitaliza. El Memorial Hermanos Otxoa, en recuerdo a los gemelos que dieron lustre al maillot de la Sociedad Ciclista Punta Galea, se correr¨¢ este domingo, dos d¨ªas despu¨¦s de la fecha habitual, el 31 de julio, cuando tocaban las fiestas de Algorta. Roberto Laiseka, h¨¦roe en Luz Ardiden, como lo fue Javier Otxoa en Hautacam, y que tambi¨¦n visti¨® el jersey naranja y azul del club organizador, ser¨¢ el director honor¨ªfico.

Todo comenz¨® hace casi un siglo. Un gent¨ªo enorme, seg¨²n cuentan las cr¨®nicas, presenci¨®, el d¨ªa de San Ignacio de 1924, la carrera que organiz¨® por primera vez en Getxo el Arenas Club. Despu¨¦s de 28 kil¨®metros de carrera, y para desgracia del club precursor, su figura, Segundo Barruetabe?a, tuvo una aver¨ªa a un kil¨®metro de la meta y le adelant¨® Domingo Guti¨¦rrez, corredor del Athletic, que tambi¨¦n ten¨ªa equipo ciclista. El m¨¢ximo rival futbol¨ªstico se llevaba la prueba ciclista organizada por la entidad arenera. Tercero fue Miguel Serrano, que tres a?os m¨¢s tarde fich¨® por el Real Madrid, donde coincidi¨® con Paquillo Cepeda, cedido por el Athletic mientras cumpl¨ªa el servicio militar, y que morir¨ªa tras una ca¨ªda en el Galibier durante el Tour de 1935.

Han pasado 96 a?os, y tras algunas ausencias, en los a?os setenta especialmente, el Circuito de Getxo llega a sus bodas de diamante como la segunda carrera de un d¨ªa m¨¢s antigua de Espa?a, despu¨¦s de la Cl¨¢sica de Ordizia, que naci¨® dos a?os antes, y que solo se interrumpi¨® durante dos veranos en la Guerra Civil. Curiosamente, las dos carreras vascas, junto con la Vuelta a Espa?a y la Vuelta a Burgos, son las ¨²nicas que han sobrevivido al coronavirus. Pese a su longevidad, gozan de buena salud. En el caso de Getxo, adem¨¢s, la pandemia ha resucitado la prueba. En los ¨²ltimos a?os, a causa del World Tour, solo el Movistar, entre los grandes equipos, cumpli¨® fielmente con su presencia en la prueba vizca¨ªna. Eusebio Unzue no dej¨® de enviar nunca a su formaci¨®n a una carrera en la que predominaban los conjuntos continentales, pero la falta de pruebas y la cercan¨ªa de la Vuelta a Burgos ha propiciado lo que los esfuerzos de los organizadores no hab¨ªan logrado hasta la fecha, y cinco equipos de la m¨¢xima categor¨ªa del ciclismo mundial se alinear¨¢n en la salida del Puente Colgante, Patrimonio de la Humanidad. Adem¨¢s del Movistar, est¨¢n inscritos el Bahrain, con Mikel Landa, Pello Bilbao y Mark Cavendish, el NTT Pro Cycling, el UAE, con Fernando Gaviria y Maximiliano Richeze en el grupo, y el Trek, que alinear¨¢ al campe¨®n del mundo Mads Pedersen. El maillot arco¨ªris lucir¨¢ por las carreteras de Getxo. No se ve¨ªa a un pelot¨®n tan bien nutrido en la localidad vizca¨ªna desde 1958, cuando se celebr¨® en marzo un crit¨¦rium internacional en el que participaron Anquetil, Darrigade, Bahamontes, Loro?o y Poblet, que se pudo rememorar en el NODO, o en la salida de etapa de la Vuelta a Espa?a de 2018.

El Circuito de Getxo recorre 177 kil¨®metros, con seis vueltas de 24 kil¨®metros, y ascensiones a Akarlanda ¨C5,3% de desnivel¨C y al muro de meta de Arkotxa (6,7%) como principales hitos. La ¨²ltima vuelta, de 33 kil¨®metros, llevar¨¢ a los ciclistas a Sondika, desde donde ascender¨¢n la cuesta de Pike, de dos kil¨®metros con un desnivel medio del 9,4% y rampas de hasta el 14%. Desde Artxanda, el pelot¨®n bajar¨¢ a Enekuri, Erandio y por la r¨ªa a Las Arenas, la playa de Ereaga y finalmente, la subida a la meta de nuevo por Arkotxa.