Pablo Carre?o, con todas las letras

Hace unos d¨ªas, un periodista especializado de The New York Times hizo una desafortunada referencia en Twitter a Pablo Carre?o, que ese d¨ªa hab¨ªa derrotado a Ricardas Berankis en la tercera ronda del US Open y prosegu¨ªa su camino en Nueva York.

¡°Pablo Carre?o Busta, semifinalista de 2017 (s¨ª, eso ocurri¨®¡­)¡±. Y como las redes sociales, ya se sabe, las carga el diablo, se encontr¨® enseguida con la r¨¦plica de un tenista profesional. ¡°Entonces, ?un t¨ªo que ha sido top-10 mundial y que ha jugado la Copa de Maestros ha llegado a las semifinales de un Grand Slam? Y eso es digno de un comentario sarc¨¢stico sobre un buen resultado¡­¡±, le reproch¨® el estadounidense Ryan Harrison, hoy descolgado en el ranking de la ATP, pero en su d¨ªa 40? del mundo.

Al fuego se a?adi¨® m¨¢s gasolina, porque desde Australia irrumpi¨® Nick Kyrgios, con tantos trucos en la raqueta como desorden en la cabeza: ¡°Si la tierra batida no existiera, este t¨ªo no estar¨ªa ni cerca del top-50¡±. El de Canberra borr¨® despu¨¦s el pol¨¦mico tuit, pero la cr¨ªtica corri¨® como un reguero de p¨®lvora y causa hoy d¨ªa un par de sonrojos.

Se olvidaron ambos, tal vez, de echar un vistazo al curr¨ªculo del asturiano y atender su recorrido en el circuito profesional, envidiado seguramente por un amplio pelot¨®n de compa?eros y subrayado otra vez ayer, cuando el espa?ol contuvo el torrencial ofensivo de Denis Shapovalov en un partidazo de 4h 08m (3-6, 7-6(5), 7-6(4), 0-6 y 6-3) y volvi¨® a alcanzar, s¨ª, de nuevo, las semifinales del grande neoyorquino. No necesita Carre?o, de 29 a?os, demostrar a estas alturas qui¨¦n es y d¨®nde est¨¢, porque los hechos le ponen en su sitio y le se?alan como un jugador que ha sido capaz de asentarse en una esfera privilegiada.

Pesa sobre ¨¦l el estigma que recurrentemente rodea al tenista espa?ol, circunscrito con facilidad al ¨¢mbito de la tierra cuando ya sea Carre?o u otros como Rafael Nadal, Roberto Bautista, Feliciano L¨®pez o Fernando Verdasco, por ejemplo, han ido demostrando que tienen herramientas para desenvolverse en otros territorios. Sin ir m¨¢s lejos, los cuatro t¨ªtulos que posee el gijon¨¦s (Winston-Salem, Mosc¨², Estoril y Chengdu) tienen el sello del cemento, donde su golpe plano gana filo y su coordinada movilidad abarcan pista con garant¨ªas.

¡°Si vuelvo a estar en semifinales es porque tengo el nivel. Por eso es muy importante para m¨ª, para mi confianza, seguir trabajando muy duro y seguir as¨ª¡±, se reivindicaba ayer, despu¨¦s de resistir a las mil embestidas del canadiense Shapovalov y desembarcar en la pen¨²ltima ronda, en la que se topar¨¢ el viernes con el escollo de Alexander Zverev.

¡°Estoy content¨ªsimo, es una sensaci¨®n incre¨ªble poder estar otra vez aqu¨ª. El partido ha sido muy bueno, no s¨¦ si desde fuera se ha disfrutado tanto como lo he hecho yo en la pista. Lo he dado todo, y creo que el nivel de juego ha sido muy alto¡±, valor¨® el asturiano, al que en su d¨ªa se le achacaba ser un adversario tierno, pero que desde hace tiempo viene ense?ando los colmillos y nunca es oponente de buen gusto para el de enfrente, sea quien sea.

Entrenado por Samuel L¨®pez y habiendo dado un significativo salto f¨ªsico de la mano del preparador Walter Navarro, Carre?o (27? en la lista de la ATP) aprovech¨® la cuarentena en Barcelona para exprimirse al m¨¢ximo y no dud¨® a la hora de reengancharse a la actividad. Le hac¨ªa especial ilusi¨®n, contaba hace un tiempo, participar en los Juegos y ganar un partido en Wimbledon. No podr¨¢ ser, pero luce en Nueva York. Sorte¨® el bache del estreno a cinco sets ante Uchiyama, y luego fue ejerciendo con sobriedad contra Mitchel Krueger y Ricardas Berankis, para encontrarse despu¨¦s con el regalo de Novak Djokovic, al que hab¨ªa conseguido enredarle.

Ayer aplac¨® a Shapovalov y, por lo tanto, figura de nuevo en el p¨®ster de los cuatro mejores en Flushing Meadows. Savia nueva, la llegada definitiva de los nacidos en los noventa, siendo ¨¦l el m¨¢s veterano y el quinto de esa d¨¦cada que se cuela en dos semifinales de Grand Slam, junto a Dominic Thiem (5), Milos Raonic (3), Grigor Dimitrov (3) y Zverev (2).

¡°Han coincidido tres jugadores incre¨ªbles en la misma ¨¦poca, con una longevidad fuera de lo normal. Ser¨ªa importante para el tenis que haya nuevos campeones y ojal¨¢ sea yo, pero a¨²n quedan grandes jugadores y alguno con m¨¢s experiencia que yo en las rondas finales de este tipo de torneos¡±, coment¨®.

En cualquier caso, desde hace tiempo Carre?o dej¨® de ser ese Pablo de cara angelical para ganarse definitivamente el respeto de colegas y aficionados. No as¨ª el de Kyrgios, pero quiz¨¢ el australiano termine cambiando de opini¨®n. Es Pablo Carre?o, con ? pese a que el r¨®tulo anglosaj¨®n del torneo (Carreno) se la arrebate. Carre?o, un competidor con todas las letras.