La versi¨®n m¨¢s superviviente de Serena
La estadounidense est¨¢ a solo tres triunfos de su 24? grande, pero no intimida y compite a marchas forzadas. Se aleja de Roland Garros y afronta (18.00) a la sorprendente Pironkova por las semifinales
Dec¨ªa Serena Williams hace unos d¨ªas que, de alguna manera, se siente identificada con Andy Murray, quien se resiste a colgar la raqueta y retorn¨® el curso pasado al circuito despu¨¦s pasar dos veces por el quir¨®fano y rehabilitarse con una cadera de metal. ¡°Soy una gran admiradora, me recuerda a m¨ª¡±, comentaba la estadounidense, quien tambi¨¦n, de alguna forma, ha ido adoptando ese instinto de supervivencia del escoc¨¦s, todo orgullo, todo resiliencia, para seguir adelante e intentar cerrar el c¨ªrculo con su 24? grande.
¡°Tengo 38 a?os y juego con total normalidad. Mi principal enemiga soy yo¡±, prolongaba en un discurso en el que, como viene siendo habitual, emple¨® la tercera persona para referirse a s¨ª misma. ¡°Nunca me doy por satisfecha, esa ha sido mi historia y as¨ª lo ser¨¢ hasta que me retire. Llevar cada ma?ana el nombre de Serena a la espalda significa un gran estr¨¦s, pero como dijo Billie Jean King, la presi¨®n es un privilegio. Soy afortunada de estar en esta posici¨®n, de ser Serena¡±, resolv¨ªa.
Sin embargo, detr¨¢s del escudo dial¨¦ctico la norteamericana sabe mejor que nadie que la mecha se agota y sus balas tambi¨¦n. Desde que regres¨® tras estrenar maternidad, en 2017, su recorrido refleja el meritorio logro de haber alcanzado cuatro finales de Grand Slam, pero cay¨® en todas ellas. Su tenis va perdiendo pegada, su cuerpo resistencia y su nombre capacidad intimidatoria. Serena ya no asusta. Lo saben las dem¨¢s y le aprietan, como lo hizo Maria Sakkari en el ¨²ltimo partido, o antes Christie Ahn, Margarita Kasparyan o Sloane Stephens. Y lo har¨¢ este mi¨¦rcoles (18.00, Eurosport), seguro, Tsvetana Pironkova.
Siempre ha tratado Williams de competir a pocos golpes, pero en su versi¨®n actual economiza m¨¢s que nunca sus esfuerzos. Se ha sostenido en el torneo gracias al servicio ¡ªlidera los aces (44) y la velocidad (199 km/h)¡ª y gravita sobre una parcela de dos metros cuadrados, de modo que cuando las rivales la sacan de su zona de confort sufre un mundo. 11 de sus 20 compromisos de esta campa?a los ha dirimido a tres sets. Tropez¨® dos veces en la antesala del US Open, tanto en Lexington como en Cincinnati, y si resiste es porque es toda una superclase que pese a las circunstancias sigue haci¨¦ndole muescas a la historia.
Doble embolia, priorizar la salud
Con 105, ya supera a Chris Evert como la tenista con m¨¢s triunfos en Nueva York, y ante su Sakkari firm¨® su victoria 100 en la Arthur Ashe. ¡°Soy muy apasionada. Este es mi trabajo, aquello por lo que me levanto y entreno 365 d¨ªas al a?o. Seguir¨¦ teniendo ese fuego y llevando a esa Serena a la pista¡±, contesta cuando se le pregunta por esos arranques de rabia tan expresivos, tan suyos. Y no rabia, pero s¨ª ni pizca de gracia, le hace el protocolo que anunci¨® Roland Garros hace dos d¨ªas. El grande franc¨¦s (del 28 de septiembre al 11 de octubre) aceptar¨¢ finalmente aficionados, aunque la mitad de los que pretend¨ªa, y obligar¨¢ a los participantes, sin excepci¨®n, a recluirse en dos hoteles ¨²nicamente.
El mismo escenario que en la burbuja del US Open, en realidad, con la salvedad de que el torneo estadounidense concedi¨® a los jugadores la posibilidad de hospedarse en una serie de alojamientos privados, a precio de oro. Se agarr¨® a ello Novak Djokovic, y por supuesto ella. ¡°Controlo mucho todo lo que hago ahora. Llevo 50 mascarillas cuando me muevo¡¡±, cont¨® a principios de agosto. ¡°Yo esperaba quedarme en mi apartamento de Par¨ªs¡±, lament¨® el lunes Williams, que en 2011 sufri¨® una embolia pulmonar que se repiti¨® hace tres a?os cuando dio a luz. Entonces, dijo en el escrito que comunic¨® a trav¨¦s de la CNN, estuvo muy cerca de la muerte.
¡°Siento que los franceses est¨¢n haci¨¦ndolo lo mejor que pueden¡±, continu¨®, ¡°pero yo no puedo decirles qu¨¦ hacer porque no dirijo el torneo. Si hay aficionados, entonces deber¨ªamos poder quedarnos en otro lugar. Interesante: no hay viviendas privadas, pero s¨ª hay fans...", cuestion¨®.
"Yo soy superconservadora porque tengo algunos problemas de salud graves, as¨ª que trato de mantenerme alejada de los lugares p¨²blicos. He estado alguna vez en una situaci¨®n muy mala, en el hospital, y no quiero tener que volver a pasar por eso. Voy d¨ªa a d¨ªa. Trato de mantener una distancia social de cuatro metros, en lugar de dos¡±, apostill¨®, dejando muy claro acto seguido que priorizar¨¢ su salud.
Es decir, Serena se aleja de Roland Garros. Pero no es la ¨²nica. La n¨²mero uno, la australiana Ashleigh Barty, confirm¨® el lunes que no participar¨¢ en la cita del Bois de Boulogne porque no quiere desplazarse ni correr ning¨²n tipo de riesgo. De esta forma, Nueva York adquiere una dimensi¨®n todav¨ªa m¨¢s capital para Williams, a solo tres partidos de la gloria. Tan cerca, tan lejos.
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