El Dakar reta a Fernando Alonso
El piloto asturiano se ha preparado a conciencia y con los mejores pilotos de la especialidad para el desaf¨ªo de ser competitivo en el desierto
Fernando Alonso se baja de su Toyota tranquilo. Ha sido una buena etapa. No le importa (todav¨ªa) la clasificaci¨®n de este Dakar 2020, en la que figura 11?; mira de soslayo a los tiempos (15 minutos le separan de la cabeza); y se f¨ªa especialmente de sus sensaciones, que le dicen que ha empezado con pie firme en Arabia Saud¨ª. Aunque r¨ªe lo justo y confiesa: ¡°Yo creo que aqu¨ª no se divierte casi nadie. Todos salimos con mucha incertidumbre¡±. Es una de las cosas que m¨¢s le atrae de la prueba, tan distinta de los Mundiales de f¨®rmula 1 y resistencia de los que viene, pero, competitivo y ganador, tambi¨¦n una de las cosas que le quita el sue?o. ¡°El tener por delante 300 o 400 kil¨®metros y no saber ni un metro de lo que va a venir es atractivo como piloto. Tienes que ir improvisando continuamente; adem¨¢s, el nivel de respuesta del coche es diferente a medida que avanza la etapa: salimos con 400 litros, acabamos con 50; los neum¨¢ticos responden diferente en las dunas, en la gravilla¡ tienes que adaptar la conducci¨®n a diferentes terrenos y condiciones de agarre¡±, explica. Nada que ver con rodar en un circuito cerrado, su especialidad, sobre asfalto, una y otra vez por la misma l¨ªnea, clavando los tiempos. En el Dakar est¨¢ fuera de su zona de confort.
¡°Me he cuidado menos que otras Navidades¡±
A Alonso, que se dice preparado por si tiene que hacer alg¨²n apa?o en su Toyota ¡ªhizo un test en Marruecos para trabajar la mec¨¢nica¡ª le preocupa da?ar el coche. Por eso se siente m¨¢s preparado f¨ªsica que psicol¨®gicamente. No ha cambiado su preparaci¨®n, pese a que el a?o pasado Al Attiyah perdi¨® siete kilos. ¡°Me dijeron que no viniese al 100%, as¨ª que en Navidad me he cuidado menos que otros a?os¡±.
El cambio de escenario, sin embargo, no le hace perder demasiadas habilidades. ¡°Tenemos un buen ritmo natural, eso es importante, sin forzar y arriesgar la velocidad de este primer d¨ªa ha sido buena¡±, concede su copiloto, Marc Coma, cinco veces ganador del Dakar en moto aunque novato en esta nueva faceta. ¡°Aqu¨ª el papel del copiloto es mucho m¨¢s importante de lo que cre¨ªa inicialmente¡±, se?ala Alonso, acostumbrado a recibir ¨®rdenes por radio y sentirse acompa?ado en carrera, monitorizado vuelta tras vuelta, con todo un equipo detr¨¢s. Su ¨²nica compa?¨ªa en el Dakar es Coma. ¡°Lo m¨¢s complicado es que t¨² ves muchas cosas y tienes que transmit¨ªrselo, hemos tenido que crear un lenguaje pr¨¢ctico para los dos, para que ¨¦l me entienda bien¡±, dice, El expiloto ten¨ªa cierto reparo al principio. Dar ¨®rdenes a Fernando Alonso no es f¨¢cil ¡ª¡°con todo el respeto que le tienes¡¡±, resopla¡ª, pero ha asumido que su tarea aqu¨ª tambi¨¦n es decirle cu¨¢ndo acelerar y cu¨¢ndo no.
Porque el objetivo de ambos es terminar. Y contemporizar. ¡°Pasar estas primeras etapas un poco de puntillas, sin hacer excesos ni nada extra?o, aprender de la carrera mientas estamos en ella¡±, asegura Alonso, que corri¨® sin correr demasiado su primera etapa dakariana. ¡°S¨¦ que tengo m¨¢s en el bolsillo, pero no es el momento a¨²n de sacarlo, en la segunda semana tenemos esperanzas de que la carrera est¨¦ m¨¢s definida, m¨¢s limpia; ah¨ª podremos apretar¡±.
La expectaci¨®n en torno a esta pareja es tal que el equipo ha dejado bien claro c¨®mo y cu¨¢ndo hablar¨¢ la estrella, que se sit¨²a por detr¨¢s de una cinta para atender a los periodistas ¡ªa todos a la vez; no conceder¨¢ ni una sola entrevista personal¡ª; lo hace amablemente y se extiende en sus respuestas. Alonso ya advirti¨® antes de empezar la carrera que se sabe en el punto de mira. ¡°Siempre se espera mucho de m¨ª, mi vida es un poco estresante en ese sentido¡±, concedi¨®.
Entorno protector
Quiz¨¢ por eso su equipo lo protege. Quiz¨¢ por eso, tambi¨¦n, el asturiano, de 38 a?os, prefiere rodearse de los suyos. Refugiarse en su caravana, junto a su mano derecha, su amigo de la infancia Galle, Alberto Fern¨¢ndez, a quien conoce desde sus inicios en el karting, y junto a su fisioterapeuta, Edoardo Bendinelli, el exmarido de su hermana, que aqu¨ª hace las veces de fisio del resto de pilotos del equipo. Aunque junto a Galle es el responsable de que la caravana en la que dormir¨¢ y desayunar¨¢ cada d¨ªa el campe¨®n del mundo llegue al campamento pertinente. Porque, pese a sus ganas de recluirse con sus amigos de siempre, Alonso se siente c¨®modo con la idiosincrasia del Dakar, con el d¨ªa a d¨ªa de dormir en la autocaravana ¡ªhace ya mucho que los mejores pilotos no duermen en tiendas de campa?a¡ª o cenar con el resto del equipo. ¡°Me gusta el ambiente aqu¨ª, ver c¨®mo trabajan en el coche, ducha, cena y ponerme en modo ahorro de energ¨ªa¡±, cuenta.
El corredor, que no ha parado de ponerse retos desde que dej¨® la f¨®rmula 1 ¡ªse le resisten las 500 millas de Indian¨¢polis¡ª, se siente preparado para acercarse al top 10 en el rally m¨¢s duro y popular del mundo. Hace ya a?o y medio que a Glyn Hall, director del equipo Toyota, le pidieron opini¨®n. ?Ve¨ªa a Alonso en el Dakar? ?Podr¨ªa Toyota ayudarle a ser competitivo como hizo antes con Giniel de Villiers, otro piloto que ven¨ªa del asfalto? Hall lo tuvo claro. ¡°Lo primero que ten¨ªa que hacer era probar el coche, as¨ª se lo dije nada m¨¢s terminar el Dakar del a?o pasado¡±, concede. Y se lo llev¨® a su pa¨ªs de origen, Sud¨¢frica, y all¨ª, en el desierto, De Villiers le mostr¨® el camino.
¡°Despu¨¦s de aquella primera prueba ya ten¨ªamos claro que Fernando ten¨ªa las cualidades que se necesitan para esto. Adem¨¢s, ten¨ªa la energ¨ªa y la pasi¨®n para afrontar este nuevo reto¡±, explica. La dupla Alonso-De Villiers se prob¨® tambi¨¦n en Namibia y en cuanto el espa?ol termin¨® las 24 horas de Le Mans se puso a preparar el Dakar: Polonia, otra vez Sud¨¢frica (ahora con Coma) y Qatar (junto a Al Attiyah); estuvo dos veces en Marruecos, donde disput¨® el rally; fue tercero en la prueba Al Ula-Neom, escenario al que volver¨¢ en unos d¨ªas, y complet¨® su formaci¨®n en Abu Dabi. Adem¨¢s, se ha empapado de los v¨ªdeos que Hall le ha enviado de Di Villiers. No le ha ido mal. Pero le quedan otras 11 etapas por delante.
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