El Mallorca flojea ante el Valladolid

Le empieza a apretar el zapato al Mallorca, que tras sumar 17 de sus 18 puntos en su feudo no consigui¨® que fuese un fort¨ªn ante el Valladolid, un rival directo que llevaba nueve jornadas sin ganar. El ¨²ltimo triunfo del equipo castellano hab¨ªa sido justamente ante el Mallorca. Por esas cosas de la asimetr¨ªa en el calendario, se han vuelto a cruzar menos de tres meses despu¨¦s de aquella cita. Otra vez fue un b¨¢lsamo para el equipo que dirige Sergio Gonz¨¢lez, que se dispara en la clasificaci¨®n siete puntos sobre el Mallorca. Y el golaverage. A estas alturas no deja de ser un tesoro.

El Valladolid no fue t¨ªmido. Y fue tan s¨®lido como acostumbra. Le falta gol, de hecho no hab¨ªa marcado en sus cuatro ¨²ltimas citas lejos del Nuevo Zorrilla. Pero en Palma le bast¨® con un gol fabricado por sus dos delanteros, un caracoleo de Guardiola acostado a la derecha y un remate de Enes ?nal en el coraz¨®n del ¨¢rea. Fue al poco de empezar la segunda parte, tras un tiempo en el que el Valladolid apenas hizo concesiones y se hizo inc¨®modo para un rival nada sobrado de recursos.

El Mallorca comenz¨® remol¨®n, pero creci¨® con los minutos. Marc¨® incluso, pero el VAR determin¨® que antes del remate del siempre industrioso Dani Rodr¨ªguez la pelota hab¨ªa salido por la l¨ªnea de fondo. Ya entonces ten¨ªa pinta de que el partido se iba a alumbrar con los faros de quien lograse adelantarse en el marcador. Cuando se vio en ventaja supo cerrarse el Valladolid por m¨¢s que Vicente Moreno maniobrase de inmediato. Llam¨® a Kubo para que operase como agitador. Quiz¨¢s al japon¨¦s habr¨ªa que verlo m¨¢s por dentro, pero en el Mallorca le sit¨²an cerca de la cal. Aun as¨ª le dio otro aliento al equipo, incluso se acerc¨® al empate en un intento que se fue cerca del palo.

Insisti¨® el Mallorca, que redobl¨® su presi¨®n cuando ya no sobraba aliento. Pero no se achant¨® el Valladolid, que siempre busc¨® la sentencia. Acab¨® encerrado, pero ordenado, pendientes unos y otros del VAR, que pas¨® por su tamiz una acci¨®n de M¨ªchel en la que el bal¨®n pas¨® cerca de su brazo. Nada ocurri¨® en un final trepidante en el que el Mallorca quiso y no pudo. Pero no puede dejar de remar: el domingo que viene le aguarda una nueva final en casa del Espanyol.