De saltar la valla a ser internacional con Espa?a en rugby
El camerun¨¦s Thierry Futeu relata su incre¨ªble historia: atraves¨® media ?frica, salt¨® la valla fronteriza de Melilla y ahora es jugador de la selecci¨®n espa?ola: "El rugby me salv¨® la vida"
Thierry Futeu, Titi, se fue de casa en septiembre de 2013, cuando ten¨ªa 18 a?os. Recorri¨® media ?frica, desde Camer¨²n hasta Marruecos, salt¨® la valla fronteriza de Melilla y le llevaron a una ONG en Miraflores de la Sierra, Madrid. Seis a?os y medio despu¨¦s de su partida desde uno de los barrios m¨¢s pobres de Duala, es jugador profesional en el Stade Fran?ais, uno de los clubes con m¨¢s solera de Francia, y compite con la selecci¨®n espa?ola de rugby. Una vez expuesto su fascinante y sobrecogedor relato, responde a una ¨²ltima pregunta. ?Te has planteado qu¨¦ ser¨ªa de ti ahora de haber seguido en Camer¨²n? ¡°Viendo donde viv¨ªa all¨ª, no s¨¦ si ahora estar¨ªa vivo¡±, reflexiona. ¡°Era un barrio, digamos, un poquito peligroso. Hab¨ªa peleas entre bandas, drogas, robos¡ All¨ª existe lo que llamamos la justicia popular: cuando pillan a alguien robando, la gente le pega hasta que lo matan. As¨ª he perdido varios amigos. Si siguiera en Camer¨²n¡ no s¨¦. El rugby es mi pasi¨®n, me ha salvado¡±.
De Eto¡¯o, al oval. ¡°Jugaba al f¨²tbol como la mayor¨ªa de los ni?os de Camer¨²n. Mi ¨ªdolo era Eto¡¯o (el exjugador, entre otros, del Bar?a, el Madrid y el Mallorca y la selecci¨®n camerunesa naci¨® en Duala, como ¨¦l). Pero hab¨ªa que pagar una cuota. Yo, en los estudios no iba muy bien. Mi padre (Jean-Claude) se enfad¨® y me dijo que se hab¨ªa acabado el deporte. Pero un amigo me llev¨® a un campo de rugby. Yo era un ni?o inquieto, pele¨®n. Me gust¨® el ambiente, la batalla en el campo. Empec¨¦ en el Union Rugby Club Bilongue. Pero no hab¨ªa ninguna competici¨®n all¨ª. Me llamaron para la selecci¨®n Sub 20 y pens¨¦: ¡®tal vez tenga un futuro en este deporte¡¯. Un amigo nos llam¨® desde Marruecos para que fu¨¦semos all¨ª¡±.
Marcharse de casa. ¡°A mi padre, que era muy estricto, le dije que me iba a jugar un torneo. Cog¨ª una mochila, puse dos pantalones, unas camisetas y la ropa de rugby y dej¨¦ la familia (su padre, su madre Clarisse y sus hermanas Syntiche y Huilda). En Camer¨²n, los ni?os nos gan¨¢bamos un dinerillo sacando arena de la playa que luego se dedica a la construcci¨®n, o ayudando a llevar las bolsas a los que compran en el mercado. Ahorraba para comprarme una bici. Cog¨ª ese dinero y me fui a Marruecos. Pens¨¦ que era una cosa f¨¢cil. No sab¨ªa lo largo y duro que iba a ser el viaje. Tomamos un autob¨²s; luego, hasta la frontera con Nigeria, un taxi; y all¨ª, otro. Yo no ten¨ªa m¨®vil, mi amigo s¨ª. En Nigeria se me acab¨® el dinero. Me lleg¨® el mensaje de mi padre para que volviera. Me envi¨® dinero. Fue un momento dif¨ªcil. Si volv¨ªa, sab¨ªa lo que me esperaba. Ten¨ªa que seguir. Atravesamos N¨ªger, un desierto, en parte en taxi y en parte andando. En Argelia estuvimos m¨¢s de una semana. Trabajamos recogiendo naranjas para sacarnos un dinero¡±.
Saltar la valla. ¡°Cuando llegamos a Marruecos nos dimos cuenta de que nuestro amigo no estaba jugando a rugby. Su objetivo era entrar en Espa?a. ¡®?Est¨¢s loco?¡¯ le dije. ¡®?C¨®mo vamos a cruzar la frontera?¡¯ Nos llev¨® de noche al monte Gurug¨² (en la costa norte de Marruecos). Se?al¨® y nos dijo: ¡®?Veis aquellas luces a lo lejos? Es Espa?a¡¯. All¨ª, en el monte, estuve desde septiembre hasta mayo. Nos constru¨ªamos tiendas cortando ¨¢rboles, con piedras y pl¨¢sticos. Pasamos mucho fr¨ªo. Hab¨ªa gente de diferentes pa¨ªses, Camer¨²n, Nigeria, Senegal, Costa de Marfil¡. Intent¨¦ saltar la valla la primera semana, pero no pude. Lo consegu¨ª a la tercera. Hay que correr. Y si la polic¨ªa marroqu¨ª te pega, es igual. Si te cogen, te llevan a Rabat o a otra ciudad. Durante un tiempo estuve con una familia en Fez. Ten¨ªan un restaurante y les ayudaba con la tierra y llevando comida. Pens¨¦ que no iba a poder llegar a Espa?a. Busqu¨¦ un equipo en Marruecos. La madre de la familia con la que viv¨ªa me vio en la cara mi deseo de intentarlo una vez m¨¢s. Me dio dinero y me dijo que si no lo consegu¨ªa, que volviera.
Sin papeles y en un equipo de polic¨ªas
Tras saltar la valla y vivir los primeros meses en Melilla, Titi fue trasladado. ¡°Nos enviaron a Madrid. Primero fuimos en un barco hasta M¨¢laga y, desde all¨ª, en autob¨²s hasta Miraflores de la Sierra. All¨ª nos acogi¨® una ONG, Movimiento por la Paz. Ten¨ªamos que estar unos seis meses all¨ª. Luego, te dan 300 euros y te buscas la vida. En mi caso, por edad, me permitieron estar un a?o, primero all¨ª y luego en un piso en el Pozo (Madrid). Encontr¨¦ un equipo, el Grif¨®n. Siempre he tenido much¨ªsima suerte. No estaba en su programa, pero me ayudaron a pagar el transporte hasta Ciudad Universitaria donde nos entren¨¢bamos. El primer d¨ªa fui pronto. Estaba esperando y de repente veo venir a varios con uniforme de polic¨ªa. Y yo, siendo ilegal y sin papeles, pens¨¦ que iban a hacer un control. Empec¨¦ a temblar. Resulta que eran mis compa?eros de equipo. A¨²n me entr¨® m¨¢s miedo. ¡®?Madre m¨ªa, d¨®nde me he metido!¡¯, me dije. Lo que me faltaba, siendo ilegal y entrenando con la polic¨ªa nacional. Les contaron mi historia y me dijeron, ¡®Bueno, Titi, si alg¨²n d¨ªa te para la polic¨ªa, ll¨¢manos¡¯. Desde entonces, empec¨¦ a ir por Madrid sin miedo. Era un equipo de Rugby XIII, una especialidad en la que no hab¨ªa competido. De all¨ª, un amigo me llev¨® al Barbarians y, despu¨¦s, al Majadahonda. Se me acababa el tiempo en la ONG. Luego me llevaron al Alcobendas, de Primera Divisi¨®n. All¨ª estaba Txiki Inchausti, un entrenador muy importante para m¨ª. Yo por entonces pesaba unos 85 kilos y jugaba de tercera o segunda l¨ªnea. (Mide 1,85 y trabaj¨® en el gimnasio para ganar m¨²sculo. Ahora pesa 115 kilos. Es explosivo y veloz). Txiki me convenci¨® para que jugara de primera l¨ªnea¡±.
Los efluvios de la Champions. Nunca lo olvidar¨¦. Fue el d¨ªa 28 de mayo de 2014. A las 5.30 de la ma?ana, que es cuando suele haber menos polic¨ªa. Adem¨¢s creo que hab¨ªa sido la final de la Champions (el 24 de mayo el Real Madrid gan¨® el t¨ªtulo ante el Atl¨¦tico) y estaban un poco relajados. La polic¨ªa de Marruecos es la que m¨¢s pega para impedir que saltes la valla. Se asustan porque vamos muchos. ?ramos unos 2.000. Solemos probar por pa¨ªses. Aqu¨¦l d¨ªa fuimos con los senegaleses y los somal¨ªs, que se tiran a saco, sin mirar d¨®nde est¨¢ la polic¨ªa. Entramos unos 450. En el lado espa?ol, si te coge la Guardia Civil o la Polic¨ªa Local te echan. Para nosotros, lo mejor era encontrarnos con la Polic¨ªa Nacional, nos encanta, porque ellos s¨ª respetan que, una vez en suelo espa?ol, ya tienes unos derechos. Me cort¨¦ un poco en una pierna. Nada importante. Entramos corriendo y gritando ¡®?Libertad, libertad!¡¯, y as¨ª fuimos hasta el CETI (Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes). All¨ª te ponen una pulsera de identificaci¨®n, te hacen ex¨¢menes m¨¦dicos, te dan un paquete con ropa y art¨ªculos de higiene personal y te asignan una habitaci¨®n o una tienda. Tienes que estar entre tres y seis meses. Te dan clases de castellano y de inform¨¢tica. Yo estuve tres meses y en Melilla me entren¨¦ alguna vez con un equipo en la playa¡±.
Los papeles y la selecci¨®n. ¡°Ya en Madrid, cuando estaba en el Alcobendas, expliqu¨¦ que necesitaba trabajo y papeles. Los papeles no me los pod¨ªan tramitar porque tienen que pasar tres a?os desde que llegas a Espa?a. Al tercer a?o empec¨¦ a subir el nivel y pudieron ayudarme (el a?o pasado gan¨® la Copa con el Alcobendas en una final ante el Barcelona). La Federaci¨®n me quer¨ªa para la selecci¨®n. Para m¨ª, era una manera de devolver lo que hab¨ªan hecho por m¨ª. Consiguieron los papeles, negociaron con la World Rugby, me admitieron para estar con la selecci¨®n espa?ola y debut¨¦ contra Alemania (17 de marzo de 2019). Cuando volv¨ª ya me empezaron a llamar clubes de Francia. El Stade Fran?ais me envi¨® billetes para que pasara la prueba (junio de 2019) y me firmaron por dos a?os. Era mi idea inicial, ir a jugar a Francia, donde tienen m¨¢s nivel. All¨ª s¨ª que puedes vivir del rugby. Adem¨¢s me reun¨ª de nuevo con mi novia francesa, Rehane, a la que hab¨ªa conocido en Madrid, donde ella estuvo estudiando. El Stade Fran?ais es otro nivel¡±.
El sue?o y la pel¨ªcula. ¡°Mi sue?o es llegar a disputar el Mundial con la selecci¨®n. Tengo solo una nacionalidad, soy de Camer¨²n. Me gustar¨ªa tener tambi¨¦n la nacionalidad espa?ola. Tengo problemas para viajar. A veces, en los controles en los aeropuertos, mis compa?eros pasan por un lado y yo tengo que ir por otro. Eso me afecta, me da un poco de verg¨¹enza. Este verano volver¨¦ a Camer¨²n. Estoy comprando material para ayudar a los equipos de all¨ª. Mi ilusi¨®n es montar la escuela de rugby m¨¢s grande de Camer¨²n, un centro aqu¨ª (el de Alto Rendimiento de Sant Cugat, donde se entren¨® la selecci¨®n varios d¨ªas), en el que los ni?os puedan vivir, ir a la escuela y aprender este deporte. Me han propuesto hacer una pel¨ªcula sobre mi historia. He dicho que no. Antes, quiero completar mi historia: ir al Mundial y demostrar lo que puedo hacer en Francia¡±.
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